Bala Perdida

PROTECCIÓN

León

Algunas veces subestimamos a las personas que amamos, nos empeñamos tanto en la necesidad de protegerlas como si nuestra vida dependiera de ello, supongo que eso es lo importante de amar, que te importe más la vida de otro que la de ti mismo. No me arrepiento de las decisiones que he tenido que tomar, me trajeron hasta Lux, pero si me avergüenzo de la forma como entré a su vida y más de la forma en que espero quedarme. Me doy cuenta de que no necesita que la protejan, me doy cuenta de que es lo suficientemente fuerte, incluso más que yo y lo peor, me doy cuenta de que de lo que más necesita resguardarse es de mí. Esta noche me invitó a quedarme, si lo hago ya nunca podré irme pero si no lo hago voy a reprochármelo toda la vida.

Unos días antes

—Si te refieres al Círculo te aseguro que si me tocas un pelo Withman y Garza van a rebanarte en pedacitos—esa mujer, la tal Paula que unos segundos atrás era una desconocida y que Lux me presentó como su amiga seguía apuntándome con su arma mientras yo hacía lo mismo. Creo que nuestras caretas habían quedado fuera desde el primer momento en el que nos vimos el uno al otro, tiene eso en la mirada, eso que también tengo yo, la delato y me delató, no pudimos ocultarlo, solo una persona que ha estado es este mundo de mierda podría identificarlo y los dos éramos el caso. La observe con detenimiento mientras Lux nos hacía su relato, detallé cada uno de sus movimientos, sus expresiones, su incomodidad, la forma como fingía sorpresa, me quedó claro que como yo, no era la primera vez que escuchaba esa historia. También ella desbordaba desconfianza contra mí, sentada a mi lado estaba en actitud defensiva como un gato que está dispuesto a saltar encima del ratón a cualquier mínimo movimiento. Estaba inquieto por saber qué quería esa mujer, ¿acaso Camila la había infiltrado en la vida de Lux tal y como Withman lo hizo conmigo? Tendría que averiguarlo. Por otro lado, una mezcla de emociones desde la repulsión hasta la vergüenza me embargaban, Lux estaba allí, abriéndonos su corazón mientras ambos fingíamos que desconocíamos los motivos de su desgracia y pero aun, participamos en ella, nos había elegido porque confiaba en nosotros, sentí asco hacia mí mismo por engañarla de tal modo.

— ¿Por qué sabes quién es Garza y Withman? —pregunté un poco apurado y mirando de vez en cuando hacia la puerta, Lux volvería en cualquier momento y no podía encontrar esta escena pero debía saber la verdadera intención de esa mujer, no tenía mucho tiempo.

— ¿Por qué lo sabes tú? —Me respondió inquieta por el inminente regreso de Lux a la oficina—quiero que sean quienes sean tus jefes los llames ahora y les digas que Paula Rodríguez quiere hablarles, tienes 2 minutos para hacerlo antes de que Lux vuelva—era una respuesta muy inteligente, haría lo que ella decía, si trabajaba para Camila, Withman me lo diría y si no era así me enteraría de quién era realmente. Sin bajar mi arma tomé mi teléfono del bolsillo apenas quitándole la vista de encima por un segundo en lo que marcaba el número, ella esperaba impaciente sin dejar de ver hacia la puerta.

—Código.

—Mase soy yo, comunícame con Withman.

—Código— volvió a pedirme mi amigo quien siempre se ha caracterizado por ser precavido.

—l315rjez3331—esperé en la línea, sabía que Mason estaría cerca de Withman, ahora lo considera su hombre de confianza después de Garza por supuesto, siempre he sabido que entre ellos hay secretos que mi amigo nunca va a contarme. Cuando llegó al Círculo se hizo indispensable para Marqués y después de que lo mataran tuvo mucho contacto con Withman, ahora que él estaba entre el grupo de los que sabíamos la verdad lo mantenía cerca siempre. Su lealtad era incuestionable, para él su vida comenzó el día que pudo salir de la selva y eso fue gracias al Círculo, estando en él pudo sacarnos a Emilia y a mí de ese agujero permitiéndonos volver a estar juntos, consiguió autorización para encargarse del entrenamiento de nuestros hombres, después de todo es lo mejor que sabe hacer, lo ha hecho desde que era un niño, cuando lo veía entrenando lo recuerdo como el niño en ese campamento junto a su padre el comandante cruzando esa pista de obstáculos para tratar de impresionarlo. Su posición en El Círculo le había permitido estar lejos de los problemas, pasó años sin dispararle a alguien, era rudo y hostil con los reclutas justo como debía ser para enseñarles disciplina, les enseñaba lo necesario para sobrevivir en ese mundo, era muy respetado y nadie se metía con él, de cierto modo encontró la paz que durante años de combate había buscado, no era un hombre de grandes aspiraciones, solo quería mantenerse a kilómetros de distancia de su padre y vernos a nosotros, sus hermanos de no sangre y el hijo de Emilia era su adoración.