56.- Estrategia

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En el castillo del rey.

Una seria reunión se estaba llevando a cabo en una pequeña sala.

Todos los grandes generales estaban con una expresión seria.

Leónidas, el gran general que llevaba una capa verde, aquel más fuerte fuerte del reino que controla el elemento viento, era quien llevaba la expresión más seria de todas.

Aquel con un alma libre no haría nada que fuera al contrario de su voluntad. Él mismo fué quien decidió luchar bajo las órdenes del rey y tomar está posición junto con está capa que representa su determinación.

A pesar de su naturaleza, siempre fué él que más se preocupada, por qué en su mente, nadie se podía interponer en su deseo, fuera quien fuera, y ese gran de deseo por su puesto era..

!Proteger el reino, a su ciudadanos y a su gran Rey!

"Ya llevamos mucho tiempo siguiendo las pistas de aquel sujeto sospechoso, pero cada vez que lo encontramos se esfuma como si desapareciera de repente.."

La expresión de Leónidas se volvió solemne de repente, a pesar de sus esfuerzos, no había logrado nada. Estaba preocupado de que aquel sujeto desconocido cumpliera su misión, ya que la sospecha de que sea un espía de otro reino era muy alta.

"Te entiendo, somos los grandes generales, las existencias más fuertes del reino elegidas personalmente por el rey. Pero no podemos atrapar a un pequeño mago.."

Por otra parte, la expresión de Marcos tampoco era tranquila.

Era el segundo más preocupado. Aunque su determinación no era tan grande como Leónidas, aún llevaría a cabo sus deberes como gran general.

A pesar de que todos tenían expresiones serías, comparado a las de Leónidas y Marcos, las de los otros dos generales era algo más superficial.

Rojo no podía soportar viendo esto y mientras suspiraba, casualmente habló.

"¿No creen que ya es el tiempo de que actuemos personalmente? Sé que su majestad confía en nosotros y espera que tratemos con esto, pero ¿Seguiremos ocultandonos asi?. Creo yo que nuestro gran Rey espera que actúemos, tomar esa decisión y patear el trasero de ese sujeto. Yo personalmente lo quemaré con mi llamas"

Rojo parecía entusiasmado cuando terminó con sus palabras. Por otro lado las expresiones de Marcos y Leónidas parecían entender ese punto.

"Rojo, me sorprende ese gran punto de vista, aún así.."

Leónidas parecía pensativo, sin embargo no termino sus palabras por qué fué interrumpido por Marcos.

"Creo que tiene razón. Sé que temes que ocurra una pelea complicada y que los ciudadanos se vean envueltos en la batalla. Pero creo que la seguridad del reino sería la más importante. Si realmente ese sujeto sospechoso es algún tipo de espía, si lleva a cabo su misión, nuestro reino podría estar el peligro de un posible ataque del enemigo. Una guerra y destrucción inminente podría llevarse a cabo aquí en nuestro reino. Este es nuestro hogar, nuestro territorio dónde yacen nuestras familias, amigos y nuestros seres más queridos. Definitivamente debemos protegerlo a toda costa. Es esa nuestra misión después de todo"

Las palabras de Marcos lograron conmover el corazón indeciso de Leónidas.

Leónidas era un tipo libre, y su misma forma de pensar, él creía que la felicidad de los demás se llevaría a cabo si fueran libres de ese pensamiento de que algo suceda. Para ser más exactos, al igual que él en estos momentos, este tipo de preocupaciones, solo las debería llevar él no el resto de sus ciudadanos, por ello, llevaría este conjunto de ideas y preocupaciones con él por todos los demás.

Reencarnación AfortunadaWhere stories live. Discover now