El mejor error de mi vida (Segunda Temporada) ●[EDITANDO]●

Capítulo 52:"Pésimo día"

Narra Erika

- tranquila, ya paso - dijo Lucas con la voz calmada.

- m-me duele - murmuré apretando los dientes a la vez que trataba de regular mi respiración.

- lo sé, hermosa. Pero solo hasta que te calmes, luego ya no dolerá - me acarició con delicadeza mi espalda - todo estará bien Erika, relájate -.

Asentí respirando profundo mientras me lavaba la boca con agua, había vomitado otra vez. Todo lo que estoy pasando me hace sentir enferma.

Apenas son las una de la tarde y ya he vomitado cuatro veces desde que desperte, me duele horrible el estomago.

Me abrazo a mi misma y salgo a duras penas del baño, me estoy cansando y me dan ganas de llorar aún más cuando escuchó el llanto de mis hijos otra vez.

- Erika, vas a.... - lo interrumpí.

- no, ya me he sacado algo de leche si podrías dárselos por favor, esta en el refrigerador - realmente no quería ver a mis hijos por ahora, se que sueno como la persona más cruel rechazando a sus hijos pero es que no puedo.

Lucas asiente y va a por los biberones, como puedo subo a mi habitación, cada escalón era una tortura. No me siento para nada bien y lo peor es que tengo miedo por alguna razón.

Temblaba y estaba comenzando a sudar frio sumado al dolor que sentía en mi estómago el cual empeoraba absolutamente todo. Me recosté intentando calmarme giraba de un lado a otro y me tapaba con las sábanas.
Cuando estaba por caer dormida siento una presencia alado mío. Mis ojos se llenan de lágrimas al verlo.

Narra Nahuel

Ni siquiera pude cerrar la puerta cuando la vi sentarse de golpe en la cama, ya vi lagrimas en sus ojos...

- N-nahu -.

- shh, ya - murmuré y me acerque rápidamente para poder abrazarla - ya estoy aquí, tranquila, princesa - besé con delicadeza su frente - siempre estaré contigo - la escuché suspirar a la vez que sorbia su nariz - te cuidaré... -.

(...)

Me separo con cuidado sin despertarla, se ha quedado dormida llorando en mi hombro, me duele verla. Esta delgada, sin ese hermoso brillo en sus ojos, sin la alegría y el amor de siempre, se nota lo cansada que está en su rostro, está rota....

No quiero llorar así que solo bese su frente y me aleje, fui hasta abajo y me apoyé en el marco de la puerta mirando como su amigo le daba de comer a los gemelos.

- ¿quieres ayuda? - sonreí un poco, estaba tratando de alimentar a los dos al mismo tiempo.

Él asintió y me acerqué, cargué a Ailyn y acerqué el biberón a sus pequeños labios, ella de inmediato abrió la boca y empezó a tomar de este.

- ¿cómo ha estado? - pregunté rompiendo el silencio pero el solo niega con su cabeza.

"Mierda". Pienso.

Ya no sabemos que hacer por ella, queremos quedarnos por un tiempo con los niños y aunque Cristián logró llevarse a Dylan ella no quiere soltar a los bebés por nada del mundo aunque ahora precisamente no esté tan apegada a ellos.
Ya sea por el amor, apego o, creo yo, porque obviamente aun son pequeños y necesitan a Erika en todo, tal vez solo sea su instinto el que hace que se aferre a ellos de esa manera. No la culpo y se que necesita tiempo, tal vez este entrando en una profunda depresión.

- ¿tienes alguna idea? - le preguntó con algo de esperanzas.

- algo así, pero no se si funcionará -.