Jo no es nombre de chico(Editando)

17. Bienvenido Mister Prislow.

El día amaneció negro y lluvioso vaticinando los negros acontecimientos del día.

Más que el día de los representantes, en St.Jude sería el dia del caos. Aunque nadie sospechaba nada a esas horas de la mañana.

Después de vestirme con el estupido uniforme y recogerme el pelo en una trenza de espiga para que no me molestara durante las clases, abandone la calidez de mi cuarto para encontrarme con el huracan Jack, todavía en pijama, y visiblemente estresado.

Dicen que la semana universitaria tiene muchos efectos secundarios en los estudiantes, algunos como mi hermano aprovechan la oportunidad para revelarse contra los padres, otros como Ian duermen la mañana esperando levantarse en algún otro lugar lejano muy lejos de las responsabilidades y restricciones, y algunos cómo Jack se dedican a beber cantidades industriales de café y a estresarse mientras revisan por novena vez la oferta universitaria de cada universidad de la Ivy League.

- ¿Has visto unos papeles por aqui?- preguntó Jack mientras seguia dando vueltas por la habitación.

- ¿Papeles?- pregunté todavía dormida. A partir del tercer café empiezo a ser persona, pero antes ni siquiera puedo razonar de forma humana, ni responder preguntas sencillas.

- Folios, DINA-4, escritos con un boli bic negro- Dijó Jack sin ni siquiera interrumpir su busqueda para mirarme.

La habitación estaba echa un desastre, delatando que Jack debía de haber estado ya buscando aquellos ''valiosos'' papeles un buen rato.

- Ni idea.-Son las ocho de la mañana ¿Cómo tienes tanta energia? Necesito un café.- Protesté mientras me frotaba los ojos que seguían tratando de acostumbrarse a la claridad que se filtraba con el ventanal de la habitación.

- Esos papeles son de suma importancia.- Dijó Jack mientras seguía revolviendo cada rincón.

- ¿Y eso?- pregunté con curiosidad despertándome por completo. Jack casi nunca se estresaba, era demasiado comodón, y a la par que suertudo, las cosas siempre le iban suficientemente bien cómo para preocuparse por algo que no fuera el futball, las chicas y su propio aspecto. Esos papeles tenían que ser muy importantes para él.

Una simple pregunta no pidía despertarme, pero un misterio/cotilleo si. Esbozé una ligera sonrisa,aquel tiempo con Robert había hecho que me volviera tan cotilla cómo él.

- Tengo apuntado mi discruso.

- ¿Vas a dar un discurso esta noche?- Pregunté burlona. Sabía que no podía reirme de sus intentos de impresionar a los representantes de las universidades, pero la sola imagen de Jack vestido con traje, corbata y traje de intelectual no me indunfia mucho respeto.

- No en público pero si al representante de Harvard. -Quiero impresionarle con un discurso de dos mil palabras sobre el capitalismo y sus consecuencias positivas y negativas.

- ¿Harvard?.- pregunté con curiosidad. Harvard tambien pertenecia a la ivy league y junto con Princeton y Yale a la santa trinidad. Aunque no lo admitiría nunca en voz alta, le quería demasiado, Jack pegaba más en el grupo de niños mimados de Brown, que en el de intelectuales de Harvard.

- El bussines school de Harvard es el mejor del continente, y me antevería a decir que también del mundo. Aquí esta!- dijó sacando cinco hijas de papel cuadriculado detrás de un cojin del sofá.

Había compartido habitación con Jack durante casi dos meses, y nunca le había visto tan nervioso... Es más nunca pense que Jack pudiese estar nervioso: era el guaperas despreocupados que siempre conseguía lo que quería con su sonrisa. Desde encandilar a la directora pora saltarse castigos, hasta retrasar fechas de entregas,e incluso funcionaba con los profesores.