Steel Heart «JB» [Hot]

Capítulo 8 "Completamente Jodido"

Completamente Jodido

El agua hacía magia, la resaca se había pasado.

Era increíble poder sentir el agua contra mi cuerpo, todos estos días han sido agitados, Kyle sigue molesto por eso no me ha llamado, debería llamar y quedar con él, debo disculparme y es que ni yo misma se porque deje ganar a Justin, no le vi sentido, por supuesto pude haber ganado.

Pero tengo la satisfacción de su enojo al haber pensado que alguien lo dejo ganar, por que así fue, lo deje ganar.

Relamí mis labios, esos ojos mieles, el no salía de mi cabeza. ¿Y ahora que pasaba? Yo nunca, nunca podría estar con una persona como Justin.

Yo nunca podría estar seriamente con alguien.

Espero que no me guste más de la cuenta por que se que él saldría lastimdo, siempre es así.

No importa que hijo de puta sea, yo siempre termino lastimando a cualquiera que se enamore de mi.

Justin PDV

—Joder tío, ¿la trajiste aquí?—preguntó Ryan

—Sí, ya te dije, y es que joder es la primera vez que una mujer se me resiste tanto tiempo. No sé qué hacer para llevarla a la cama—dijo frustrado.

—Seguro por eso estás así de encaprichado con ella, ya se te pasará.

—Ryan me siento desesperado ¿qué hago? Quiero que ella se sienta así por mi.

—Espera, ¿Qué estás diciendo? Si quiera te escuchas. Justin, llevas conociendo a la mujer muy poco tiempo, ¡muy poco tiempo! ¿y ya te sientes desesperado? Joder ella te esta cambiando.

—¿De qué mierda hablas?

—De que te escucho amigo y estás loco por ella, si fuera otra te buscabas a alguien más y listo. Joder así que ella es diferente, ahora quiero conocerla—dijo mi amigo con un sonrisa.

—No me está cambiando, ella no es diferente, bueno si, pero... ¡Agh! ¿de qué hablas?

—Por supuesto que sí, casi te deja sin miembro, te dejó solo más de dos horas en la deriva y sin embargo aún vas detrás de ella. Habían cincuenta mujeres a tu alrededor todas jodidamente buenas y anoche cuando la viste caminar con esa falda tan corta te volviste loco y saliste detrás de ella. ¿Desde cuándo acá tú haces eso por una mujer? Te tiene jodido—dijo mi amigo con una carcajada

—Cállate la puta boca—gruñí molesto.

—No me puedo callar otra cosa.

Rodé los ojos.

¿Y si tenía razón? No, no, no. Yo solo la quería para una noche, o para muchas noches... Pero de puro sexo.

(...)

Una semana, una puta semana sin verla, sin encontrarla en las carreras, me estaba volviendo loco, necesitaba verla, ni siquiera sabía donde mierda vivía, no sabía nada de ella, solo su número de teléfono.

Miré mi teléfono celular unas mil veces. ¿Enviarle un mensaje o no? Me pregunté.

Una, dos, tres, cuatro, cinco, seis minutos, ningún mensaje, ninguna llamada, nada proveniente de ella, es que era un idiota, ella nunca iba a llamarme.

Tomé el teléfono y muerdo mi labio inferior, doy un suspiro y marco su número.

Ella contestó en el tercer pitido.

—¿Hola?—contestó con voz angelical.

—Hola preciosa—conteste sonriente, es que escuchar su voz me hacía mucho bien. Dios, ¿qué estoy diciendo? Bueno, no es que me haga bien, simplemente desde que la vi supe que me metería entre sus piernas, Dios, está preciosa.