¡𝓔𝓵 𝓪𝓼𝓮𝓼𝓲𝓷𝓸 𝓭𝓮 𝓵𝓪 𝓷𝓮𝓫𝓵𝓲𝓷𝓪!

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Las aguas se movían tranquilamente. Un bote transportaba a Tazuna y al equipo 7 por el mar, atravesando la neblina. A pesar de tener motor, el hombre que lo dirigía estaba remando. Kiba y Sasuke discutían en voz baja.

-¡Te digo que soy el mejor de los ninjas de nuestra generación!

-Si, claro, y el Segundo Hokage adoraba a los Uchiha -habló sarcásticamente- No me llegas ni a los talones.

-¡Nozomi-chan! ¡Dile a este baka que soy mejor que él!

-Vamos Dobe, sabes que soy superior a este perro.

-*La niebla es muy densa, perfecta para el camuflaje cachorra. Con el olfato del pulgoso, los ojos del baka Uchiha y Kakashi-gaki, más tu habilidad de sensor serían mortales en una batalla aquí. Aunque claro, funcionaría mejor con un Hyūga* -habló Kurama en la mente de Nozomi.

-Tienes razón -respondió observando alrededor.

-¿Ves Kiba? Hasta la Dobe me da la razón.

-¿Eh? -la Uzumaki reaccionó. Ella jamás de los nuncas le daría la razón al teme-pato-emo-vengador-del-clan-Uchiha a menos que fuera necesario.

-¡Nozomi-chan! -Kiba lloraba cómicamente

-El puente se verá de un momento a otro -interrumpió el hombre que remaba.- Si nos desplazamos por la lateral del puente, llegaremos al País de las Olas.

-Es gigantesco -la pelirroja estaba anonadada.

-Tazuna-san -dijo Kakashi- Antes de que el bote llegue al puerto, hay algo que me gustaría preguntarle. La identidad de los que te persiguen y el motivo por el que lo hacen. De otro modo, abortaríamos la misión llegando al puerto.

-Parece ser que voy a tener que contar la historia. -se resignó- Quiero decir, la verdadera historia. Como bien dices, esta misión está fuera de los límites contratados. Un hombre terrible va tras de mí.

-¿Un hombre terrible? ¿Quién es?

-Todos deben, como mínimo haber escuchado su nombre. El billonario transportista marino, Gatō

-¿Gatō? ¿Es el de la compañía Gatō? Es uno de los hombres más ricos del mundo. -se asombró Kiba.

-Si. Es el presidente de la compañía de transporte marino en el extranjero. Pero clandestinamente utiliza bandidos y ninjas para hacer contrabando de drogas. Incluso participa en trabajos sucios, como hundir otras empresas o países. Hace poco más de un año, fijó su objetivo en el País de las Olas. Entró en nuestro país utilizando la violencia y el chantaje como escudo, y rápidamente ganó el control del tráfico marítimo de las islas. En una isla como el País de las Olas, controlar el tráfico marítimo significa tener el control sobre todos los demás. Y la única cosa a la que Gatō le tiene miedo es que se complete lo que hace tiempo comenzamos... El puente.

-Entiendo. Entonces, esto significa que, siendo tú el constructor del puente, eres su objetivo. -razonó la ojizafiro.

-Lo que nos indica que los chūnin de la niebla que nos atacaron antes, trabajan para Gatō. -concluyó el Uchiha.

-Pero no lo entiendo. Es un poderoso hombre que utiliza grandes ninjas. ¿Por qué nos escondiste esa información cuando nos contrataste? -cuestionó el Jōnin

-El País de las Olas es extremadamente pobre. Ni siquiera Daimyo-sama vive en buenas condiciones. Y yo tampoco tengo mucho. No tenemos lo suficiente como para contratar una carísima misión de rango B. Si dejan la misión cuando lleguemos, me matarán sin duda alguna. Seguramente mientras voy a casa. Pero no los culpo a ustedes. Sólo mi nieto de 8 años llorará y llorará desconsolado. Y mi hija odiará por siempre a los ninjas de Konoha, y vivirá una vida solitaria. Pero no los culpo. -dijo dramáticamente

𝙐𝙯𝙪𝙢𝙖𝙠𝙞: 𝙚𝙡 𝙘𝙡𝙖𝙣 𝙚𝙭𝙩𝙞𝙣𝙩𝙤Where stories live. Discover now