Cuando Jimin entró en su habitación, Taehyung prácticamente saltó de la cama. Sin embargo, frenó en seco al ver la cara que tenía su amigo.
-¿Oye...-comenzó-... estás bien?
-Sí, estoy bien -Jimin se sentó en su escritorio y se masajeó las sienes.
-¿Seguro? Porque pareces un poco... cansado.
-Fue un día cansador.
Taehyung hizo un puchero, porque no estaba nada convencido. A decir verdad, se sorprendía de que su hyung ni siquiera hubiera preguntado qué hacía en su casa, más precisamente en su habitación,cuando él no estaba; pero sus dudas se quedaron en el aire cuando recordó qué había ido a contarle. Porque, después de todo, si Jimin se sentía cansado o triste eso podía alegrarlo muchísimo.
-Vamos a hacer una cena. ¡Una reunión todos juntos! -exclamó, abriendo los brazos como si fuera un avión.
-Mmmh... -Jimin rezongaba, metido en sus propios pensamientos.
Taehyung suspiró, exasperado.
-¿No me escuchaste? ¿Reunión? ¿Yoongi, tú, nosotros, Seokjin...?
-¿Acabas de llamar "nosotros" a ti y a Hoseok?
-¡Sí!
-Espera, ¿¡has dicho reunión!?
-Estás como muy lento. O sea, más que de costumbre. Me asustas.
-¡¡¡Es una idea...!!!
-¡¡¡Genial!!! ¡Lo sé! -al ver la cara de desconcierto del pelirrojo, se detuvo-. N-no ibas a decir eso, ¿cierto?
-Yoongi no va a ir.
-¿Por qué no?
-Porque lo conozco, y sé... -se trabó, sonrojándose-. Sé que no querrá conocer a Jin, n-no... No le interesan esas cosas.
-¿¡Por qué iba a ser tan aguafiestas!? Me pareció un chico muy simpático el otro día en la fiesta.
-¿Qué es exactamente lo que te simpatizó de él? ¿Que se agarra a las piñas con otro chico? -Jimin parecía realmente malhumorado.
-¿Por ti? Sí, claro que simpaticé con él por eso. Simpatizaría con cualquiera que saltara a defenderte, Jiminnie.
-A los golpes no es la forma, Taehyung.
-¿Estás tratando de ponerme en contra de tu novio?
-Yoongi no es mi novio.
-¿Entonces qué es? ¿Tu follamigo? -sonrió burlón, pero al ver la mirada completamente fría que le lanzaba su mejor amigo se sintió culpable-. ¿Puedes al menos preguntarle si quiere ir?
-Lo haré.
-Puedes, hum... ¿¡Hacerlo ahora!?
-¿Ahora? -repitió, anonadado, el mayor-. ¿Cómo que ahora? ¿Por qué?
-La cena es ésta noche.
-¿Quieres decirme cómo lograste convencer a Jin hyung de ir a una cena con los chicos?
-Esa es la mejor parte: fue idea de él.
-¿Qué? ¿Por qué haría algo así?
-Quiere conocerlos, saber por qué nos gustan tantos. ¡Así sabrá que nuestros chicos son geniales! Anda, Jimin, tienes que convencer a Yoongi.
-Te dije que iba a intentarlo, pero... -Taehyung hizo un puchero y Jimin rodó los ojos, divertido-. Lo haré, Tae.
-¡Aigooo! ¡Será genial! -Taehyung se dejó caer de espaldas sobre la cama de Jimin e hizo angelitos de sábanas-. ¡Será en casa de Hoseok! Aunque, teóritcamente, fue Namjoon quien puso lugar ya que también es su casa... ¿Me estás escuchando?
-Sí...
Taehyung se sentó de golpe, ya algo muy confundido.
-¿Te pasó algo en particular de lo que tenga que enterarme?
-Es sólo que... -Jimin lo miró, con los labios entreabiertos. Pero luego pareció pensárselo mejory terminó sonriéndole-. No es nada, olvídalo. Es genial que hyung quiera conocerlos, ¡de verdad genial!
-Lo sé, ¿verdad? Soy fantástico.
-¿No que la idea fue suya?
-Sí, bueno... Pero siento como que tuve algo que ver. A lo mejor los aliens oyeron mis plegarias.
Jimin arrugó la nariz y luego comenzó a reírse.
Si bien Taehyung estaba feliz y prácticamente no podía quedarse quieto en su asiento por más de tres segundos, se sentía bastante mal por su amigo. Al parecer, Yoongi se había prácticamente reído en su cara con aquella invitación y Jimin se lo había tomado muy mal; aunque aludía a que su mal temperamento se lo debía a que había tenido un día especialmente malo. Luego había añadido que le gustaría estar solo ese día, que no tenía ganas de ver a nadie y contagiar su mal humor.
Así que ahí estaba Taehyung, sentado en la parte de atrás del autazo de Namjoon, mientras éste lo manejaba y Seokjin iba de copiloto tratando de que la comida sobre su falda no se derramara por los costados de la bolsa. No pudo evitar pensar que era algo así como una salida con sus padres...
-¿¡Qué no puedes esquivar los posos!? -decía Jin, molesto.
-¡Eso intento! ¡No es tan sencillo!
-No puede ser tan complicado, jincha -el castaño, frustrado, apretó la comida contra su falda-. Me he pasado toda la tarde cortando verduras, Namjoon.
-Lo sé. Estaba ahí contigo.
-Aigoo...
Taehyung sonrió, simpatizando con ellos. Le parecían demasiado tiernos, ¡eran como la pareja ideal! Porque pese a las peleas originadas por su hyung, Namjoon siempre le trataba con paciencia y cariño. Y aquello era sencillamente adorable. ¡¡¡Ahhhh!!! ¡Se habían encontrado con un par de chicos increíbles en esa fiesta, sí que sí! Y era cosa del destino, ¿no? Que encajaran tan perfectamente, ellos tres. Bueno, sí, tal vez encajar no era la palabra adecuada; pero sin lugar a dudas se atraían como imanes: era ajeno a su voluntad. Inconsciente. Inevitable.
Namjoon estacionó el coche justo frente a la antigua casa desvencijada de Hoseok, y Taehyung salió disparado como si tuviera un cohete en el culo. Quería ser el primer rostro que viera su Hobi.
Le dió un toquecito a la puerta con el puño cerrado.
-¡Somos nosotros! -dijo.
La puerta se abrió rápidamente y, lo que vió, lo dejó boquiabierto; pues jamás había visto a Hoseok tan lindo. Bueno... él siempre era lindo, pero ahora estaba para quitarle la ropa (y eso que era la ropa lo que hacía la diferencia). Bien peinado, mostraba parte de su frente. Se había maquillado un poco, incluso. El suéter rayado le llegaba hasta las rodillas y los jeans claros le quitaban varios años de edad.
-Hobi... -murmuró Taehyung, tragando saliva.
-¿Cómo estás, Tae?
-Hobi...
El muchacho sonrió de esa forma que hacía que las nubes del cielo se marcharan para dejar el cielo plenamente despejado y con un cielo brillante, y Taehyung miró hacia sus pies, sonrojándose.
-Ven aquí -oyó reírse bajito al mayor, y luego sintió como sus brazos se enredaban en torno a sus hombros para luego abrazarlo. Abrió mucho los ojos, apretando los labios para no soltar algún chillido tonto. Cuando lo dejó de abrazar, pasó un brazo sobre sus hombros para no soltarlo-. ¡Hola! ¡Jung Hoseok! Mucho gusto.
-Kim Seokjin -murmuró el mayor, con la vista fija en Hoseok.
Al principio creyó que sería completamente un desastre. Seokjin era intimidante, demandante, amenazador; pero entonces se fijó en que Hoseok no había dejado de sonreír con toda la simpatía del mundo, como si realmente no se diera cuenta de que estaba siendo juzgado por su hyung. O, a lo mejor, se daba cuenta y simplemente trataba de mostrarle que no tenía por qué dudar de él, o algo así. Definitivamente eso lo hacía por Taehyung, ¿no?
Aigoo, Hobi... ¿Cuándo te darás cuenta de lo mucho que te gusto?
El celular de Jimin vibró al lado de su cara, sobre el colchón, y el muchacho dejó de pensar repentinamente en Jungkook, dándose cuenta de que hacía varios minutos que se encontraba en la misma posición y con al vista fija en ninguna parte específica.
Yoongi: Podemos vernos ésta noche?
Íbamos a vernos ésta noche
Yoongi: Sigues enfadado por eso? Ya te dije que no me van las reuniones de ese tipo
De ese tipo?? Y eso qué significa?
Yoongi: Deja de ser tan infantil, Jiminnie
Estoy ocupado ahora
Yoongi: Haciendo qué?
Simplemente no puedo salir hoy
Yoongi: Pero si podías salir a una estúpida cena?
Iba a hacerlo por Tae, pero la verdad es que tuve un día largo.
Yoongi: Aún así, podemos vernos? Necesito hablar contigo
Sobre qué?
Yoongi: Me enteré de algo ésta mañana
Yoongi: Me gustaría constatarlo
Anda, pregunta
Yoongi: No quiero preguntártelo por mensaje. Quiero preguntártelo a la cara y que me digas si lo hiciste o no
Jimin bloqueó su teléfono y lo dejó nuevamente sobre la cama, para volver a sumirse en sus pensamientos e ignorar las continuas vibraciones.
No pensaba responderle.
-¡Woaaah! Jincha... -suspiró Hoseok en la cocina-. ¿Lo preparaste tú sólo?
-¡Jin trabaja en un famoso restaurante! -se apresuró a responder Taehyung, ganándose una mirada reprobatoria por parte de su hyung-. Pero... supongo que él puede responder por sí mismo.
-Gracias, Tae -Seokjin le sonrió y volvió la vista hacia Hoseok-. Así es. De hecho, es una receta que lleva tiempo y muchas especias, en el rest...
Sus palabras se perdieron en el olvido, porque sinceramente a Taehyung no le importaba demasiado cómo lo había preparado. Su hyung solía molestarlo por eso y decirle que él "sólo era bueno tragando, no degustando". Y era cierto, en parte. Aunque, claro, le encantaba tragar lo que Jin preparaba porque siempre era de-li-cio-so.
-¿Quieres ver algo completamente impresionante y genial? -inquirió Namjoon de repente, a sus espaldas.
Taehyung se giró y al verle tan feliz no pudo menos que reírse.
-A ver, muéstr... DAEBAK.
Namjoon había abierto un pequeño mueblecito por debajo del televisor de la sala de estar, rebelando allí una inmensa colección de videojuegos. Había tantos, de tantos colores, tantos diseños, tantas variedades, que Taehyung prácticamente se deslizó de rodillas por el suelo hasta llegar allí y verlos más de cerca.
-¡Tienes el Butterfield 3! ¡¡¡Ya no se consigue!!! ¡Es el mejor!
-Mi padre lo consiguió para mi -se explicó Namjoon, sentándose a su lado en el suelo.
-Ah, ¿en serio? Debe de tener muchos contactos.
-Es una persona muy importante. Trabaja para el gobierno...
-¡Namjoon-ah! ¡Eso es genial!
-No es tan genial, en realidad, pero...
-¿Qué sería más genial que eso?
-Me gustaría que mi padre fuera un superhéroe, por ejemplo. Eso sería mejor.
Taehyung se rió.
-De seguro que aún sin capa es un superhéroe para ti. ¡Así son los padres!
-Sí... -respondió el pelirosa, distraído. Señaló con un dedo el mueble-. Escoge uno.
-¿Eh?
-Llévate alguno. Tengo demasiados aquí, y ya ni siquiera juego con ellos.
-¿¡Cómo es posible que tengas todo ésto y no lo uses!?
-Estoy ocupado.
-¿Haciendo qué cosa? -Taehyung ladeó la cabeza, divertido-. Me ha contado un pajarito que has terminado la universidad mucho antes, eres un alumno estrella; así que, ¿en qué estás ocupado ahora?
-Conquistando a Jin.
Taehyung volvió a reírse y tomó un juego al azaar. Uno que no conocía.
-Quiero éste -dijo por fin.
-No lo sé... Ese es difícil... -lo provocó el mayor.
-¡Pues mejor aún! Ya me aburren los fáciles, ¿qué puedo decirte? -observó la caja y luego la pegó con cariño contra su pecho-. Jungkook puede jugar conmigo.
Namjoon se lo quedó mirando un rato, luego frunció el entrecejo con confusión y sonrió.
-¿Jungkook? ¿Jeon Jungkook?
-Ahá...
-¿Se conocen?
-¿Nunca te ha hablado de mí?
-Bueno, no -Namjoon hizo una mueca, volviendo la vista a los videojuegos-. Qué raro -se quedó un rato pensativo-. Jungkook no ha logrado pasar nunca ni el nivel uno, es tu momento de brillar.
Tae asintió y se giró al oír risas en la cocina. Hoseok y Seokjin salieron de allí, ambos con vasos llenos de comida en los brazos.
-¡En serio! Y luego me dicen que soy como su madre, y cosas así -iba diciendo Jin.
-Créeme: te comprendo perfectamente -respondía Hoseok, dejando los platos en sus lugares-. Uno se preocupa y luego es insoportable.
-¡Eso! No lo comprenden.
-Jamás lo comprenderán -el castaño sacudió la cabeza lentamente, sonriendo.
Taehyung y Namjoon se apresuraron a ir a sentarse en la mesa, los dos mirando con mucha curiosidad aquella nueva escena.
-Pues ya te lo digo yo: piénsatelo, vente algún día... -siguió Jin, poniéndole condimento a su plato de carne de cerdo y verduras asadas-. Es un buen trabajo. Es limpio, buen trato, y buen dinero, por supuesto.
-¿De qué hablan? -interrumpió Namjoon, muerto de curiosidad.
-Seokjin me ha dicho que hay un puesto libre como mesero en el restaurante -explicó Hoseok, mientras el mayor le sonreía, orgulloso por su idea-. La verdad es que el trabajo en la tienda de música me estaba consumiendo.
-Pero... ¡hyung! ¿Estás seguro? Has trabajo en esa tienda por mucho tiempo.
-En el restaurante será menos tiempo y más dinero -siguió hablando Jin, mientras se llevaba una papa a la boca-. Tendrá al menos tres días libres a la semana, descanso por las tardes e incluso podrá comer allí. Además, con el buen currículum que Hoseok me dijo que tenía, creo que lo aceptaran sin dudarlo -levantó la barbilla, con suficiencia-. Por supuesto que, además, si yo lo recomiendo lo tomarán en seguida.
-Buau, hyung... -Taehyung no lo podía creer. Veía toda la situación con ojos muy abiertos-. Eso es muy considerado de tu parte...
-Realmente, Seokjin, no sé como podré agradecértelo -Hoseok le sonrió con toda la cara, los ojos, la nariz, las orejas; todo.
-Primero, renuncia a ese empleo que tienes -dijo el mayor-. Luego me agradeces. ¿Qué tal la comida?
-¡Espectacular! -exclamó Namjoon con, quizás, demasiado entusiasmo. Todos en la mesa, menos él, se rieron-. ¿Qué? ¡Es cierto! ¡Está buenísimo!
-Es verdad, no me extraña que tengas tanta fama en ese restaurante -Hobi se rió, feliz con su comida-. ¡Oh! Debes probar luego mi postre. ¡Es una receta de familia! Pero de seguro te gustará.
-¿El que tiene alcohol? -inquirió Namjoon.
A Taehyung le brillaron los ojos.
-Sólo un poco de ron, ya sabes. Es un postre muy dulce y sino resultaría empalagoso -se explicó el castaño, mientras Seokjin asentía lentamente y se servía un poco de zumo de naranja en un vaso.
Namjoon se rió en voz baja, abriendo una botella de soju para él, y el mayor lo miró como con advertencia. Taehyung, por supuesto, no comprendió el mensaje interno de éste suceso; pero también tenía cosas con su Hoseok.
-Ah, está caliente... -Taehyung sopló una banana asada, atrayendo instantáneamente la mirada de Hoseok. Tocó la punta con la lengua y luego se la metió en la boca, haciendo que el otro muchacho tragara saliva y apartara la vista-. Mmmh...
-¿Alguien quiere sal? -inquirió de repente el mayor, parándose de golpe en la mesa.
Él tuvo que aguantar la risa porque, más allá de la graciosa reacción de su hyung... ¡¡¡SE ESTABA QUEMANDO CON LA BENDITA BANANA!!!
Jimin suspiró, molesto, y terminó agarrando su celular. La cantidad de mensajes que tenía le asustó.
Yoongi: Es importante, Jimin
Yoongi: Déjame verte ésta noche
Yoongi: Vamos! Sigues enojado?? Jincha!!!!
Yoongi: Quieres responder???
Yoongi: Ah, ahora me estás ignorando?
Yoongi: No piensas ni un poquito en tu salud?
Yoongi: Yah! Niño! Responde!
Yoongi: No estoy jugando y me estás haciendo enojar
Yoongi: Estás en tu casa ahora mismo?
Yoongi: Jiminnie...
Yoongi: Voy para allá
Cuando oyó una piedrita chocar contra su ventana, pegó un respingo y el celular terminó en el suelo. Se paró rápidamente y abrió las cortinas. Yoongi yacía en el borde saliente de su ventana, con una mano en el árbol que había trepado.
Abrió las ventanas y sacó un poco su cuerpo hacia afuera.
-¿¡Estás loco!? -inquirió, exclamando entre susurros-. ¡Mis padres están cenando abajo!
-¿Y eso qué? Te he dicho que quería hablar contigo. ¿Acaso no tienes batería en el celular?
Yoongi se veía muy diferente a como era usualmente verlo vestido. Iba vestido con un conjunto deportivo, a decir verdad; como si hubiera sido su plan desde siempre escalar el árbol de su casa... Bueno, a lo mejor sí que lo había pensado.
-¿¡No podías esperar hasta la mañana!?
-No, no podía -Yoongi entró en su habitación y se abrió la chaqueta. No parecía demasiado enfadado, y eso casi que sorprendía a Jimin-. Oye... Eh, ¿por qué me miras así?
-No puedes irrumpir en mi casa cuando te plazca. No puedes simplemente venir, escalar ese árbol, entrar. De hecho, ¿sabes qué? No puedes meterte así en mi vida, mandarme tantos mensajes cuando claramente no quiero responder, no puedes... -se calló.
Bueno, en realidad Yoongi lo calló.
Apenas había sido un roce de labios, cálido, seco, dulce. Yoongi incluso había rosado su mejilla con su mano. Cuando se alejó, Jimin había dejado de hablar y ahora yacía rojo desde la coronilla hasta la punta de los pies.
-¿Ya terminaste? -inquirió el peliverde, impaciente. Jimin no respondió, y éste se cruzó de brazos y soltó un suspiro cansado por la nariz-. ¿Quieres decirme qué sucedió con Jungkook en el baño?
Jimin pasó del rojo al blanco.
¿Qué?
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Hola!! Espero que estén muy bien, muy felices y muy sanas!! Las quiero mucho, sabían eso? Lo digo en serio, muy en serio. Y por eso vengo a recordarles que me pueden buscar en instagram, soy babioak, y si quieren hablar, saludar, contarme de sus problemas, no sé, lo que sea, yo estoy disponible siempre!!
P.D.: Las quiero mucho de vuelta!! Coman bien, abríguense si hace frío o desnúdense si hace calor (bueno, em...); salgan de sus casas a tomar aire, miren el cielo, griten, bailen, sean agradecidos, den muchos besos!!! Aiiiish me siento tan contenta por ninguna razón aparente y leer sus comentarios me pone tan tan contenta que aaaaaaaaahh gracias por tanto amor!!
P.D.2: Saben qué día es hoy? J HOPE DAAAAAAAAAAAAAY
Quiéralo, apóyenlo, denle tanto amor como al resto de los chicos porque se lo merece!! He's your hope, he's your angel, he's...