INTRODUCIR: BEATIFUL WORLD-DA CAPO VERSION
[Hola mamá, ¿Cómo estás? ¡Aquí a tu hijo le está yendo muy bien!]
El televisor una vez mas es encendido y este no es apagado cuando la puerta de aquel departamento se cierra dejando escapar una cabellera verdosa que al salir al pasillo donde una decena de puertas mas se extienden hacia delante.
―Puede parecer curioso estas situaciones pero al parecer muchos ya muestran su disgusto sobre estas cosas. Las personas comienzan a ver pequeñas fisuras entre la lógica de los sucesos. Incluso en esta mañana ya me encontré a un grupo de niños de primaria hablando sobre esto. Es algo ¡Increíble! ―dijo el hombre que se encontraba sentado frente a la cámara televisiva que se encontraba transmitiendo un noticiera matutino.
―Este fin de semana se vieron muchas cosas en este ciudad Miyamura-Kun, pero ninguna se compara con lo sucedido en los suburbios Áspera de la calle 12 al oeste la de ciudad ―agrego la compañera de noticias de este hombre, la mujer de cabello enredoso casi como si este no hubiera sido peinado con anterioridad pero se podría suponer que es debido a su quirk.
[Ya han pasado un par de semanas desde que ingrese a la U.A, la escuela de héroes y heroicidades de nuestra ciudad. La mas grande escuela de héroes jamás creada en japón, ¿Lo puedes creer?]
En las tiendas que muestran sus productos a través de grandes ventanales que reflejan la calle entera en sus escaparates donde algunas personas ya sea por diversos asuntos llegan a ese lugar se detienen a ver las televisiones que se adjuntan una al lado de la otra permitiendo escuchar muy ligeramente la voz del noticiero.
Es de esta manera que el grupo de unas tres o cuatro personas separadas por unos pasos que miran las noticias, justo a sus espaldas se logra ver un chico corriendo a gran velocidad con un maletín entre manos.
―¡Estas cosas jamás habían ocurrido! ―exclamo con una molestia visible un hombre de edad avanzada quien estaba al final de su calle con su casa detrás de él mientras una reportera le extendía el micrófono, lo suficiente como para que este saliera en toma―. En Áspera jamás habían ocurrido ataques como estos. Siempre supe que esa familia era algo especial debido a como conllevaban las cosas. Tan solo el padre de familia era el único decente. Me impresiona mucho el hecho de que todo se haya resuelto de esta manera ―aun mantenía ese tono de disgusto.
Entonces fue que la cámara corto y regreso la imagen al estudio donde el par de presentadores miraban hacia un lado cuando estos regresaron su mirada al frente, justo a los televidentes.
―Justo como lo vieron. Los miembros mas respetados de este vecindario se vieron muy afectados con lo sucedido este fin de semana, y por su puesto el no es el único, hay muchas mas personas esperando dar su opinión sobre este tema eh incluso diría yo que aquellos que no han querido esperar ya están circulando por las redes los videos de aquel complejo asunto.
[Todo este tiempo... no sabría decirte si fue uno corto o uno largo. Ni yo mismo puedo entenderme. Incluso diría ahora que me encuentro algo avergonzado contándote todo esto. Supongo que estarás sorprendida y tampoco creas que mucho ha pasado pero... aun así quiero contarte algo, es por eso que quise hablar contigo.]
Despues de la gran aparición de los quirks en china y alrededor del mundo, la seguridad de todos se torno tan inestable como una roca haciendo equilibrio sobre una torre de gelatina. Y pensar que todo esto sucedió en tan poco tiempo.
No paso mucho, tan solo fueron un par de meses cuando se pudo confirmar que el ser humano había sido conectado con una nueva etapa evolutiva, la mutación de los genes trajo a este maravilloso mundo la capacidad del uso de poderes, «Dones».
―"La flor de la putrefacción" ―cito en un hilo de voz Miyamura, el hombre de traje color grisáceo con una corbata azul que para nada le hacia juego pero debido a que su esposa era regularmente estricta en las cosas que ella le regalaba a su marido, era usual que este se viera vistiendo ropas que para nada van a juego.
―Un don que por lo que se logro ver en los videos filtrados a través de la red parece tener un funcionamiento algo curioso ―tras comentar, la gran pantalla de transmisión detrás de ellos mostro lo que era una flor bastante peculiar pues esta tenia cierto parecido con los pétalos que se liberaban cada vez que Hanna usaba su quirk de manera exponencial.
―Otro don como esos y seguramente esta ciudad estaría en problemas ―dijo con una risa ahogada.
―Tienes razón ―consolido su compañera quien lo acompaño con aquella pequeña risa.
Aquel chico de cabellera verdosa que se sacudia con el ondeante viento matutino se encontraba saliendo de la estación del tren guardando en su maletín la tarjeta de vista, una que contaba con la funcionalidad de no tener que pagar el metro ya que esta solo se les daba a los estudiantes. Esto claro, era de gran ayuda a aquel chico debido a que sus finanzas realmente seguían siendo... deplorables.
[Como siempre, en esta ciudad todos los días es ruidosa y algunas veces, llena de casos.]
Apenas subió las escaleras del subterráneo llegando a la calle cuando al cruce de la esquina logro ver grandes destellos color anaranjado que sobrevolaban un par de metros por encima de su cabeza llegando a chocar con las uniones de muro con muro en los edificios a sus alrededores.
[Lo anormal es algo... ¿Normal?]
Tras estos destellos de estallidos, un héroe conocido como Kamui Woods se le veía pasando de edificio en edificio extendiendo sus ramas de lado a lado agarrándose a filos de balcones, las ventanas, techos y demás para poder seguirle el ritmo a aquel destello que a ojos de todos, justo al final de la calle donde dos grandes edificios casi gemelos que los separaba la avenida, este destello se detuvo quedandose estático entre estos dos edificios los cuales, a través de los ventanales se logro ver reflejado un hombre de aspecto fogoso.
[Podría decirse que sobrevivo como puedo en estos días que posiblemente se han vuelto los peores de mi vida pero aun así, siento que son los días que mejor recordare.]
Aquel joven de enormes pecas en su rostro miro extasiado aquella escena cuando algo dentro suyo tiro de él hacia delante. Era una sensación de un frio extremo que recorría toda su espina dorsal hasta llegar a su cabeza donde se coronaba con un choque de temperaturas.
Sus manos temblorosas se cerraron y aquellas cicatrice que se encontraban debajo de las vendas que el tenia puesta rodeando desde sus yemas hasta la parte superior de su codo parecían brillar.
[Cundo me despedí de ti hace años yo pensaba que mi vida era insignificante, sin fuerza. Llena de sueños estúpidos siendo solo alguien infantil y poco temerario pero... aunque ahora tampoco he cambiado tanto, puedo llegar a sentir que ya no soy así.]
A la par de aquel villano quien parecía desinflarse de la risa exponiendo a todo volumen su quirk, detrás de él, por encima suyo y desde abajo hasta el frente, héroes se unieron rodeándolo por completo con un único objetivo...
Detenerlo.
De esta manera, una brisa llego justo a la espalda de aquel chico empujando sus ropas hacia delante llegando a sacudir su enorme cabellera cuando una lluvia de hojas de árbol lo rodeaba como un remolino hasta que este se disipo hacia delante.
[Hoy...]
El se dio la vuelta, tan solo un poco llevando su mirada hacia delante, un poco levantada donde él podía vislumbrar a lo lejos aquella enorme colina en la cual se hallaba una edificación sin comparación.
[Quiero contarte como he llegado a sentir todo esto. Lo que he tenido en esa escuela, las experiencias, las personas que he conocido. Quiero contártelo... todo, mamá.]
El chico sonrió y cubriéndose con su mano izquierda aquel sol abrazador, el chico observo con total emoción su escuela de héroes.
[Será un poco largo pero quiero que lo escuches. Esta es una historia mía, de como las personas me dieron una voluntad.]
U.A, la academia de héroes y heroicidades donde Midoriya Izuku cruza su etapa de preparatoria para llegar a convertirse en un gran...
―¡Quítate de en medio mocoso! ―espeto una voz pedante detrás de Izuku arrojándolo hacia un lado provocando que este casi tropiece debido al filo de la cera.
Apenas soltó un quejido el hombre volvió a farfullar.
―Estorbas, no me dejas ver que esta... ―antes de terminar, el hombre observo los ojos verdosos del chico al igual que su cabellera. Entonces su mirada termino justo en las manos del joven donde este se percató quien era.
Izuku pudo ver como este tembló de cierta manera pues su mirada parecía enredada entre sus manos y su cara.
―¿S-sucede algo señor? ―pregunto amablemente izuku.
En seguida el hombre que lo había empujado había retrocedido.
―¡T-tu eres...! ―levantando su dedo índice, apuntando tembloroso al chico espeto una vez más―. ¡El niño que ríe!
Las personas a su alrededor estaban mas concentradas en todo lo que ocurría con los héroes y el villano que ningún otro se percató de la declaración pasándola por alto totalmente.
Por parte de izuku solo soltó un resoplido y este inflo su pecho.
―Si, lo soy.
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CAPITULO 35
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Era medio día cuando la campana que daba el aviso de la hora de la merienda resonó por toda la escuela. Rápidamente los pasillos se inundaron con alumnos emulando una marea de estos mismo desbordándose en una sola dirección, el comedor donde para muchos era un lugar para socializar con otras clases y así, conocer otras personas.
Sin embargo, en el caso de nuestro peliverde quien aun se encontraba en su asiento observando como todos estaban guardando sus cosas, no tenia las fuerzas para levantarse pues desde que llego en la mañana tenía una contradicción o más bien se podría describir como una púa clavada en su pecho.
«¡Por que nadie me ha hablado!―pensó en un grito interior de pánico»
Desde que llego hace ya mas de cuatro horas, ni un alma de la clase A se dispuso ha hablar con él. Parecía como si hubiera vuelto a ser invisible como hace unas semanas y eso era algo que a izuku no molestaría, claro, si hablamos del chico de hace unas semanas, antes de tener amigos. Ahora lo único que había en su cabeza eran ideas negativas.
El llegaba a pensar cosas como «Ey, ya no quieren ser mis amigos por que soy un problema» o «Volví a salir en las noticias así que debe ser un gran problema tenerme como amigos cuando soy un centro de atención viviente».
Cosas como estas y demás pasaban en su cabeza tan velozmente que una sustituia a la otra cada minuto de la clase.
Pero lo que mas le afectaba y le parecía extraño, era el hecho de que ni si quiera Tenko le había dirigido la mirada.
«¡Estará molesto!―pensó él»
Pues podría ser esa una de las razones de la falta de atención por su parte, despues de todo, por lo que pudo enterarse gracias a All Might fue que internaron a la hija menor de los Shimura en el hospital donde esta siendo cuidada y analizada psicológicamente puesto había vuelto a causar problemas y la comisión de seguridad no le quedo de otra que ejercer acciones contra ella.
Por suerte su nombre ni nada mas salio en las noticias sin embargo, su quirk como posiblemente su casa ya era una certeza que muchos lo supieran.
Los videos filtrados en la red sobre la pelea de ambos había sido Trend en muchos sitios llegando a tener nombre como «La flor de la putrefacción y el niño deterioro».
Un nombre estupido para izuku pensó el con desanimo. El creía que mínimo sabrían ponerle un apodo más imponente pero no fue así. Mas tarde se sintió mal por usar esa situación para pensar en cosas estúpidas.
«Ni si quiera pude hablar con el este fin de semana―pensó»
Izuku supuso que darles un espacio a los Shimura despues de causarles tantos problemas era lo mejor por lo cual, sin si quiera con la opinión de All Might y su ayuda para poder ver a la joven Hanna, izuku se negó rotundamente.
Por ahora claro.
El chico pecoso simplemente se rindió y comenzo a ver como todos sus compañeros se iban dejándolo algo herido pero este cuando estaba dispuesto a seguir paso fuera de la clase, una voz lo detuvo.
―Quiero que te quedes unos minutos, Midoriya ―dijo la pedante y cansina voz de aquel héroe de "Ensueño".
Pocos pudieron escuchar que este le hablo a izuku, y aquellos pocos simplemente salieron del salón de clases dejando a izuku frente a su peor pesadilla.
Eraser Head.
Izuku no tuvo más opción que obedecer a su profesor encargado a lo cual, desganada avanzo hasta quedar delante de su escritorio donde este sin mucho esfuerzo se levanto de este quedando unos 20 centímetros por encima de izuku mirándolo por lo bajo.
―¿Necesita algo? ―pregunto izuku con un tono aludido.
Parecía que el chico tuviera ciertas mariposas en el estomago las cuales como describe el amor, podrían estar revoloteándole dentro pero estas solo se detenían a devorar cada uno de sus órganos.
Era una sensación horrible quedarse con aquel hombre de aspecto mal cuidado.
―"Necesita algo, profesor" ―Aizawa resoplo―. Se nota que no guardas una pizca de respeto por el profesorado. Normal en alguien que no le interesa nada ―dijo con un tono atronador.
El ceño asustadizo de izuku rápidamente se transformo en uno de sorpresa al escuchar a su profesor hablar así pero en su interior otra voz le gritaba «¡¿Por qué te sorprendes!?» ya era normal que aizawa lo maltratara, despues de todo él tenía cierta avidez por hacerlo sufrir.
―¿E-en que lo puedo ayudar, profesor...? ―pregunto nuevamente corrigiéndose a sí mismo.
Aizawa por su parte se le quedo viendo un par de segundos con los ojos entrecerrados. Una mirada de severidad recaía sobre izuku.
―Tu eres el causante de que la hermana de Shimura Tenko este en el hospital y también eres el causante de que los shimura tengan que mudarse una vez más.
―¿Ah...? ―gimió confundido.
―No era de mi incumbencia decirte esto, ni si quiera debería de darte la atención que te estoy dando ahora por lo cual deberías de estar agradecido ―tercio Aizawa arremangándose las mangas de su suéter oscuro―. Solo te dije esto por que es importante que conozcas los problemas que les causas a las personas a tu alrededor ―continúo diciendo.
Izuku estaba algo aturdido por lo que había escuchado. ¿Qué la familia Shimura se mudaría una vez más? El sabia que la ultima vez que se mudaron fue de Kioto hacia Musutafu por la razón de que Hanna había usado su quirk yendo en contra del decreto del control de particularidades en la sociedad.
Era muy normal que tuviera que repetirse la misma situación pero para izuku aún le parecía confuso todo lo que le decía Aizawa.
―No sé, no me interesa que relación tengas con All Might ni que le hayas dicho aquel momento que tanto lo ha hecho preocuparse por ti...
―¡P-pero ellos no tendrían por qué! ―adujo Izuku a la desesperada.
―No vuelvas a interrumpirme, Midoriya ―le espeto con tono abrumador.
Izuku solo agacho la mirada y cerro sus puños con una sensación de hundimiento, lleno de frustración que apareció en un momento.
―Aunque quieras olvidar que tu eres un fuerte detonante de este tipo de situaciones, estoy yo para recordártelo. Por eso quiero que escuchen atentamente a lo que te voy a decir ―discurrió Aizawa―. Dentro de dos semanas será el festival deportivo y es de preciso interés que te retires de esta competición.
Apenas escucho la palabra «Retirar» el chico levanto su rostro hacia el de aizawa encontrando mirada con mirada.
―N-no... ―discrepo apenas audible el chico quien mostraba un ceño fruncido―. ¿¡P-por qué?! ―farfullo.
Aizawa relajo el ceño.
―La gente esta muerta de miedo. ¿Sabías que los padres de un alumno de tercer grado de la clase A fue retirado por sus padres? Y ahora hay varios padres más que quieren llevarse a sus hijos a otra escuela.
―¡Ah...! ―se extrañó Izuku mirándolo con ojos como platos.
―¿Adivina la razón? ―este llevo su dedo índice hacia el pecho de izuku―. Tu ―declaro este.
Izuku miro esperando ver alguna señal de mentira en el rostro de aizawa, pero se trataba de pura severidad, no había ni una pizca de duda en su rostro por lo cual era obvio que él no estaba mintiendo.
―La idea que en la escuela en donde sus hijos estudian, un chico capaz de destruir todo incluso sus vidas con un toque esta al vivo del alba esperando que algo derrame la ultima gota de sensatez en su cabeza. Si, Midoriya, tú eres la razón por la cual últimamente la U.A ha estado recibiendo bastante quejas como amenazas donde piden tu expulsión. Es por esta razón y muchísimas mas que si llegas a aparecer en un evento tan importante para los alumnos que ¡Si! Podrán ser héroes, podrías llegar a arruinarles la oportunidad con solo presentar tu cara.
El silencio y la quietud, interrumpidos tan solo por algún que otro gruñido o resoplido por parte de izuku que para aizawa resultaban insoportables.
El tenia la culpa de que Hanna hubiera usado sus poderes así y también era culpable de que las personas lo vieran de esa forma pero aun así el no pudo evitar sentirse ufano. El gritaba en su interior que todo era injusto pero más allá de su interior, una voz detrás de su cabeza le grito que era justo así como él quería que fuera.
Era insufrible, no quería pensar en ello, no podía aguantarlo. Dentro de él había un terrible vacío que no deseaba sentir ni examinar, un oscuro agujero donde antes estaba su pacifica tranquilidad, un agujero del que su paz se había desvanecido una vez más.
Aizawa al ver que el chico no reaccionaba simplemente se aparto de él en un solo paso como si todo lo que el hubiera dicho no le importara en lo absoluto.
Para el héroe profesional no le importaba en lo absoluto aquellas palabras ni como las expreso. Él no tenía ni quería dar mas de su preciado tiempo para ver en sus ojos aquel rostro despechado de culpa.
Él estaba harto de siempre ver ese rostro como origen de problemas para todos.
―Si tanto te sientes avergonzado de lo que sientes, Midoriya, ni si quiera deberías seguir aquí. Solo lo estas por capricho de esos dos ―dijo hablando de Nezu y All Might quienes eran lo que más querían que izuku estuviera en U.A dando la impresión como si no les importara que la escuela se hundiera.
―Te diría que consideres la idea pero no tienes ningún derecho a considerarla. Simplemente obedécela y sigue con tu miserable, tonto y vacío intento de ser un héroe cuando realmente no podrás serlo ―el hombre camino hasta la puerta deslizándola hacia un lado―. Es justo así como deben ser las cosas, y que no se te olvide.
Apenas termino de decir eso salio hacia el pasillo en un par de pasos cuando observo a alguien pegado al muro del salón de clases.
Estos dos se miraron y simplemente dejaron ser el curso de la situación. Aizawa cerro la puerta y este dejo solo a izuku dentro del salón quien seguía hundido en sus pensamientos.
Por tan solo un momento, tan pequeño como un parpadeo, el sentimiento de culpa había vuelto de manera violenta dejando un gran agujero en su pecho. Casi se podría decir que formo una especie de monstruoso y pesado parasito, empezó a retorcerse y contorsionarse. Izuku ya no podía más, no soportaba ser quien era. Nunca se había sentido tan atrapado por su propia mente y por su propio cuerpo pero... aun así no era la primera que el deseaba con tanta intensidad ser otra persona completamente diferente.
―C-calma... ―dijo en un hilo de voz―. C-c-cal-cálmate... ―repitió para sí mismo.
Ese intenso sentimiento de culpa el cual salía de atrás de su cabeza formando una sombra que poco a poco lo estaba ahorcando empezó a infundir en el algo más que culpa, odio.
Era una sensación extraña la cual lo embargaba. Pareciera como si el chico estuviera paralizado a la par de un muro de púas que se acerca a él y ni si quiera con toda la fuerza del mundo el seria capaz de moverse, ni si quiera la furia que enciende las llamas de los músculos de izuku le serviría.
¿De verdad era posible que una persona pudiera contener tanta ira sin gritar?
Y sin percatarse el ya tenia la espalda curveada hacia delante colgando los puños cerrados. Su rostro enrojecido por la furia y deseo de gritar tan fuerte que se le fuera a desgarrar la garganta pero antes de poder hacerlo el chico escucho una voz.
Una ligera y aguda voz que recorrió el salón volviendo sus palabras en un estallido de cientos de destellos como delgados rayos de luz que llovieron sobre izuku.
―Una vez, mi mamá dijo...
Apenas el se dio la vuelta mirando de reojo una cabellera azulada parada en la puerta semi abierta, el chico supo quién era al instante.
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[Ama un montón.]
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INTRODUCIR: OPEN YOUR GATE
Las enseñanzas de su madre viven profundamente en ella.
Dando paso tras paso como si estuviera saltando de una roca en una roca mientras atraviesa un rio imaginario, la chica dejaba salir su voz como una ligera brisa veraniega.
―Si lo haces, serás capaz de olvidar todo lo que te hace sentir dolor ―la chica se detuvo a un par de pasos del curveado chico quien miraba detenidamente su cabello ondulante como una persiana al movimiento del viento―. Fue en mi octavo cumpleaños que aquella figura que me tenia pegado a la pantalla me hizo darme cuenta de algo ―ella dio un giro inesperado dando una lluvia de fragancia propio de su shampoo llegando hasta las fauces más profundas de izuku.
―¡Quiero convertirme en una heroína! Grite con total devoción al ver aquella heroína quien estaba en la televisión. Y así, al día siguiente empecé con mi deseo, mi única meta de poder llegar a este lugar y entrenar hasta los días mas infernales para poder llamarme una buena heroína ―dijo con una atronadora voz llena de entusiasmo.
La chica de cabello celeste y ojos del mismo color estaban girando entorno a izuku quien no parecía estar consciente de su situación.
―Hubo muchas cosas que no me gustaron hacer para llegar aquí pero claro, no podría perder la conmutación. Todo eso era solo preparación. Así que como papá dijo también, tengo que estudiar mucho, dormir mucho y comer mucho así que me esforcé demasiado hasta el punto que hubo días en que ni si quiera soportaba mi reflejo pero ¡Ey! Estoy aquí ―bramo sacudiendo su mano de lado a lado en un gesto de saludo a quien sabe quién.
―Nejire-Sempai... ―dijo a murmuro izuku quien paso saliva irguiendo la espalda.
―¡Correcto'! ―dijo con un idioma que izuku quiso interpretar como "Latino".
En un segundo izuku pensó si Nejire sabia algo de latino y luego supo que ella era ella y era normal que supiera cosas que otros no.
Se dijo a si mismo «¡Ey, es nejire!» en automático se volvió a callar internamente cuando se percato de lo que estaba sucediendo.
―¡N-nejire sempai! ―exclamo el chico aludido.
―Mírate, tan solo paso un fin de semana y de nuevo tienes heridas. Supongo que eso del poder ese no te deja muchas buenas cosas ―dijo despreocupadamente.
―¡¿Q-que haces aquí?!
―Solo pasaba... ¡No, mentira! Te estaba buscando ―clamo con una gran sonrisa―. Quería hablarte de muchas cosas que pasaron en mi fin de semana y como es que Mirio casi se ahoga en un tubo de cañería. ¡La historia es graciosísima!
A risas ahogadas la chica sostenía su estomago mientras que izuku se encontraba lleno de nervios pues el cambio de emociones de golpe lo hacía quedar atolondrado.
―P-podríamos hablar en otra ocasión... ―dijo este.
Izuku ahora mismo quería ir con All Might, el recordó gracias a Nejire que All Might estaba ahí y que este podría ayudarlo a pensar mejor las cosas que Aizawa le dijo.
En rápidos movimientos apenas visibles para Nejire, izuku tomo sus cosas hasta que volvió a reaparecer en la puerta medio abierta.
―¡T-te veo luego Nejire-Sempai!
Izuku no quería hablar con ella en ese estado sin embargo ella no tenía intenciones de detenerse.
―Perdón, pero... ¡Mira! Tengo que sacar esto antes de que te pongas malo conmigo así que...
En un rápido giro, antes de que izuku saliera del salón de clases la chica le extendió una pregunta.
[¿De verdad quieres ser un héroe?]
El pecoso se quedó estático mientras Nejire estaba a medias del salón mirándolo con las manos entrelazadas detrás de su propia cintura.
―¿Cómo lo digo? Ya sabes, solo decir que quieres ser un héroe así por que si no es una verdadera razón en concreto como para nada. Si dijeras alguna razón en especifico como Mirio, el quiere salvar a un millón de personas o como Tamaki, el... bueno el es raro pero tiene una razón gracias a mirio. Así que tal vez tu enserio...
―Tengo que ser un héroe ―le atajo izuku―. Digo, me levanto cada mañana temprano, mas que nadie para llegar aquí.
―¿Eso es todo? En lugar de hacerlo por que quieres ser un héroe, parece como si lo hicieras como una excusa todo este tiempo. Casi se siente como si estuvieras huyendo de algo que en serio necesitas hacer.
El chico suspiro.
―Eso es... eso no es verdad. Hago muchas cosas que debo hacer. Vengo a la escuela todos los días, incluso aquellos antes que la clase A me brindara su ayuda sin perder un solo día o llegar tarde.
―¿Y dónde están ahora?
―Puede que algo molestos, ¡No los culpo! Despues de todo es mi culpa.
*¡PAW!*
Un fuerte golpe detuvo su corazón por un instante.
―Esas cosas que dices hacer no tienen mucho sentido para mi ―dijo en tono neutro.
―¿Qué?
―Quedarte despierto toda la noche aunque tengas una mañana temprana y al día siguiente te duermes en clases. Matando el tiempo hasta la hora salir y pensando sobre si es barato tres horas de karaoke o un restaurante. También deberías hablar sobre cosas tontas con tus amigos en el camino a casa e ir a ver películas. Podría ser que también comprar con ellos ya que no es divertido ir a casa temprano. Despues de todo decirles a tus amigos como no puedes esperar el próximo episodio de tu drama favorito te hace sentir vivo.
Hado dio un paso hacia delante.
―¿Q-que estas...?
―En la mañana te sentí con aura diferente como ninguna que alguna vez haya visto en ti pero ahora, parece que tienes la misma aura que cuando te conocí. ¿Recuerdas que mi quirk funciona por mi fuerza vital? Cuando tengo ciertos pensamientos puedo llegar a percibir estas auras de los demás dándome a entender como se sienten por lo que ahora mismo tu aura me esta diciendo que das un paso hacia atrás, otra vez.
Nejire frunció el ceño.
―Pensar en todo lo que piensas a tus quince años... No estas sonriendo en lo absoluto. Ni si quiera estas esperando la próxima semana, no puedes ni si quiera disfrutar la buena comida. Vivir así es una locura y pensar que estas bien son aún peor. Despues de todo lo que te dijo pareciera que fueras un idiota masoquista.
Izuku se negaba a darse la vuelta por que no tenia las ganas de mirar a nejire ni de querer mostrarle su rostro bañado en sudor pues los nervios de hace rato se habían incrementado demasiado.
Estaba en su punto de estrés.
―¿Qué es lo que verdad necesitas para entender que el sentido común y un lugar al que pertenecer es eso que necesitas mas que salvar personas? No necesitas hacer algo tan complicado, solo necesitas descansar un poco y despues hacer un poco de tiempo para seguir tu camino de héroe y poder enfrentar de mejor manera tus emociones, ¿No... lo crees?
Su mano alcanzo el hombro de izuku.
Aquellos pensamientos que Hado tenía en su cabeza se revolvieron en un remolino de sentimientos y sensaciones que le permitieron ver un brillo más allá de aquella aura que veía ahora mismo.
―Si llegaste a pensar por tan solo un segundo que aizawa-sensei tenía razón, entonces no deseas ser un héroe.
Los ojos como plato y el corazón como un taladro, apenas este se dio la vuelta la chica lo recibió con una caricia en su cabeza.
*Pat*
―Supuse que las cosas podrían abrumarte una vez llegaras a la escuela pero cuando te vi esta mañana pudo ver en ti un brillo muy bonito, como si te hubieras desecho de algo duro y pesado, tan triste que cargabas en tu espalda. No me gustaría que ese brillo volviera a irse, te queda muy bien ese aspecto.
Nejire Hado era un poco más alta que izuku, ella estaba por encima de su rango por lo cual al mirarla pareciera como si un niño estuviera viendo a su madre entusiasmado y lleno de emoción.
―¿Hay algo que quisieras contarme?
Cuando la chica le pregunto, inevitablemente fue incapaz de evitar traer a su mente la imagen de aquella chica a su cabeza.
Shimura Hanna.
Entonces en su pecho algo se volvió a encender y Hado lo miro con una sonrisa.
―Si, quiero contarte algo.
Para los seres humanos es muy fácil que de un momento a otro las situaciones que albergan los problemas mas grandes puedan llegar a abrumarte aunque tengas la motivación tan alta. De ahí viene ese proverbio «De cien a cero en un segundo».
Aunque izuku tuviera un propósito, aunque el chico estuviera listo para seguir avanzado, no es imposible que dé un paso atrás pues él es humano. Y claro, un paso atrás al principio del camino puede demostrar mucha diferencia. Pero cuando haya un gran camino recorrido en una sola dirección, se le podrá dar el lujo de dar los pasos contrarios, cuanto le plazca.
Así que por ahora, aquel chico seguirá apoyándose en las personas a su alrededor hasta poder haber recorrido un gran camino.
Y una de esas personas es Nejire Hado.
2 semanas despues.
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Mas de diez mil personas reunidas en un solo lugar, un enorme estadio que alberga a tantas almas como el tartarous. Casi emulando un bowl lleno de una intensa marea de agua, las personas son las olas que se levantan en gritos desde sus lugares llenos de euforia encontrándose con el vertedero de alumnos los cuales salen poco a poco de aquellas enormes salidas oscuras.
Un total de 7 grupos de Clases se reúnen poco a poco en medio del estadio encontrándose con los gritos abrumadores de Present Mic.
―¡¡El festival deportivo de U.A donde los aprendices del punto de Heros apuntan a las gargantas de los demás y también a la cima...!! ―el hombre se detuvo un segundo y con su quirk activo soltó un gran grito aun mas fuerte que el anterior―. ¡Nuestra gran contienda anual comienza este día! Así que déjenme adivinar, ¿Todos ustedes vinieron a verlos a ellos, cierto? ¡A las recién llegadas estrellas milagrosas quienes con nervios de acero se encargaron de un ataque masivo de villanos!
El ultimo grupo por salir quien estaba poco a poco emergiendo de la oscuridad de aquel lugar, se presentaron con un rugido.
―Del departamento de héroes, la clase de primer año... ¡La clase de 1-A!
El estruendo de los gritos de todos los presentes no se hizo esperar cuando la primer fila de cabelleras se sacudió con el viento producido por los movimientos agitados de los espectadores.
Todas esas personas estaban con sus vistas fijas sobre aquella clase que se enfrento a aquel gran mal que se les presento hace más de un mes.
―Whoaaa... hay mucha gente... ―dijo con un tono temeroso el chico de cabello rubio y franja negra en su cabello.
―Dar lo mejor de ti con tantas miradas contemplando por todas las direcciones solo puede ser descrito como otro vinculo del sistema de entrenamiento de héroes de la academia, ¿No lo crees así, Yaoyorozu-San? ―pregunto el joven de anteojos, Iida.
―¿D-de verdad nos alaban? C-creo que me estoy poniendo nervioso ―dijo Kirishima―. ¿Y tú Bakugou-kun?
―No tengo por que ponerme nervioso, esto es lo mas normal del mundo para un héroe futuro ―respondió con poco interés y sin una señal de estar afectado por la presión―. Además no vamos a ser los que de verdad tengan que estar nerviosos por las miradas de las personas, no nosotros.
―¡Con esta clase hemos completado el grupo de lucha! La clase B, C, D y E quienes se unen a las clases F,G y H del departamento de apoyo, y de educación general se encuentran a la par del departamento de héroes ―comento Present mic.
―Hombre, nos tratan como si fuéramos relleno o algo así ―dijo un alumno de estudios generales.
―Que fastidio ―agrego uno de la clase de apoyo.
Por su parte, la clase A quien estaba observando como poco a poco las demás clases avanzaban hacia donde la profesora Midnight se encontraba del otro lado, Uraraka junto a Iida se detuvieron.
―¿Dónde está Deku-Kun? ―una pregunta que viajo atra vez de los oídos de todos quienes solo un poco de ellos siguieron avanzando sin detenerse.
―¿A dónde vas Bakugou-Kun? Aún falta Midoriya-Kun para poder...
―¿Dijiste que odias la atención no? Entonces apártate de aquí y deja la salida libre ―le atajo.
―N-no odio la atención solo me da un poco de nervios y... ―antes de poder terminar, a su lado pasaron un par de sombras más.
Tenko Shimura y Todoroki Shoto quienes quedaron a la par de Bakugou.
Shoto quien se había detenido a las espaldas de las demás clases dirigió su mirada hacia un lugar en especifico en el publico donde pudo vislumbrar llamas ardiendo con fervor. Este chasqueo la lengua y molesto escucho el resoplido de Bakugou.
―¡Como invitado sorpresa tenemos a nuestro querido profesor nocturno y héroe abrasador, Eraser Head! ¡¿Cómo estas viejo?!
―No molestes. Que me hayas obligado a venir aquí no significa que lo hare con gusto.
―¡Y ahí lo tienen, el rostro de la U.A!
Entre el público, una mujer de cabello verde solo reiría mientras miraba hacia el cuarto de comentaristas donde aizawa estaba junto a su compañero.
La clase A se quedo quieta por unos segundos más llamando la atención de present Mic.
―¡¿Sucede algo?! ¡La clase A no se mueve! ¡¿Acaso temen de los espectadores y cámaras mas que aquel villano aterrador?! ―enuncio Mic.
Cuando finalmente se rindieron y estos se dieron la vuelta hubo algo que resonó.
«Entonces era cierto―pensó Jirou quien se dio la vuelta―. el no va a participar»
Kyoka Jirou no es de las personas que le gusta entrometerse en las cosas ajenas pero su quirk le permite hacer estas cosas inconscientemente por lo cual fue totalmente normal que esta supiera que Izuku no iba a participar sin embargo ella no dijo nada en las últimas dos semanas.
Solo se mantuvo al margen.
«Que lastima―pensó―. El...»
Su quirk le permite escuchar muchas cosas mas que cualquiera y eso era aquel eco tan pequeño como una mota de polvo llego a sus oídos y en automático se dio la vuelta mirando al lado contrario de lo que hacia el resto de la clase quienes ya habían perdido la esperanza de verlo.
Con los ojos como platos ella vio salir de las sombras una ultima figura la cual al dar un paso fuera de esta se lograron escuchar alaridos por todos lados que poco a poco se fueron apagando llamando la atención del resto de las 6 clases.
―Llego ―a jirou se le abrió un camino entre sus compañeros y pudo observar una despeinada cabellera verdosa revolotear con el viento.
En el publico sentado en las bancas solo pudieron guardar silencio mientras otros estaban atónitos.
INTRODUCIR:THE JOLLY ROGAR IS A SYMBOL OF BELIEF
En los asientos de las clases, una chica de cabello celeste recargaba sus antebrazos sobre el barandal y al mismo tiempo su mentón sobre estos mirando con una sonrisa al chico que salía de la oscuridad.
―Ve, héroe.
Aizawa se había levantado de su asiento y este miro con furia aquel chico. Present mic solo se redujo a levantar poco a poco su voz hasta que solo esta fue la única que resonaba en una sonrisa al igual que la de la chica.
―Oh, ho... Ahora veo por que la clase A se había detenido ―dijo este.
Todoroki, Bakugou y Tenko quienes estaban delante de su clase y atrás de las demás se dieron la vuelta y el chico de cabello bicolor solo frunció el ceño encontrándose con aquellas vendas blancas que se sacudían pues les sobraba un trozo de esta.
El uniforme deportivo que constaba de un pantalón azul, sus tenis rojos y solo su camisa acompañada de una chaqueta con las mangas rotas hasta por encima de sus codos y un cuello largo llegándole hasta el mentón.
―El ultimo de sus compañeros, con ustedes... Midoriya Izuku ―dijo con una suave voz pues el sabia que no necesitaba más.
Entonces las demás clases por fin se dieron completamente la vuelta y ahora mismo, la atención de todo Japón estaba sobre aquel chico. Las personas en el estadio, las personas desde sus casas y aquellos en sus autos con la radio encendida se habían dado cuenta que la persona quien aspiraba a ser héroe era la misma que hace diez años mato a mas de treinta personas riéndose y burlándose de esto.
All Might quien estaba en el palco de los profesores se puso de pie y a su lado este observo a Nezu quien le regresaba una gran sonrisa.
―Este... es tu segundo paso joven Midoriya ―murmuro para si mismo mientras empujaba su cuerpo hacia delante recargando sus manos sobre el barandal―. Para crear...
―...un mundo donde...
―...las personas como tu...
Desde el suelo hasta el palco, la mirada azul de All Might se encontró con la mirada verdosa del chico quien mostro una gran sonrisa.
[No sufran.]
El festival Deportivo dio comienzo.
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[La carrera de obstáculos comienza y con ello las peculiaridades de todos saldrán a la luz y con ello el mundo ver aquellos quienes se alzan sobre otros. Los más fuertes de primer año se enfrentan.]
Proximo capitulo: Los dones más fuertes.