Monsters In Disguise [Teen Wolf]

6. Car crash

6. Car crash

—Oh, tuve que haberme cortado el pelo. —confesó papá mientras se pasaba una mano por el mismo. Su pelo no estaba desprolijo, pero la aparente cita con esta misteriosa pareja que tiene le hacía cuestionar cada aspecto de sí. Estuvo como media hora eligiendo el atuendo aquella mañana, y ahora, finalmente después de su turno y ya de noche, estaba por salir con la persona.

—Papá, estás guapo. —aclaré, esperando que se le aflojaran los nervios. Él me miró con un poco de incredulidad. Me acerqué a él con las manos en alto—. Ven, deja que te arregle esos pelos. —no lo tenía despeinado, pero tal vez si yo le peinaba levemente se relajaría un poco más.

Me puse de puntitas de pie, papá agachó un poco su cabeza para que pudiera acceder con más facilidad. Mis dedos se removieron suavemente contra sus hebras de pelo, sin embargo no me atreví a modificar demasiado su peinado. Tras unos segundos, indiqué que ya estaba mejor, a lo que él me agradeció levemente.

Stiles, de brazos cruzados, dijo tan sutil como siempre: — ¿Sabes? Cualquiera de tu edad tendría que estar feliz de todavía tener pelo. —papá le dedicó una mirada mortífera, mientras yo me aguantaba la risa.

Scott sonrió tan inocente como siempre — Pues, yo creo que se ve muy bien. —indicó con honestidad.

—Gracias, hijo que tuve que haber tenido. —mencionó hacia Scott, ante el comentario Stiles rodó levemente los ojos.

Yo sabía que el comentario de mi hermano iba dirigido para que papá se enfoque en otra cosa en vez de sus nervios. Lastimosamente, su plan no duró demasiado, ya que el leve terror volvió al rostro de papá junto con unas palabras: — Oh, Dios, ¿qué rayos estoy haciendo? Esto es una idea terrible.

—Papá. —llamé antes de que se volviera loco y terminase cancelando la cita—. Es sólo una cita, ¿de acuerdo?

Papá suspiró. Stiles agregó: — Beacon Hills no explotará mientras tú estás con una mujer. —sonrió levemente, aunque por su mente pasó otro pensamiento, entonces adicionó: — O un hombre.

Papá se relamió los labios — Es una mujer, Stiles. ¿De acuerdo? Una muy hermosa mujer. —Todos los presentes sabían que se trataba de una mujer, pero el comentario de Stiles nuevamente aflojó un poco la tensión que papá tenía.

—Por cierto, ¿quién es esa hermosa mujer? —insistió mi hermano, levantando las cejas en modo chismoso.

Él también se había enterado de la falta de anillo de casado de papá ayer a la noche, poco después de que yo hablase con papá en la cocina. Por lo tanto, esta mañana durante el desayuno argumentamos ambos. Llegamos a la conclusión de que si se quitó el anillo de casado después de tanto tiempo, era porque comenzó a ver a alguien. Y desde entonces, mi hermano comenzó a buscar sigilosamente quién podría ser. Yo, en cambio, respetaba la privacidad de papá (ya que él con Derek respetó la mía) y era mejor si él me lo contaba antes que buscarlo por las sombras.

—No te incumbe. —respondió papá, pero sin tono rudo. Luego me miró a mí—. A ninguno le incumbe. —alcé mis manos a modo de rendición, aclarándole con el gesto que a mí no me importaba con quién salía.

Antes de que Stiles pudiese seguir insistiendo o algun otro pudiera decir otra cosa, unos ruidos se escucharon fuera de la oficina de papá. Era de noche, habían algunos policías haciendo papeleo, aunque la mayoría debían estar patrullando. Todos movimos nuestras cabezas hacia la parte del lobby, donde dos policías estaban escoltando a un chico.

Lo reconocí al instante, era Donovan. Tenía unos años más que nosotros y por lo que nos contó papá, se quiso postular para un puesto en la comisaría, que desafortunadamente en la prueba del mismo no le dio buenos resultados y a raíz de eso, últimamente estaba más violento. Ya de por sí Donovan tenía varios avisos por ser agresivo tanto con funcionarios públicos como con personas civiles.