GoYuu OS

Momento Especial [NSFW]

Itadori realmente no podría explicar la situación en la cual se encuentra actualmente. Y tampoco estaba seguro que, con quien la estaba viviendo, pudiese hacerlo. No pensaba con claridad; su cuerpo y mente no le pertenecían, sino más bien, nuevamente, a quien estaba frente suyo.

La posición en la que estaba hacía que sus piernas dolieran, sentía que su cuerpo estaba siendo aplastado. Era incómoda, pero no decía nada porque, en contradicción, le gustaba.

De entre sus labios se escapó otro suspiro, y unos murmuros que intentaban ser maldiciones. Apretó los dientes, reprimiendo otro sonido que amenazaba surgir desde su garganta, llevando a su rostro su antebrazo, en el tierno intento de ocultarse. Sabía que la mueca que traía lo iba a delatar, era lo que menos quería.

Al tener los ojos cerrados, su oído se agudizó un poco. Lograba escuchar el vulgar chapoteo, sus propios quejidos y sollozos, y la televisión reproduciendo una película que ya no le importaba, pero no escuchaba nada de parte de su sensei.

Lo único que le confirmaba que su sensei estaba allí era el que lo estuviese tocando, y también ese vaivén que lo llevaría pronto a la locura. Por más extraño que sonase, Gojo no emitía ningún sonido.

Claro. Tras haber tenido esa desmotración de poder de su sensei contra esa maldición, volvieron a la habitación. Satoru comentó algo como que la reunión no le parecía tan importante, y decidió quedarse un rato con su estudiante para seguir viendo películas. Es decir, verificar que hacía bien su tarea, cierto.

Por ello, volvemos a lo del principio. No sabía y no podía explicar por qué ahora su sensei estaba entre sus piernas desnudas, penetrándolo con un extraño cuidado que hacía que perdiese la razón.

Satoru no le dio explicaciones, simplemente inició con un pequeño roce en su muslo, hasta finalmente llegar a donde estaban. Yuuji no pudo hacer mucho al respecto, se dejó llevar; tras haber sentido los labios del albino sobre los suyos, se volvió débil ante él.

No quiso descubrir su rostro, no cree de todos modos que tendría la valentía para mirar al mayor. Así que simplemente se resignó, dejando escapar el aire contenido en sus pulmones que lo acompañó otro quejido. Apretó los labios, no le gustaba hacer ese tipo de sonidos.

—Oye, Yuuji-kun –Se sobresaltó al finalmente escuchar la voz del mayor, quien no detenía sus embestidas–. Voy a cambiar de película, ¿te importa?

La pregunta lo dejó aturdido, confundido. Sin saber qué hacer exactamente, negó con la cabeza, dándole a entender que aquello lo traía sin cuidado. Gojo, sin despegarse de él, tomó el control de la televisión para así hacer su cometido.

—Tienes que ver esta. Es la que te mencioné antes, la del hermano gemelo secreto.

Pareciera que no se inmutaba por tenerlo a él, a su estudiante, gimiendo debajo suyo. Continuaba viendo la película mientras hacía su trabajo.

El cursed corpse aún se encontraba durmiendo en su brazo libre; intentaba, de todos modos, mantener la calma para que este no despertara y le diera una golpisa. Eso hizo que tuviera un fugaz pensamiento.

"Tal vez está esperando que no pierda el control incluso en situaciones como esta. ¿Es una prueba?"

—S-Sensei... Esta es mi primera vez...

Las palabras salieron en un susurro lastimero, pero aún así el mayor logró escucharlas, o eso creía él.

—Uh, está bien.

No pareció importarle, ¿acaso la película era mucho más interesante?

Realmente Itadori no estaba en su mejor momento para pensar en esas cosas. Su mente solo se concentraba en el estimulante roce del miembro de Gojo-sensei dentro suyo.