Arleth #Depredadores1 [En Edición]

Capítulo 52: Destino

No conocía el lugar, pero definitivamente no estaba pérdida, más bien trataba de encontrar algo, el desespero era tan grande que no sabia que era lo que sucedía, corría por la hierba alta con dificultad, podía escuchar un par de risas infantiles, eso le puso los pelos de punta, de repente se detuvo cuando vio frente a ella dos direcciones, estaba oscuro y lo único que podía ver eran dos pares de ojos en cada una de las direcciones.

Un par de ojos era de color verde, tan brillante como un jade, pero no se sentía segura menos con el par de ojos color ambar que se encontraban del otro lado, línea recta, ninguno de esos caminos era lo importante, ella iba a seguir su propio camino, con pasos rápidos paso corrió entre los árboles como si su vida dependiera de ello, a sus lados podía escuchar rápidos pasos, mezclados con aullidos y gruñidos que la hicieron sonreír ampliamente.

Sus pasos se detuvieron abruptamente cuando en su camino aparecieron dos pequeños cambia formas.

— ¿Quienes son ustedes?...

Abrió sus ojos de golpe dando un pequeño brincó, con sus ojos recorrió el lugar con calma, se incorporó con cuidado cuando se dio cuenta de que no era su habitación, se levanto de la cama y vio a la azabache en su escritorio, miro a su lado encontrándose con la loba abrazándola por la cintura, estaba dormida y con su cabeza apoyada en el regazo de Nia que jugaba con su celular apoyada la cabecera de la cama.

Se levanto de la cama y acomodó un poco su cabello mientras se acercaba a la serpiente, esta la observo unos segundos para luego volver su mirada a su computador, ella se sentó en un banquillo junto a la azabache observo lo que hacía.

— ¿De que es? —Pregunto ella apoyando su codo sobre la mesa y luego su mentón en la palma de su mano.

— Química —Dijo ella haciendo una mueca.

— ¿Cuanto dormí? —Pregunto ella pasando sus manos por su rostro.

— Como media hora —Dijo riendo un poco.— Estoy terminando, luego de eso nos vamos

— ¿Tu beta viene? —Pregunto ella sonriendo un poco.

— ¿Y tu alfa? —Pregunto la azabache riendo levemente, sonrió de lado cuando vio a la menor desviar la mirada.— Se que no puedes sentirlo, pero debes entender que es tan difícil para ti asimilar lo como lo es para él que tu no puedas sentir lo...

— Lo se —Dijo ella soltando un suspiro.— No sabes la feliz que estoy de Nia, que haya sentido a su alfa incluso sin saber que era él

— Puedo escucharlas —Dijo Nia dejando su celular aun lado para unirse a la conversación mientras acariciaba el cabello de una zaysel que comenzaba a despertar.— Estoy tratando de llamarlo, quizás él puede escucharme y vuelva...

— Va a volver —Dijo Yannah sonriendo de lado.— Estoy segura de que vas a saber que es él, es el destino

— Por otro lado tenemos a Zay, no puedo creer que huya de su alfa... —Dijo la tigresa riendo un poco.— Tu frase es icónica

— Min necesita que le hagan lo que él hacía —Dijo la mayor aún con los ojos cerrados ante las caricias de la menor.

— Olvide mencionar les algo —Dijo la azabache dejando de lado lo que hacía, las tres presentes la observaron de inmediato.— Descubrí que Katashi es hijo de la maestra Okada —Hablo mientras hacia una dramática expresión de dolor.

Las tres chicas tuvieron reacciones completamente diferentes, Nia comenzó a reír mientras de levantaba de la cama, por otro lado Arleth hacía una mueca de desaparición diciendo lo fastidiosas que era la adulta y por otro lado Zaysel observada a las menores sin saber de quien hablaban.

(...)

Aún trataba de acostumbrarse a las atenciones que recibía en su casa, hace mucho tiempo que se había ido y no recordaba el rostro de ninguna de las personas del lugar mientras que su hermano no dejaba de observarlo cada vez que estaban juntos, no había cambiado casi nada, con los cuatro años que había dejado de verlo podía notar que su cuerpo había aumentado en masa muscular, no podía evitar sentirse mal cada vez que recordaba lo cariñoso que era con él antes de que desapareciera.

— ¿Quieres acompañarme a la empresa? —Pregunto el mayor para luego beber algo de agua.— Así puedes prepararte para que trabajes allí

— No puedo, yo... Quiero buscar a Nia —Dijo él bajando la mirada por unos segundos.

— ¿Quién es Nia? —Pregunto su hermano alzando una ceja mientras lo miraba fijamente.

— Es mi pareja, ella me hizo poder cambiar, gracias a ella recuperé mi humanidad....