24. the unforgivable curses

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24, LAS MALDICIONES IMPERDONABLES

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24, LAS MALDICIONES IMPERDONABLES

Los dos días siguientes pasaron sin grandes incidentes, a menos que se cuente como tal el que Neville dejara que se fundiera su sexto caldero en clase de Pociones. El profesor Snape, que durante el verano parecía haber acumulado rencor en cantidades nunca antes conocidas, castigó a Neville a quedarse después de clase. Al final del castigo, Neville sufría un colapso nervioso, porque el profesor Snape lo había obligado a destripar un barril de sapos cornudos.

—Tú sabes por qué Snape está de tan mal humor, ¿verdad? —dijo Ron a Harry, mientras observaban cómo Hermione enseñaba a Neville a llevar a cabo el encantamiento antigrasa para quitarse de las uñas los restos de tripa de sapo.

—Sí —respondió Harry—. Por Moody.

Era comúnmente sabido que Snape ansiaba el puesto de profesor de Artes Oscuras, y era el cuarto año consecutivo que se le escapaba de las manos.

Snape había odiado a los anteriores titulares de la asignatura y nunca se había esforzado en disimularlo. No obstante, parecía especialmente cauteloso a la hora de mostrar cualquier indicio patente de animosidad contra Ojoloco Moody. Desde luego, cada vez que Aries los veía juntos (a la hora de las comidas, o cuando coincidían en los corredores), se llevaba la clara impresión de que Snape rehuía los ojos de Moody, tanto el mágico como el normal.

—Me parece que Snape le tiene algo de miedo, ¿no creen? —dijo Aries, pensativa.

—¿Te imaginas que Moody convierte a Snape en un sapo cornudo —dijo Ron, con lágrimas de risa en los ojos— y lo hace botar por toda la mazmorra...?

Aries iba acompañada del trío de oro todo el tiempo, los cuatro parecían haber formado una especie de amistad, y no se separaban en ningún momento. Aries se dió cuenta de algo que ellos no: Ron gustaba de Hermione. Para la pelinegra era muy obvio, pero ninguno de los tres parecía notarlo. El pelirrojo era más inteligente de lo que demostraba, pero su fiaca era más grande, por lo tanto no tenía las mejores notas, igual que Harry. Aries había sentido que ya no había necesidad de molestarlo, aunque a veces, cuando se aburría, le pedía citas a Hogsmeade y le hacía cumplidos. Había dejado de lado su disgusto hacia Hermione, la castaña era una persona muy amable, aunque a veces terca, y Aries la consideraba una buena amiga.

SOULMATES ━Harry J. PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora