ALL WE ARE │NIAM│☯

Capitulo treinta.

Había pasado una navidad genial, aunque un poco estresante, al final el cumpleaños de Lou había salido bien y el estaba más que feliz, es más, lo vi intentando no llorar al ver a todos allí reunidos, es que mi amigo es un tanto sentimental, esa es otra característica que tiene, esa y que siempre interrumpe a todo el mundo.

La cena había salido más que bien, y yo me sentí feliz de ver a papá allí con nosotros, es más, él y la madre de Liam habían convivido bastante bien, de seguro y se recordaban de años atrás. Luego de cenar entregamos todos los obsequios, Liam me entregó el mío y efectivamente, era un suéter navideño hecho por su abuela que decía “Niall” en la parte de atrás junto con el numero de mi camiseta de futbol, y debo aceptar que me encantó y me lo puse al instante, pero no solo era el suéter, sino que también había un par de guantes en la caja.

“¿Guantes?” –le pregunté al sacarlos de la caja. –“Creí que tenía un novio mas original”. –Sonreí. –“¿Por qué guantes, Sr Payne?”. –El sonrió.

“Bueno, yo también he estado pensando en que te irás a la universidad y los días de enero y febrero son muy fríos… No estaré cerca para calentar tus manos y bueno… creí que si te las calentabas con los guantes creerías que estaba contigo y yo…” –Bajó la cabeza un poco apenado y yo sonreí de lado.

“Cállate, está bien.” –Le corté. –“Me encantan, Liam”.

Y es que todo había sido perfecto, y la noche de año nuevo igual, porque mi primer beso del año fue nada más y nada menos que Liam Payne y eso me ponía feliz. Aunque no todo me había agradado, porque ya en la madrugada el había recibido una llamada de Tyler –y lo sé porque me lo dijo Josh-. Al parecer Liam y Tyler seguían siendo amigos luego de haber salido juntos, entonces yo me pregunté qué clase de bruto aún era amigo de su ex… bueno, quizá muchas personas, pero el punto era que Liam no podía ser amigo de su ex y mucho menos recibir llamadas de él, y menos cuando estaba conmigo.

Así que me molesté con el, y sí, era inmaduro de mi parte pero de todas formas lo había hecho. Estábamos ya en el quinto día del año y yo aún seguía enojado, Liam jugaba un video juego viejo y yo estaba tirado en mi cama, escuchando el álbum de los arctic monkeys.

-Louis, George y Zayn me enviaron un mensaje preguntando si pueden venir. –Me dijo y yo no me inmute. –Oye, ¿Qué les digo?, es tu casa.

-Como sea. –Contesté seco y lo escuché suspirar y teclear algo en su teléfono de botoncitos. Aun tenía un teléfono con botoncitos.

-¿Sigues molesto?. –Me preguntó y yo chasqueé la lengua. –Oh vamos, Niall, ya te dije que no hay nada entre Tyler y yo, además, yo no le dije que me llamara, deberías de confiar en mí y creerme.

Fruncí el ceño molesto, Liam no se callaría nunca, así que me levanté de la cama y le dí volumen al aparato, casi a todo lo que da. Estaba sonando R U Mine? Y yo pensé en que era perfecta para dejar de escuchar a Liam, pero aún así seguía y seguía.

-Joder, no te escucho, solo cállate. –Le dije y me tiré de nuevo en la cama.

-¡Eres un imbécil!. –Me gritó y yo intenté no reírme. La verdad no estaba enfadado. -¡Mira que subirle a la música mientras te estoy hablando, pedazo de subnormal!. –Solté una carcajada y levanté un poco la cabeza, Liam estaba molesto.

-¿Bebé?.

-Oh, ¿Ahora soy tu bebé?. –Preguntó irónico y yo giré los ojos.

-No te enojes, vamos, te gusta la canción. –Le dije. –Solo jugaba contigo.

-Jugaste cinco días, tuve que aguantarte tu humor cinco días, Niall. –Me dijo y vi como fruncía el ceño mientras se recargaba en la pared con los brazos cruzados.