ALL WE ARE │NIAM│☯

Capitulo veinticuatro.

Me desperté con un poco de calor. Con los ojos cerrados intenté quitarme las sabanas de encima  pero fue inútil, no logré encontrarlas, en lugar de eso, toqué algo muy suave, se sentía como otra piel. Abrí poco a poco los ojos y pude enfocar bien. Al lado mío dormía nada más y nada menos que Niall Horan, tenía su brazo derecho alrededor de mi abdomen y de su boca salía un poco de baba, entonces me reí. Me acomodé mejor en la cama y pude ver que no traía camiseta, y que estábamos cubiertos con las sabanas de su cama…oh.

Sonreí como imbécil al recordar lo que habíamos hecho la noche anterior y me rocé los labios con la yema de mis dedos… no sabía que Niall podía besar de esa manera. Sin dejar de sonreír pasé mi mano derecha por su espalda y lo sentí removerse un poco, murmuró algo que no le logré entender y se abrazó mas a mí.

-Niall… -Le llamé suave, pero el no parecía querer levantarse. –Niall, levántate, quien sabe qué horas serán…

-Mmmh… -Frunció el ceño.

-No me hagas tirarte agua encima. –Sonrió con los ojos cerrados.

Niall fue abriendo lentamente los ojos hasta hacerlo por completo. Primero me regaló una enorme sonrisa que me contagió a mi también, se inclinó a darme un beso en los labios aun sonriendo. Giró la vista hacia abajo y entonces frunció el ceño. Lo vi dudar por unos momentos y morderse el labio inferior repetidas veces.

-¿Estás bien?. –Pregunté intentando tocar su hombro pero él me apartó.

-¿Esto querías?. –Me dijo y yo fruncí el ceño.

-¿De qué hablas?.

-De esto, ¡joder!, ¿Cómo pude haber sido tan imbécil?. –Dijo para tirarse de la cama y comenzar a buscar su ropa interior.

Estaba histérico, podía notarlo. No dejaba de gritar cosas que no lograba entenderle bien y se llevaba las uñas a la boca para morderlas hasta la cutícula, estoy seguro de eso. Lo imité y me paré igual de la cama para ponerme mi ropa interior, me intenté acercar de nuevo pero me apartó.

-Aléjate. –Me dijo seco. –No puedo creerlo, ¡Dios!. –Grito. –No, no, no.

-Niall, cálmate, ¿de acuerdo?. Podemos hablar.

-¡No!, no hay nada de qué hablar, ahora puedo verlo… -Dijo y yo tragué saliva.

Claro que tenía motivos para sentirme culpable, por el plan y todo eso, pero, él no sabía nada, ¿verdad?.

-Bebé. Escucha… -Hizo una mueca.

-No me llames, así, ¡no me llames nada!, sé que esto era lo que querías. –Gritó cerrado fuerte la puerta de su closet. –Es lo que todos buscan, te lo digo porque yo lo he hecho. –gruñó.

-No todos buscan esto, Niall, mira, si dejas que nos calmemos podemos…

-¡Ni una mierda, Liam!, todos buscan lo mismo. –se rió sin ganas. –No te hagas el hombre perfecto. –Fruncí el ceño.

-No he dicho eso.

-¡Pero eso crees que eres!, pero déjame decirte una cosa. –Se acercó y se puso frente a mi mientras sonreía de lado. Pero no era una sonrisa agradable. –No eres tan distinto a todos, ¿sabes?, crees que eres un chico bueno pero no lo eres. –Rió. -¡Te acostaste conmigo!, eso lo prueba.

-No lo vi de esa manera. –Le dije. –Sabes bien que no fue solo eso. –Frunció el ceño y vi como su cara se puso roja. Puedo decir que quizá estaba llorando.

-Yo no sé nada. –Susurró.

-Joder, Niall, ¡se maduro por una vez en tu vida!. –Le grité enojado.