ALL WE ARE │NIAM│☯

Capitulo veintiséis.

-Oh por Dios, ¡esto es tan aburrido!. –Dije por milésima vez mientras soltaba un bufido. George giró los ojos.

-¿Quieres dejar de quejarte, Liam?, me ofrecí a quedarme contigo para hacerte compañía pero si sigues con este humor vas a terminar quedándote solo. –Bufé de nuevo.

-Claro, como tu leyendo esa revista de chicas adolescentes eres un muy buen compañero para hablar. –George levantó la vista de la dicha revista y se llevó una mano al pecho, haciendo una expresión de que le había dicho un gran insulto.

-¿Qué estás intentando decir?, ¿Qué todos mis años de amistad los has echado a la basura solo porque esta revista está más interesante que tú?. –Dijo haciendo drama y yo solo giré los ojos.

Estábamos en el parque que estaba cerca de la casa de Niall, eres un lugar genial porque había juegos para niños, mesas donde comer y una enorme cancha para jugar futbol. Yo no soy tan fanático de practicarlo, pero vamos, todos estaban jugando –excepto George y yo- y estar allí sentado en esa mesa me estaba poniendo de mal humor. Varias veces había visto a Niall marcar goles y a Josh maldecir por lo bajo, y me daba gracia, pero me hubiera divertido más si Niall me hubiera dejado jugar.

-Tu novio aun tiene el toque, Shelley. –Le dije mientras tomaba una papa frita del plato de George.

-Sí, el tuyo no se queda atrás. –Me dijo y yo sentí mi cara arder, pero igual sonreí como idiota, así como decía Niall que él sonreía cuando pensaba en nosotros. Giré mi vista de nuevo a la cancha pero ya no vi a Niall, porque se había ido a sentar entre George y yo a los asientos de la mesa.

-Hey. –Saludó con la respiración agitada mientras intentaba recuperarse. -¿Han visto eso?, vamos ganando 4-3, Josh está que echa humo pero debo admitir que ha dado buena pelea. –Sonrió hacia mí. -¿Cómo te sientes?. –Fruncí el ceño.

-Aburrido. –Le dije y el giró los ojos. –Me sentiría mejor si jugara un rato. –sugerí y Niall rápido negó con la cabeza.

-No, aun estás lastimado, ¿sabes la suerte que tuviste?, y más aun que fue en la última semana de clases y no perdiste ni un día. –Dijo y yo le hice un puchero, entonces él suspiró. –Eso no funcionará, Liam, dije que no. ¿Te imaginas si te caes y te golpeas el brazo enyesado?. –Negó. –No.

-¡Pero si voy a jugar con los pies no con los brazos!. –Renegué.

-¡Joder, Liam!, que no, que no, no seas imbécil y deja de estar renegando. –Gruñó y yo recargué mi cabeza sobre la mesa.

-Vale, como quieras. –Dije enfadado sin levantar la cabeza.

-¿Estás seguro?. –Lo escuché preguntar y medio asentí. –Okay.

Esperé a escuchar algo más pero no hubo  nada. Levanté la cabeza y cuando lo hice solo me encontré con George leyendo su revista. Dirigí mi vista a la cancha y pude ver como Niall corría de nuevo hacia los chicos. Fruncí el ceño molesto.

-¡Eh, pedazo de imbécil!. –Le grité molesto y vi como rápido volvió a verme, formando una estúpida sonrisa en sus labios.

-¡No grites mucho, cariño, que puedes lastimarte!. –gritó para luego partirse de la risa y yo juro que me enfadé más.

Pero era un tipo de enfado que me gustaba.

Solté otro suspiro que juro que si seguía así me quedaría sin aire. Miré a George de re ojo y lo vi coquetear con Josh, quien estaba tomando un descanso del juego y desde lejos le mandaba besos a su novio. Esos dos eran como una relación perfecta y yo me preguntaba si algún día tendría algo así.