-¿Yo te gusto? -repetí incrédula.
-Sí -respondió. -Me gustas, Melanie.
¿No estoy soñando?
-¿De verdad? En serio esto parece un sueño, no puedo creerlo...
-Estás en la realidad, Melanie -dijo Allison sacándome de mi atontado estado, la sonrisa de boba no se me quitaba del rostro-. Y no estás soñando mensa.
Mi crush acaba de decir que le gusto.
Adiós a la dignidad.
Y hola a hacer el ridículo, pues grité tal cual como fangirl.
-Eres realmente tierna -dijo Allison sonriendo como boba. -Y no sabes cuántas ganas tengo de besarte -confesó y estiró mis mejillas.
-Dios, yo también -admití y Allison soltó mis mejillas y me miró sorprendida.
-¿Tu también? -repitió mordiendo su labio inferior.
-Yo también quiero que nos besemos -completé y reímos con vergüenza.
Allison me miró con un sonrojo cubriendo sus mejillas ligeramente, mientras que yo sentía que me ardía todo el rostro.
Un segundo después, miró mis labios y yo los suyos. Acercamos lentamente nuestros rostros y entonces...
-¡Tías! -apareció Lucía-. ¡Madre mía! ¡Sabéis que el profe Marcos no va a venir!
DIOS MÍO.
LUCÍA ESTÁ AQUÍ. ¿ACASO NOS VIÓ?
-Ah, si, eh... -dije.
-Lucía... -pronunció Allison y se acercó con Lucía.
-¿Qué te pasa? Mira nada más la cara que tienes -expresó Lucía.
-Lucía, ¿pero cómo se te ocurre venir aquí? Estamos en algo importante.
-Oh, ya lo pillo -respondió Lucía mirándome unos instantes-. Me voy.
-Sí, por favor -contestó Allison seria.
Cuando Lucía se fue, Allison y yo nos miramos en silencio unos instantes, hasta que sin pensarlo dos veces y antes de poder morirme —literalmente—, me paré de puntitas y le planté un corto y torpe beso en los labios.
-N-Nos vemos en el salón -dije y prácticamente huí al salón, mientras en el camino sentía como mi corazón me latía como loco y las mejillas me ardían.
NO PUEDO CREERLO.
***
Sentada en la silla del salón, miré a la puerta con nerviosismo y posteriormente, saqué de mi mochila un libro y escondí mi rostro en el.
-¿Qué pasó, Melanie? -me pregunta Lucía.
-Bese a Allison -respondí avergonzada apunto de morir, guardando el libro nuevamente en mi mochila.
La bese. La bese. La bese.
-Che pero cuenta los detalles -me dice Camila.
-Les cuento -dije y procedí a contarles muerta de la vergüenza: -De camino al salón me encontré con Allison, ella me dijo que le gustaba y que además quería besarme. Les juro que no podía creer lo que escuché, es que es tan... ¡Aaah! ¿Imposible? Allison, siendo mi crush y amor platónico, diciendo que le gusto y que además quiere besarme es un sueño hecho realidad... Perdón me desvío -delaté y sonreí culposa-. Le respondí que yo también quería que nos besaramos y entonces nos acercamos para besarnos. Pero entonces apareció Lucía. Y después, cuando se fue Lucía, sin pensar muy bien, me paré de puntitas y la bese y después me fuí del lugar, buscando asimilar lo que había pasado.
VOCÊ ESTÁ LENDO
Dos Corazones, Una Apuesta
Romance« ¿Puede un corazón roto sentir algo por una desconocida? » Melanie Dashton era alguien que no creía que eso podría sucederle después de una decepción que sufrió en el amor. Después de que le rompieran el corazón, no quiso saber más del amor. Hasta...