Por un reencuentro

Desastre

¡ADVERTENCIA!
Este capítulo tiene contenido fuerte. Violencia, desmembramiento, descripciones violentas. Si eres sensible a esto, te recomienda no leer el capítulo. Si estas de acuerda en seguir y leer el capítulo, esta bien. Es tu desición. Hago mi papel advirtiendo ya que hay lectores sensibles a escenas como las que se encuentran en el capítulo.

.
.
.
.
.
.
.
.

Sentía el aíre correr sobre su rostro, algo le decía, algo susurraba que todo...

—Falta mucho?— preguntó impaciente la castaña al bicolor.

—Estamos llegando, todos prep... —

Pero el bicolor no termino de dar instrucciones debido al paró abrupto que dio la gran bestia. Está gruñia y se agitaba violentamente en el aire.

—Salten!— gritó la azabache abandonando el lomo de la bestia.

Todos la siguieron pero fueron expulsados un par de metros lejos de su objetivo, aquella isla. Nadie se dió cuenta de aquella onda que los alejo un poco del lugar pero la castaña apreció aquel momento. Sintiendo la necesidad de ver lo que ocurria en aquella isla, conjuro un hechizo para expandir su rango de vista, haciendo posible ver lo que estaba sucediendo.

Con horror observo, el cuerpo destrozado de Bakugou sobre el suelo el cual era sujetado por Izuku.

Ahora estaba segura, debia de hacer aquello. Por su bien, por sus reyes, por sus compañeros, por todos. Debia de hacerlo aunque le costara la vida.

—Chicos!— llamó la castaña aun descendiendo —Necesito que me hagan un favor—

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Se concentró en la zona afectado, aplicó mágia. Cerro sus ojos para encontrar el origen de la infección. Poco a poco iba recobrando la movilidad. Necesitaba unos minutos pero...

Se escuchó a lo lejos un gran estruendo, algo grande habia caído —Por favor.... — susurró el peliverde alarmado.

Trató de ponerse en pie pero cayó al suelo. Sabía que tenia que avanzar, debia de ir con él. No podía levantarse por lo cual decidió arrastrarse hasta recuperar la movilidad de sus piernas. Debia de seguir, llegar con él...

—Esperame— pidió mientras avanzaba lentamente —Por favor... solo... esperame Kacchan—

.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.

Sintió un fuerte golpe a sus costados, gruñó en respuesta sintiendo el dolor prolongarse.

Estaba cediendo.

Cayó al suelo sin poder evitarlo, ya no podía seguir. Los hechizos estaban destruyendo su cuerpo rapidamente, tenía ahora tres sujetos que destruír y... estaba solo.

—Esté es tu fin— proclamó el castaño golpeando el pecho de la bestia aplicando aquel don destructivo —Perdiste, ahora muere—

Golpeó al castaño con una de sus patas, no tenía mucha fuerza. Y aquella forma solo lo drenaba más. Ante los ojos de aquellos tres, observaron como aquel gran dragón iba encogiéndose hasta ver nuevamente al rubio cenizo. Sus ropas estaban rasgadas su cuerpo tenia más heridas, las gotas de sangre eran visibles.