Por un reencuentro

Respuesta ansiada

Dos pares de ojos, uno esmeralda y el otro rubí se miraban fijamente sin decir palabra alguna. El peliverde permanecía sobre el rubio cenizo sin poder emitir palabra alguna, estaba avergonzado, rojo hasta las orejas al ser descubierto en tales actos.

—..ah.. v-veras... so-solo.... b-bueno y-yo... —

El rubio cenizo empujo sin cuidado alguno al peliverde notando en el proceso, que se encontraba mejor.

—No andes por ahi lamiendo a la gente, en que mierdas estabas pensando?—

—Bu-bueno veras, Kacchan. Ellos, ellos me dijeron que... — miró a su alrededor notando que ninguna de aquellas bestias se encontraba en el lugar —...ah.... ellos, ellos... veras Kacchan! Descubrí que en una vida fui un arcangel con grandes dotes curativos por eso...! —

El peliverde fue silenciado por la mirada hostil que el rubio cenizo le estaba lanzando en ese momento.

—Cállate! No digas una puta palabra más... pedazo de mierda por qué justamente... esa vida tenia que ser— murmuró lo último para ponerse en pie y caminar de un lado para el otro.

Parecía un animal acorralado, eso era lo que penso el peliverde al verlo reaccionar de ese modo. Al parecer habia tocado un tema delicado, sus sentidos estaban alerta por cualquier movimiento, qué estaba pasando?

El rubio cenizo sin querer y sin poder evitar, recordo cierta vida, cierto momento, cierta promesa.

Toma mi mano... Toma mi mano junto a mi vida, estare contigo sin importar que.

Por qué recordaba eso ahora? Por qué parecía que el destino se burlaba de él al recordar aquello?

Tomare todo de ti… así que, también toma todo de mí.

Fue lo mejor, por qué no pudo ser aquello eterno? Porque le daban todo lo efímero. Se habian hecho acciones, decisiones fueron tomadas y al final una promesa fue pactada.

Lo se, se que... sin importar en que vida, yo seguiré amándote.

No iba a ceder, no ante la cruel verdad y la prueba viviente de que aquello solo fue nada más y nada menos que palabras vacias.

...algún día, lo se. Estaré esperando las vidas que sean necesarias por eso....   no lo olvides, no olvides está vida por favor...

Era mentira! Todo era una maldita y asquerosa mentira por parte de él. Por qué no pudo cumplir aquello? Por qué él decidio aquello? Por qué no aprovecho aquel momento para mandar todo a la mierda y quedarse a su lado?

—MALDITA SEA!— gritó en fueria dejando salir todo.

Deku no sabía el motivo de aquello, no sabía porque Bakugou había reaccionado de aquel modo. Mucho menos porque mostraba aquel rostro tan cansado y triste por haber escuchado lo que habia dicho. No sabia lo que pasaba pero de algo estaba seguro.

No queria ver al rubio cenizo mostrar tal rostro.

—...Kacchan... para, por favor— pidió en voz baja sintiéndose mal al no poder ser de ayuda para el otro —No entendere si no me lo dices. No pido mucho solo... solo ayudame, ayúdame a encontrarte— expresó sin comprenderse mucho al decir aquello.

Mientras que el peliverde permanecía con su vista abajo esperando alguna palabra del rubio cenizo, esté le prestó su total atención al escucharle decir tales palabras.

Cuando sientas que la esperanza desvanece, ayúdame a encontrarte.

Bakugou mantenía su vista sobre el peliverde. Se acerco a esté para sujetarlo por los hombros, provocando que lo mirara sorprendido.