Codicia Marcada (Adaptación Camren) G!P

Capítulo 13

Camila POV

Me acerqué más a Lauren en cuanto salimos del ascensor hacia su despacho con las manos entrelazadas. En la redacción había bastante personal escribiendo pero lo único que me importaba en aquel momento era dejarle una vez más claro a Melhany a quien amaba Lauren.

-Hola, Lauren, ¿Vuelta a la rutina? - Preguntó Ian.

-Ya a pasado un mes - Contestó con un fingido gesto de aburrimiento.

-¿Cómo estás, Camila? Me sorprende verte por aquí.

-Bien, solo he venido a revisar unas cosas con Lauren.- Sonreí. Ian asintió.

-Toda tuya.

Seguimos caminando hasta que llegamos a la puerta de su despacho. Vi como Melhany por un segundo se ruborizaba, pero después intentó actuar como siempre que me veía con ella, indiferente.

-Buenos días.

-Hola Melhany.- Me aferré más a ella. - ¿Cómo has pasado este mes?

-Muy bien señora.

-¿Cuántas veces tengo que decirte que no me llames señora, Melhany? - Ag. Acaricié mi vientre con la mano libre.

-Lo siento s-s, Lauren.

-Eso está mejor. ¿Entramos, amor? - Asentí sonriente y rodeé su cintura con mis brazos siguiéndola hasta el interior de su despacho. Ella suspiró.

-Vuelta a la rutina. - Comenté, dejando mi bolso sobre una silla. Miré con recelo su desayuno sobre la mesa. - Vaya bienvenida. ¿No sabe que desayunas en casa conmigo?

-Amor, solo intenta complacerme.

-Para eso ya estoy yo. - Ella rió divertida.

-Voy a extrañar nuestra casa de luna de miel. - Me acerqué a ella rodeando su cuello con mis brazos.

-Creo que no vas a ser lo único. - Susurré poniéndome de puntillas hasta alcanzar sus labios.

No había pasado mucho desde el último beso que nos habíamos dado en su auto, pero la luna de miel me había revolucionado bastante. Seguramente echaría de menos el tiempo indefinido junto a ella, ahora tendríamos que volver a los horarios… a los malditos horarios. Alguien tocó la puerta y nos separamos inmediatamente. Ella carraspeó y yo me alisé un poco la ropa.

-¡Adelante! - Gritó ella aun a mi lado.

-Hola. - Saludó Normani pasando al despacho con una enorme sonrisa y dándonos un beso a las dos.

-Hola Mani.

-¿Cómo ha ido el viaje? - Nos preguntó colgándose del brazo de Lauren.

-Maravilloso.- Contestó mi mujer. - Se me ha hecho muy corto, no sabes hasta qué punto. - Normani sonrió mirándome.

-Querida yo me casaría las veces que hiciese falta con la condición de que me lleve siempre a Isla Mauricio. - Yo reí.

-Creo que iremos más veces. Estoy segura de que alguien que estará aquí en unos meses se lo pasaría genial. - Dijo mirándome tiernamente.

-Es sorprendente, Lauren. De rompecorazones a mamá.

Mani me gustaba, pero el que fuera tan sincera a veces me hacia sentir un poco mal. Igualmente intenté sonreír. Ella se despidió diciendo que tenía algunos asuntos pendientes.

-Bueno… - Dije poniéndome detrás de su mesa, -¿Qué era eso que querías enseñarme? - Sentí su calor en mi espalda cuando sus brazos me rodearon y exhaló su aliento en mi cuello.