Codicia Marcada (Adaptación Camren) G!P

Capítulo 8

Camila POV

-Oye Lucy, ¿Has hablado con Lauren sobre el nuevo reportaje que saldrá en el siguiente número? - Pregunté a mi amiga, quien estaba sorbiendo de su taza de café.

-No.- Dijo con el ceño fruncido. - Aunque bueno, supongo que tú ya le habrás comentado algo.

-¿Yo?

-Sí… - Gesticuló como si aquello fuese lo más normal del mundo y en realidad lo era. - Mila, vives con ella, es obvio, ¿no? - Me mordí el labio medio sonriendo.

-Casi no hablo de trabajo con Lauren. - Admití notando un pequeño, pero no menos notable calor en mis mejillas.

-Ya… - Rió. - La verdad es que no tiene por qué. - Estuvimos un rato en silencio, yo pensando en el maravilloso fin de semana que había pasado junto a ella y Lucy, supongo que pensando en algo también. - Como ha cambiado. - Fruncí el ceño, sin entender. Ella sonrió. - Lauren. No sé, ¿recuerdas cuando te comenté que tuvieses cuidado con ella? - Reí asintiendo.

-Y de verdad quise tenerlo, pero fue imposible, era completamente imposible. - Comenté sintiendo la nostalgia.

-No lo era, te enseñé unos ejercicios de autocontrol que quizás deberías haber puesto en práctica. - Puse los ojos en blanco y comenzamos a reír.

-Me alegro de que no funcionaran para nada. - Confesé encogiéndome de hombros. La miré con curiosidad. - ¿Cómo era Lauren? - Ella me sonrió sabiendo perfectamente a cuándo me refería.

-Si te digo la verdad, parece la misma, un poco más extrovertida y lanzada, sí, pero sigue siendo ella.

-¿Igual?

-Bueno, tengo que decir que solía ruborizarse, no muy frecuentemente, pero era bastante tímida. - Reí, era una visión de Lauren que jamás podría tener, ¿Ella sonrojándose? Era casi imposible. Miré a Lucy cuando dejé de divagar por mi ensoñación, su rostro había dejado de sonreír para estar serio y disgustado.

-¿Qué pasa? - Dije acercándome más a ella. Negó con la cabeza mirándome apenada.

-En parte yo tuve la culpa de su cambio. - Sonreí.

-No tienes culpa de nada Lucy, simplemente dejaste de quererla, aunque tengo que decir que no sé como pudiste… ¡a mi me tiene enamoradísima! - Dije a modo de broma, intentando animarla. Ella sonrió, suspirando.

-Me alegro muchísimo que sean tan felices, de verdad.

-Bueno, a veces discutimos, pero ya sabes. - Dije mirando hacia mi taza, notando como el rubor inundaba mi rostro. - Lo mejor son las reconciliaciones…

-Así que este fin de semana ha sido genial. - Reí asintiendo y bostecé mirando mi reloj.

-Vaya, lo siento, últimamente ando más despistada que de costumbre, he quedado para ir con Lauren al médico, últimamente no me encuentro muy bien.- Comenté mientras me levantaba con ella.

-¿Qué te pasa? - Preguntó con el ceño fruncido, mientras me acompañaba hasta la barra de la cafetería para que nos cobraran. Suspiré, sintiendo un pequeño vuelco en mi estómago al recordar mi sospecha.

-Creo que estoy… embarazada. - Los ojos de ella se abrieron con una enorme sonrisa.

-¡Mila! - Eclamó abrazándome.

-Sh, sh, sh, he dicho que lo creo, no que lo esté, solo es una pequeña sospecha. - Murmuré mirando hacia todas partes, comprobando que ninguno de los empleados que trabajaban en la revista hubiesen escuchado nada.