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Los días pasaron, ya los estudiantes de primer año del curso de héroes se habían ido a sus prácticas, estarían bajo la supervisión de héroes profesionales.

-¿Ves Kuru-mint? Si hubieras aspirado al curso de héroes, estuvieras aprobada y de paso a estas alturas también irías a las prácticas- le apuntaba con unos palillos mientras almorzaban- ¿No te sientes frustrada por eso?

-¿Frustrada? Yo no diría eso, estoy más feliz que nunca.

Ciertamente, la chica desde la primera vez que empezó a maniobrar desde el anonimato se sintió a gusto. A partir de esa noche repitió el mismo procedimiento las siguientes, aunque claro está, tenía que arreglárselas para que ni sus amigos ni sus tutores pudieran acompañarla a casa.

-¡Syrus, dile algo!

-Déjala ser, Emiko. Si ella es feliz en donde está debemos dejarla en paz.

-¡A ustedes dos les faltan sueños y aspiraciones! Están muy encerrados en su zona de confort- siguió comiendo apresurada y con algo de indignación.

-Por cierto Kurumi- repuso el chico ignorando el berrinche de su amiga-¿otra vez Amajiki-senpai te negó la petición de almorzar juntos?

-Sí, todavía le da mucha pena estar conmigo- suspira con algo de pesadez- pero no entiendo, solo quiero conocerlo más. Digo, sé lo difícil que es tratar de relacionarse con la gente, quiero ayudarlo en eso. Al menos pude entregarle la comida a Togata-senpai para que se la de por mí.

-Me consta, fuiste así cuando éramos niños. Estoy conforme con la evolución que has presentado durante este tiempo con nosotros- le sonrió gentilmente al mirarla a los ojos- te aseguro que con perseverancia podrás conseguir ayudarlo como nosotros a ti.

-O te termines enamorando de él- como premio por su imprudencia, la pelirroja fue callada por un onigiri que Syrus había introducido en su boca.

"¿Enamorarme? Ni hablar, no tengo tiempo para eso. Debo hacerme más fuerte para protegerlos a todos, aún si lo hago entre las sombras y sin derecho a méritos" la chica había pensado en eso último innumerables veces como una desventaja, pero en sí no le interesa la fama ni nada de eso, así que simplemente sigue adelante con su decisión.

Las clases terminaron más temprano de lo habitual y empezó a llover. Tanto Emiko como Syrus aún debían quedarse tiempo extra, las notas de la primera habían sido un desastre y su amigo le impuso unas lecciones intensivas después de clases. Kurumi decidió tomar el camino largo hacia su casa.

Afortunadamente llevaba su paraguas, le gustaba mucho la lluvia. De no ser porque si pesca un resfriado Aizawa la castigaría, andaría caminando alegremente sin resguardarse. Por mero instinto se volteó para mirar a la U.A antes de irse. No solo captó eso, sino que a lo lejos pudo observar al chico con el que estaba tratando de relacionarse últimamente.

-¡Amajiki-senpai!- alzó su mano para saludarlo con todas sus energías en lo que se acercaba a él- ¿Hm? ¿Donde están Togata-senpai y Hado-senpai?

-S-Se fueron a sus respectivas a-agencias, sus jefes los solicitaron- se encogió como si fuera la mejor opción para poder desaparecer de la vista de ella.

-Ya veo, ¿tiene inconveniente si nos vamos juntos?- empezó a caminar al mismo ritmo que Tamaki mientras esperaba una respuesta.

-No, n-no tengo problema Tsu-tsukim...

-Tsukimori, aunque me puede llamar Kurumi.

-K-Kurumi-san, ¿así está bien?- por alguna razón el ambiente de la lluvia relajaba un poco la tensión entre los dos.

夜空の下の夢 - My Hero AcademiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora