C e l o s

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ALEX
—Mierda, ¿a que huele?.—dije saliendo de la casa—¿No te has bañado, papá?.
—Si.—dijo acomodando las flechas de su ballesta, yo quería esa ballesta.
—Ajá claro.—seguí mi camino.
—Hey.—me llamó mi padre, volteé y levanté las cejas para que continuara—Vino un chico a buscarte, no era Carl.
—¿Y?.—le dije y me alejé de ahí sin dejarlo responder.
Cuando me desperté Carl ya no estaba a mi lado, después de lo de anoche no sabía cómo actuar así que mi mecanismo de defensa era enojarme con él. No negaba que me había gustado pero...choqué con alguien pero me tomó de la cintura para evitar que me cayera. ¿Y este que cree que soy, una damisela en apuros?. Puedo mancharme la ropa de sobra. Me solté de él y seguí caminando.
—Oye, Alex.—me siguió.
—¿Que quieres, Ronald?.—le dije de mala gana.
—Es Ron.
—No me importa.

Nos pasamos toda la mañana en su casa entre risas y bromas, resulta que no era como pensaba pero aún así no sabía nada de lo que pasaba afuera.
—¿Y qué hacías antes de esto?.—me preguntó mientras caminábamos.
—Lo mismo que tu, supongo. Ir a la escuela y esas cosas.—le dije.
—¿Y...cuánto tiempo llevas con, Carl?.
—Woow, ¿a que te refieres?.
—Él y tu son novios, ¿o no?.—pareció decir lo último de una forma mas alegre.
—NO.—le dije—Solo somos...amigos, supongo.—después de lo de anoche no sabía que éramos exactamente.
—Ooh.—dijo feliz, lo descifré por su expresión—Genial.
A lo lejos noté que Glenn estaba teniendo una discusión con el hijo menor de Deanna. Me acerqué rápidamente con Ron detrás mío, la gente ya estaba viendo la escena, incluyendo a mi grupo.
Aiden soltó un golpe que Glenn logró esquivar y luego mi amigo lo tiró con otro. Nicholas se iba a lanzar contra él pero papá lo derribó impidiendo que se moviera. Instintivamente lleve mi mano a mi cuchillo, que ahora lo llevaba en la cintura.
—¡Deténganse!.—llegó Deanna.
Rick y Carl entraron, yo desvié mi mirada en cuanto lo vi y el mayor de los Grimes corrió a papá para que dejara a él otro sujeto.
—¡Ahora escúchenme todos!. Rick y su grupo son parte de Alexandria. Los trataremos como igual. ¿Entendido?.—dijo Deanna y los que estaban ahí asintieron incluyendo al idiota de su hijo.
Carl volteó a verme a mi y luego a Ron, quien estaba detrás de mi. Nuestras miradas cruzaron, luego me volteé a Ron y me alejé de ahí. Me iba a volver loca.

Estaba parada enfrente de la casa donde estaba "la fiesta" que Deanna había organizado, no sabía sí era buena idea entrar y estaba meditándolo.
—¿Qué te pasa?.
—Me espantaste.—le dije a mi papá—Nada. ¿No vas a entrar?.—él negó—Yo aún no lo sé.
—Pues te ves bien.—me dijo y se alejó de ahí. Yo volteé a ver mi ropa. Nada especial, pensé.
—¡Alex!.—Deanna me abrió la puerta—¿Y tu padre?.—dijo buscándolo con la mirada.
—Él no va a venir.—le dije analizando el lugar.
—Bueno, me alegra que estes aquí.—yo le asentí sin prestarle mucha atención. Me alejé de ella y fui con Glenn y Maggie, las primeras caras conocidas que vi.
—¿Daryl no vendrá?.—me preguntó Glenn.
—No.—le dije—Y yo ya me arrepentí, mejor me voy.—pero ellos me detuvieron.
—Oye, ya no escapes más, estás con nosotros.—habló Glenn.
—Me siento incómoda.—le dije alzando los hombros.
—Sobrevivir no lo es todo si no tienes un motivo.—lo miré sin saber que decir.
—Ahí está Carl.—señaló Maggie al grupo donde se encontraba Ron también. Trate de negar pero él se dio cuenta de mi presencia—Anda ve.—me dijo ella sonriéndome.
—Alex, ven aquí.—estaba entre Ron y Carl, me sentía más incómoda ahora.
Estaban hablando sobre su tarde de videojuego—Yo le gané.—dijo Carl al otro tipo.
—Si, Alex también me ganó a mi—me dijo Ron sonriéndome.
—Lo hice.—le dije devolviéndole la sonrisa un tanto incómoda. Volteé hacia Carl y me miraba como si hubiera hecho algo terrible. ¿Qué me estaba pasando?.

Entré a la casa y la voz de mi padre se hizo presente.
—Tenemos que hablar.—me dijo con un tono de voz que no me gustaba porque sabía que diría algo importante.
—¿Que pasa?.
—Aarón me ofreció un trabajo.
—Y necesitas mi permiso.
—Cállate y escucha. Seré un recolector, como él.
—¿Qué?.—abrí los ojos—No puedes aceptarlo, es muy peligroso. Puedes...casi matamos a Aarón cuando lo conocimos.—estaba alterándome.
—Lo sé, pero me siento más cómodo allá afuera que aquí dentro... creo que sería un buen trabajo.
—Si, sí quieres morir.—dije sarcástica. Me sentía preocupada por él, pero no lo podía detener.

—Hola, Alex.
—Hola, Ron.
—¿Quieres venir a mi casa?. Tengo unas nuevas historietas y...
—No ahora, me siento mal.
—¿Por qué, qué tienes?.—me dijo preocupado.
—Nada, solo me duele la cabeza, otro día, ¿de acuerdo?.
—Bien, puedo quedarme contigo.
—No. Estoy bien, quiero estar sola.
—Bueno, nos vemos después.—y antes de que yo pudiera reaccionar beso mi mejilla haciéndome sentir más confundida de lo que estaba.

—Oye...—limpie mis lágrimas rápidamente antes de que papá se diera cuenta pero fue muy tarde—¿Qué te pasa?.—se acercó a la ventana dónde a lo lejos se podía ver a Carl e Enid juntos—¿Es en serio, el mundo se fue al carajo y tu lloras por esto?.—es un insensible, pero tenía razón. Soltó un suspiro—Ya me voy.
—Bien, nos vemos. Y trata de regresar con vida.
—Lo haré. Y sí pasa algo...
—Lo haré.—le dije. Movió su cabeza en forma de despedida y salió.
Desde que murió Beth se preocupaba más por mí y me cuidaba como si yo no supiera hacerlo.
Ya todos tenían un trabajo, claro excepto yo y Carl. Y no iba a ir a "clases" así que no tenía mucho que hacer.

Noah había muerto en una salida con Glenn y otros. No conviví mucho con él pero todos los del grupo eran importantes de algún u otro modo para mí. Tara también habia regresando malherida y seguia sin despertar, con ella me llevaba mejor y estaba preocupada. Papá había ido a su primer salida, por lo que vi se llevaba bien con Aarón, y sinceramente él y Erick eran los únicos que me agradaban de aquí y Ron; pero aún seguía sin descifrar que era lo que me pasaba con él. No había hablado con Carl en estos días tampoco, ya cada quien se había instalado en diferentes casas. Yo dormía en la misma con Carol y papá. Deanna estaba bastante triste, en la salida donde Noah perdió su vida y pasó lo de Tara, Aiden también murió; él era su hijo. Glenn dijo que todo fue culpa de Nicholas y era obvio que no mentía pero los de aquí eran demasiado ingenuos para notarlo.

—Te queda bien el traje, sheriff.
—Hola.—me dijo Michonne dándome una sonrisa—Gracias, es algo ajustado pero me gusta.—Deanna había nombrado "sheriffs oficiales" a Rick y Michonne y a mi parecer no había nadie mejor para ese puesto—¿Qué pasa?.—dijo al ver mi expresión.
—Todavía no me acostumbro aquí.
—Es un buen lugar y son buenas personas, haremos que funcione. ¿Pasa algo más?.—negué—Vamos puedes contarme lo que sea, soy tu amiga.
—Me cambiaste por Carl.—traté de bromear pero no me salió tan bien.
—Eso no es verdad.—y se rió un poco.
Llegó Rosita preocupada diciendo que no encontraba a Sasha. Estos últimos días había estado mal así que fuimos a ver que pasaba. Tomamos nuestras armas y salimos.
—Han estado cazándolos.—dijo Michonne refiriéndose a los caminantes muertos expandidos por el suelo.
—Vayan por allá y yo iré de este lado.—dije señalando las huellas—Ella debe estar cerca.
Estaba rastreando las huellas para poder encontrar a Sasha. Ayer en la fiesta se puso intensa y al parecer estuvo haciendo guardia toda la noche. La entendía, su novio y su hermano murieron casi al mismo tiempo y desde antes de llegar aquí ella ya no estaba bien.
Iba por el bosque, escuché voces, eran Enid y Carl. Hice ruido a propósito y me paré en frente de donde estaban. Carl se calló y me miró, yo me alejé de ahí y volví a dentro aguantándome las lágrimas. Lo odio, pero no a él, odio sentir esto, el dolor en mi pecho cada que lo veo con esa niña tonta. Mierda. Estaba celosa de ella, de que me quitara la atención de Carl y su tiempo. Tenía miedo de perderlo. Si, estaba celosa de Enid porque me gustaba Carl.

TWD-Carl Grimes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora