"No me importa sí viene una persona o quinientas personas más intentando conquistarme, sí yo estoy contigo soy solo tuyo, no me importa quién venga o quién vaya intentando alejarme de ti, no me importa sí todo el mundo quiere qué nos alejemos, si yo...
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Ben me abraza y la paz comienza aparecer en todo mi cuerpo. Después de unos cuantos minutos abrazados, ninguno de los dos temblaba de frío.
—Funcionó.— me dice aún sin soltarme.
—Creo que sí.
Los dos nos separamos y sonreímos. Ben me hace un gesto para que tomáramos asiento en el pasto aún seco.
Me acerco y me siento a un lado de el.
—Te abrazaré una vez más.
Ben me jala hacia el y me recuesto en su pecho. El solo acariciaba mi cabello mientras escuchábamos como la lluvia caía en el pavimento, haciendo un ruido realmente agradable y satisfactorio.
—¿Camila?
—Dime.
—¿Puedo preguntarte algo?
Me levanto de su pecho y volteó a verlo.
—Claro.— le dedico una sonrisa.
Ben comienza a jugar con sus manos y su rostro se veía preocupado e indeciso.
Un flashback vino a mi mente, era mi raro sueño que tuve hace unos años. Mi corazón empezó a palpitar y mis manos sudaban.
—Y-yo...— Ben se queda en silencio después de su tartamudeo.
—Tú qué...
El rubio levanta su mirada y sus ojos chocan con los míos.
—Yo le pedí matrimonio a Elena.
Me quedo en shock al escuchar la palabra matrimonio.
—¿Que? Y que te dijo?
—Ella acepto.— hace una sonrisa de lado.
—¿Acepto?— el asiente, no sabía que decir.— Y-yo me alegro por los dos, pero...
Ben me mira con el entrecejo fruncido.
—¿Pero?
—No crees que van muy rápido, digo, yo sé que cuando teníamos dieciocho ustedes dos andaban, pero han pasado siete años Ben, deberían salir primero como noviazgo...
—Camila, yo la quiero.— bajo mi mirada — ella me quiere, ya hablamos de esto y Elena está de acuerdo.
