Inferioridad Superior

482 33 4
                                    

Estaban en pleno proceso de preparación, ajustándose meticulosamente la indumentaria que los acompañaría en el enfrentamiento. En ese instante, la figura de Jude y Travis aparecieron. Jude llevaba unas notas y se las dio a Travis, éste las ojeó un momento, asintió y empezó a decir los jugadores titulares del partido contra "El Anillo de Fuego del Pacífico", la selección de Indonesia.

—Hoy jugarán: Alessandro, Aitor, Wanli, Iggie, Biel, Rex, Cronus, Riccardo, Sol, Lucian y Njord. Los demás estar atentos, porque es probable que realicemos cambios durante el partido. Vuestras oportunidades aumentarán si están atentos.

Los dos entrenadores se disponían a abandonar el vestuario, pero antes de que cruzaran el umbral, Harrold Houdini los detuvo. Su expresión larga y ensombrecida evidenciaba su frustración. Los dos se giraron para verlo, y un silencio tenso se apoderó del lugar mientras Harrold, con los puños apretados, parecía luchar por contener una furia incontenible. Finalmente, rompió el silencio.

—¿Por qué habéis puesto a ese antes que a mí? —Todos echaron un vistazo a Houdini y a Rex Remington puesto que tuvieron aquel problema en el partido anterior, pero no era él a quien se refería—. ¿Acaso es por qué aquél jugará? —Señaló a Rex con un gesto despectivo—. Si es por eso no me importa, así que por favor ponerme antes que aquel paquete de Biel. —El susurro salió de los labios de Harrold casi obligado por el viento. No quería que le escucharan los demás.

Los dos se miraron, luego se volvieron a él con los rostros más serio que nunca habían visto los chicos, era intimidante, unas facciones endurecidas por el fruncir de ceño más terrorífico que habían visto. Finalmente negaron la cabeza con firmeza. Todos estaban expectantes, temiendo algo fuera de control. Houdini estaba igual de enfadado, estuvo a punto de volverse a quejar, pero entonces Jude quien lo silenció de manera tajante.

—Harrold, lo que acabas de decir si lo hubieras hecho en otro lado lo más probable es que ya te hubieran echado directamente del equipo. Así que no te lo voy a decir más que esta única vez. Si vuelves a comportarte o hablar de esta manera, te expulsaré personalmente, sin importar si Percival te protege o no, cosa que dudo que haga con tu actitud. Así que modera tu lenguaje si sabes lo que te conviene. —sentenció. Las palabras de Jude habían salido de su alma con una proyección tres veces mayor al ego de Houdini.

Harrold se dio la vuelta sin articular palabra. Todos le miraron con desaprobación, incluso Wanli. Houdini no estaba seguro si se habían enterado sobre lo que había dicho de Biel, o si le miraban mal pensando que hablaba de Rex.

Se fijó en Biel, éste no estaba pendiente de él, sino que hablaba tranquilamente con Lucian Dark. 

Se vistió con su ropa y salió al campo junto a sus compañeros. Se dividió junto a Arion, Preston, Victor, Bay, las chicas y JP para dirigirse al banquillo donde se sentó apartado de los demás y sin hacer caso al partido. Desaparecido cual carta de ilusionista.

Fue entonces cuando los jugadores de Indonesia hicieron su entrada en el campo. Los himnos nacionales resonaron, y Riccardo se estrechó la mano con el capitán del equipo rival, Darma Majdi. En realidad era el segundo capitán, ya que el verdadero capitán era Toer Skouri, pero al igual que en su partido contra Taiwan, él comenzaba en el banquillo.

Se prepararon para sacar. Iniciaría Inazuma Japón y el encargado de eso era Riccardo.

Se prepararon para el saque inicial, que estaría a cargo de Riccardo. Mientras tanto, Lucian observaba una enorme pantalla que mostraba el marcador, los minutos y la formación de ambos equipos. El equipo indonesio tenía una formación sólida: cuatro defensores, cinco centrocampistas y un solo delantero, con jugadores como Buana Tahir en la portería, Harta Jamal, Dwi Erawati, Krisna Padwa y Putra Wawan en defensa, y Darma Majdi, Eko Faisal, Kuwat Giok, Budi Njo y Agung Nauta en el centro del campo, con Guntur Tahir como delantero solitario.

Inazuma Eleven Go: ¡Mundial, allá vamos!Where stories live. Discover now