Capítulo Cincuenta y Seis.

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"Crisis"

Gabriel se encontraba sentando en su escritorio, a su lado estaba Nathalie parada, mirando fijamente a la rubia que se encontraba sentada frente a estos mirándolos de una forma tan tranquila, que sacaba a la azabache de sus casillas.

─Habla Amelie─ musitó el de lentes bastante molesto, la contraria tragó saliva y se preparó para hablar

─Bueno Gabriel, tu sabes bien que estuvimos juntos─ Nathalie frunce el seño al escuchar tal cosa ─Yo ya había pasado de ti, pero parece que nuestros encuentros quieren que estemos juntos

─¿De que hablas?─ pregunto molestó, no entendía porque esta se empecinaba en hablar con códigos

─Gabriel lo hicimos muchas veces, y somos conscientes de que no nos cuidamos─ ríe ─Estoy esperando un hijo tuyo─ dijo sin más rodeos, Gabriel se quedó atónito y Nathalie sintió que su cabeza daba vueltas no podía creer tal atrocidad

─E~E~Eso es imposible─ balbuceo el hombre y al instante busco la vista de su novia, está había dado unos pasos hacia atrás mientras se agarraba la cabeza, tal confesión le dolía como un puñal

─¡Claro que no!─ bufo desabrochando su abrigo ─Aqui está la prueba, tú fuiste mi último hombre, es claro que es tuyo─ enseña su abultada panza

─Pero─ se queda callado al sentir los tacones de su amada salir del lugar ─Amelie. . .por favor es imposible─ la contraria hace una mueca de molestia ─Tu vientre está muy alto para los meses que debe tener esa criatura

─No niegues la realidad─ se quejó

─No la niego, pero estuvimos hace menos de dos meses y Emilie engordo a los tres meses y medio, ni siquiera llegó a ese diámetro y Adrien si que pesaba cuando nacio.

─No todas tenemos el mismo metabolismo─ replicó astuta

─Amelie por favor, estoy bien con Nathalie, deja esto, es una tontería, no es propio de ti─ hace una pausa ─Sos alguien inteligente, no te rebajes a ésto

─Bien, tienes razón, pero ahora me metí en esto y no puedo salir─ se pone sería ─Con ese bicho en mi, ella me dijo que puede acabar conmigo cuando quiera, asíque o terminas con doña fría o yo muero

─¿Mascara de hierro está detrás de esto?─ la rubia asiente ─¿La viste?─ vuelve a asentir ─Te puedo ayudar si me dices quién es, estoy seguro de que contigo se presentó sin disfraz─ la rubia asiente nuevamente

─Se hace llamar Catherine Smith─ contesto en tono bajo

─Bien, no te preocupes, ahora haré una llamada y te ayudaré, pero después tendrás que disculparte con Nathalie por intentar arruinar lo nuestro─ la contraria resopla frustrada

─Bien─ acepto

Gabriel agarró su teléfono e hizo una llamada, luego ambos se quedaron callados hasta que una de las ventanas del atelier fue abierta, la mismísima Ladybug se encontraba en la sala, el platinado le explicó la situación y esta entendió al instante, se acercó a la rubia y le pregunto si sabía el lugar en donde se encontraba el insecto, está mostró su pulsera, la de coletas la tomo, la rompió y libero a la mariposa roja, con su yoyo la purificó y al instante la panza de Amelie se desinfló, todo era obra de ese maldito Akuma, un poder realmente extraordinario que ni siquiera Gabriel dominaba.

Miraculous: Peligro Where stories live. Discover now