Capitulo Doce.

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"Amelie es la paradoja"

Como había prometido Bunnix se encontraba en su madriguera viendo todos los futuros posibles que habria, para poder encontrar el origen de la paradoja y solucionar todo el problema, poco a poco sus memorias eran cambiadas por los nuevos acontecimientos y ya casi estaba a punto de olvidar a Amelia y la razón de estar ahí, los hoyos en su dimensión mostraban eventos, que al instante eran reemplazados por unos nuevos, y esos así mismo también eran cambiados, la intervención de la joven Sancoeur-Agreste estaba causando más problemas que soluciones.

─Ya no me queda tiempo pequeña gatita, ya ni recuerdo tu nombre.

Comento con frenesí, tenía que ayudarla antes de olvidar, pero no podía si todo cambiaba tan rápido, era casi imposible buscar la fuente de los cambios, y su tiempo se agotaria pronto, estaba frustrada, era la primera vez que fallaba y pronto ya no existiría.

─Piensa Alix, piensa─ se dio ánimos ─Ladybug te escogió porque eres la única que puede hacer esto─ cierra sus ojos y toma aire ─¡Bingo!─ exclamó y se dirigió hasta una parte de los momentos, unos que ya estaban escritos y no cambiaban tan rápido, al llegar ahí se espanto ─No puede ser─ comento al ver las imágenes ─Se supone que la señora Agreste debe estar muerta─ dijo viendo a la rubia estando parada a un lado del diseñador ─Espera─ se detiene a ver con más calma lo que sucedía─ ¿La paradoja me afecta o hay dos Adrien?─ se preguntó con confusión ─¡NO, NO, NO!─ grito al percatarse que no era Emilie Agreste a la que veía, sino a Amelie Graham de Vanily ─Es ella, ¿pero que demonios?, ¡en que cabeza cabe re hacer tu vida con la gemela de tu esposa muerta!─ se agarra la cabeza ─Debías elegir a Nathalie, dios, tengo que avisarle a Amelia, debe saber que el peligro es la tía de Adrien─ se gira y corre hasta la parte principal, al año en donde envío a la rubia, allí habré un hoyo y sale, en efecto estaba en París pero por alguna extraña razón no había salido cerca de la joven, ni siquiera estaba cerca de la mansión

La heroína con temática de conejo se trepó en un edificio y empezó a correr por las azoteas, con su vista recorrió la ciudad hasta encontrar la mansión, al hacerlo corrió hasta ella, una vez ahí reviso las ventanas; no había señales de la chica, luego se giro y corrió hasta la casa de Marinette, allí reviso el balcón y la ventana, pero tampoco había señales de la chica, desesperada empezó a correr al centro, con la esperanza de encontrarla pero nada, por suerte en una de las calles vio a la chica de coletas, sin dudarlo se abalanzó sobre ella, lo último que había visto de su futura amiga fue que le pidió ayuda a ella.

─Marinette─ la llamo, esta la mira y se espanta ─Tranquila, necesito a Amelia, ¿puedes ayudar?

─Esta en la mansion─ contesto tranquila ─¿Sucede algo?

─Tengo que decirle una cosa con urgencia, ya estuve en la mansión pero no la encontré.

─Búscala con Adrien, seguro esta con el, ahora su cabello es pelirrojo, se tiñó para pasar desapercibida en la mansión─ comento con tranquilidad

─Gracías Mininette─ guiña un ojo y se retira

La heroína corre nuevamente por los techos, empieza a sentir como su presión aumenta y como recuerdos importantes se van borrando, el principal, el rostro de la joven, con desesperación busca con su vista al modelo, pero no lo ve por ningún lado, una idea se le ocurre y va hacia el instituto, una vez en el techo del lugar busca con su vista al rubio, su cuerpo tambalea y su visión se vuelve borrosa, era ahora o nunca, de pronto ve al joven acompañado de una pelirroja, corre hacia el pero cuando está en un mejor ángulo se percata que era Lila Rossi quien estaba caminando a su lado, la desesperación entra en su cuerpo una vez más, ya casi todo estaba perdido, rendida se gira y decide ir hacia la mansión, allí ve que Nathalie está en el patio trasero de la casa acompañada de una pelirroja, por fin la encontró, nuevamente su visión se vuelve borrosa, y cuando la recupera, continúa viendo a la pelirroja pero no sabe en donde esta, mira su entorno y se percata que esta en la mansión Agreste.

─¿Qu~Que hago aquí?

Se preguntó mientras seguía viendo para todos lados, sin dudas no era su tiempo, pero no podía recordar que sucedía, con su vista mira al rededor una vez más y ve que todo está en orden, la última cosa que mira es a la asistente de Adrien acompañada de dicha pelirroja, la cual la estaba ayudando a acomodar unas plantas, la adulta decide que todo está bien, y abre un hoyo para volver al futuro, por el momento parecía que no tenia nada que hacer, cualquier error que haya cometido podría repararlo volviendo al mismo momento que se fue, seguramente Ladybug le explicaría todo una vez este de regreso, sin dudar más entro en su madriguera y dejo el lugar.

Por su parte Nathalie y Ana continuaron arreglando el jardín, la chica se sentía bien ayudando a su madre, pasar tiempo con ella la calmaba y la ayudaba a pensar con mejor claridad, además de empezar a construir un lazo con ella para poder ayudarla pronto con su padre y unirlos como debe ser.

─Son muy bonitas estas flores─ comento la pelirroja con algarabía

─Si─ dice sin verla ─Son mis favoritas─ agrega con gracia ─Las flores más bellas que existen─ la mira y sonríe

─Creo que también me gustan─ réplica con una sonrisa

Tras terminar de arreglar el jardín ambas entraron en la casa y tomaron un vaso de limonada, después Nathalie volvió al escritorio y la chica se encerró en su habitación a esperar que su hermano vuelva del instituto.

Miraculous: Peligro Where stories live. Discover now