TREASON── ᵗʷᵈ

5. uniéndose al enemigo

05' tienes que madurar.

     Preparo mis cosas en silencio, con lágrimas resbalando por mi rostro, con el corazón hecho añicos. Cuándo creo que he empacado todo noto la estrella dorado de sheriff que en algún momento perteneció a mi padre, la misma que me obsequió una difícil noche en la que Carl se debatía entre la vida y la muerte en la granja Greene. La observó por largos minutos en donde me planteo llevarla conmigo, que sea aquello que me acompañe y de fortaleza en medio de tanto caos, pero de pronto entiendo que aquello será solo un recuerdo y un impulso a querer echarme para atrás, y no puedo permitirmelo.

     Claramente la decisión que he tomado es un impulso más en mi vida, solo que este parece tener una buena razón, y un fin aceptable. Tengo en cuanta que apartir del momento en el que salga de esta casa y vaya hasta él mi vida dará un cambio radical, tan distinto, que va a herir a más de un corazón, pero esta es la única alternativa que todos tenemos. En el momento en el que me detenga para pensar todo lo que estoy haciendo, todo lo que he comenzando y todo lo que he cambiado, estallare en un río de lágrimas imparable, pero planeo que para ese entonces yo ya este demasiado lejos para retactarme.

     Cuelgo la mochila en uno de mis hombros y bajó hacia el living. Me permití quedarme ahí por unos segundos en donde lo único que hago es observar todo el lugar. Colores tenues pero al mismo tiempo crudos. Nosotros no fuimos quienes la decoraron, pero era demasiado nuestro estilo, incluso parecía que mamá fue quien escogió los colores, aunque mamá ya no estaba. Este era mi sitio, el primer lugar que compartimos todos las primeras dos noches en las que llegamos, cuándo papá aún no confiaba en los demás. Avanzamos mucho desde ese entonces, pero ahora lo único que estamos haciendo es retroceder.

     Al fin salí de aquella casa, no había muchas personas al rededor, y quienes estaban ni siquiera me notaban, y era algo que agradecía.

     Tal y como Negan dijo, estaba esperándome junto a toda su gente cerca de la entrada. Algo debía estar pasando, algo que seguramente no era muy bueno, porque había muchas personas reunidas a su alrededor que evitaban que pudiera ver con claridad que sucedía. Escuché perfectamente la voz del moreno que estaba siendo de oratoria con todos los presentes, pues informaba sobre 'un nuevo cambio por venir, un nuevo orden por acatar, un nuevo estilo de vida por aceptar' era evidente que quería hacer público mi aparante "cambio de bando" porque él quería que todos lo vieran así, yo debía hacer que todo el mundo se lo creyera.

     — Abranle pasó a mi nuevo tercero al mando.—  ordenó él moreno hacia los Alexandrinos que impedían mi paso. Claramente él ya me había visto, con una sonrisa feliz me señaló por cortos segundos. Los demás obedecieron, se quitaron de mi camino para que yo pudiera llegar hasta el jefe pero sus miradas juzgonas estaban encima mío. — allí esta. ¡Observen todos a la nueva integrante de los salvadores!.

     Su grupo grito y aplaudió en cuanto su líder terminó de anunciar mi aparente traición. Aún le daba la espalda a los Alexandrinos, lo cual agradecía porque no sabría como manejaría sus rostros llenos de sorpresa. Un hombre calvo y alto pidió mi mochila, por lo que se la entregue y la subió a aquella camioneta de color negro en la que Negan se transportaba.