Se levantó tambaleante en su lugar y giró apenas cayendo al suelo de nuevo.

-No puedo...- susurró recibiendo una patada en el estómago.

-Claro que no puedes, eres un inservible. ¡No sabes bailar!

-¡Hey! No en su rostro.- dijo uno de ellos tomando la mano del chico quién lo había golpeado anteriormente.

-¡¿Quieres ser el siguiente acaso!?- se levantó de un golpe encarando al chico quién elevó las manos algo temeroso.

-Claro que no, solo digo que...

-Que mejor te callas. ¡Park, baila de nuevo!¡Anda ya, gusano levántate y báilame tu solo!- Jimin respirando forzadamente se levantó con ayuda de uno de los chicos quién después lo empujó haciéndolo caer de nuevo, los cuatro chicos empezaron a reír mientras que lágrimas gruesas de impotencia caían por las mejillas rojas del menor.

-No puedo levantarme...- escupió a un lado sintiendo la sangre brotar de su labio inferior, a su lado notó su mochila y en uno de los bolsillo su celular dispuesto a ser tomado.

-¡Ah, no puedes!- el chico de antes, quién parecía el líder de aquel grupito de bribones se le acercó tomándolo del cuello de su camiseta.- Mira que bonito te ves de cerca, Park.

-Déjame en paz, Sehun.- gruñó apartando el rostro del beso en la frente que este le propinaba.

-Ah, que lindo. Piensas que tienes derecho a mandarme.- un golpe en su mejilla hizo que los labios de Jimin se sellarán ante el siguiente y el siguiente y el siguiente golpe en su rostro y estómago.

Al fin lo soltó de nuevo, al ver que este no podía soportar otro golpe antes de desmayarse, volteó a sus amigos quienes le informaban de algo que había oído fuera del salón, y mientras estos hablaban Jimin estiró su mano hacia su mochila, sacando con cautela su celular y presionando el número "uno" por un largo tiempo. La llamada automática entró en curso y simplemente lo dejó ahí escondido, esperando que la policía conteste, o a quién sea que tuviera como número de marcación rápida.

Respiró profundamente antes de levantarse de nuevo, ya de pie se apoyó en el espejo a su lado y sonrió a los cuatro chicos quienes notaron su presencia no moribunda.

-Dime de nuevo, Sehun... ¿Dónde estamos?- el nombrado lo miró entrecerrando los ojos.

-¿Que planeas, Park?- Jimin negó apoyándose en sus piernas con algo de dificultad.

-Ya estoy cansado, Sehun. ¿Por qué no simplemente me dejas ir?- miró hacia abajo con cuidado notando el tiempo que corría en la llamada, había llamado a alguien.

-Dejarte ir, dices.- una patada en su estómago lo hizo caer de golpe al suelo.- Quédate ahí imbécil, en el suelo donde perteneces.

-¡Este es mi salón de ensayo, tu no puedes entrar aquí!

-¿Quién te crees que eres, mocoso de mierda?- otro golpe en su estómago lo dejó sin aire por mucho tiempo, golpeó su puño contra el suelo mirando la pantalla del celular aún en la llamada, no sabía a quien estaba llamando pero esperaba que lo ayudarán ya porque de reojo pudo ver a los otros tres chicos acercarse.

Sintió su cuerpo ser levantado y su vista se nublo, estaba asustado y sus piernas ya no respondían, estaba sin fuerza y rogaba al cielo a alguien. Quien sea.


Penetrame, ¡ahora! [NamJin]Where stories live. Discover now