Capítulo 01 - LA ENTREVISTA DE TRABAJO

Comenzar desde el principio
                                    

–Entonces debo llamarle... ¿Carlos Abel?

–Eso es. Bueno, ya se lo he dicho antes, Polla Pesebre me lo puso mi padre verdadero, que era el tío del registro y que se llamaba José Francisco Campos Heredia... Ha estado usted escuchándome todo el tiempo ¿verdad?

–Desde luego, todo el tiempo.

– ¿Sí?

–Sí.

– ¿Seguro? ¿No será usted de esos que en lugar de 'sí, porque sí' me dicen 'sí' para que me calle?

–Mire señor Pesebre...

–Llámeme Talentus, si le parece.

–Mire... este... Talentus. Estuve comprobando el apartado de su currículo donde nos cuenta su experiencia laboral a lo largo de los diez últimos años...

–Sí.

–Y... bueno, en resumidas cuentas, lo poco bueno que dice sobre usted es que actualmente ejerce como vendedor en Ebay.

–Sí, desde mil novecientos noventa y nueve. Soy power seller y estoy muy orgulloso de poder decir que actualmente poseo el cien por cien de los votos positivos.

–Ya hombre, lo que usted quiera... pero eso no es un trabajo de verdad ¿No le parece?

– ¡¿Cómo que no?! ¡Soy vendedor, y además power seller, que no es moco de pavo! ¿Y qué me dice de usted? ¿Considera que estar ahí sentado toda la mañana haciéndoles preguntas estúpidas a los demás es un trabajo de verdad? ¡¿Eh?!

–Señor Pesebre, tiene usted treinta y tantos... y por lo que me da a entender no ha pegado palo al agua en su puñetera vida. Encima, después de citar su 'extensa' experiencia laboral que apenas se resume en dos líneas, ha empleado la cara posterior del currículo para confeccionar una lista con las cosas que le gustan y otra con las que no.

–Sí, y le aseguro que todo es completamente cierto.

–Luego dice que posee la colección completa de casetes originales de Tony el gitano...

–Que también es verdad. Además, estoy muy orgulloso de ello... y eso que ya no los escucho porque ahora los tengo todos en MP3, que me los descargó mi colega el Pina de los foros esos del internet.

–Mire, la verdad sea dicha, lamento tener que ser tan franco con usted, este... Talentus, pero actualmente no disponemos de ninguna vacante que se ajuste a su perfil en nuestra planta embotelladora.

– ¡Joder! ¿Y entonces qué? ¿Me han hecho venir aquí sólo para tocarme los cojones o cómo?

–Mire, ateniéndome a los resultados de su entrevista, he considerado la posibilidad de ayudarle a encontrar un buen terapeuta. Por si tiene algún problema, no sé si me explico...

–Ya, bueno... me parece que mejor me abro pa' mi keo. Hágame usted el favor, 'señor-profesor-gominas', y cámbiese la corbata esa que me lleva... que parece que sea de su abuelo el falangista y encima le huele el pelo a kebab.

– ¡No se vaya, Talentus! Espérese aquí un momento... hágame el favor.

– ¡¡Que me suelteees!! ¡¡Que no me toqueees, puteeee!! –Le grité al entrevistador cuando al levantarme éste me sostuvo por el brazo.

MARICONES DEL ESPACIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora