You and me (Percabeth)

Capítulo 19. Esperanzas y Pesadillas.

N/A: HOLIS!!! No puedo creer que hayamos llegado a las mil leídas en cosa de dos semanas. WOW!!! Nunca pensé que llegaríamos a las 1000 tan rápido :D Aquí va otro capítulo. Espero disfruten; semidioses.

Mariana *_* 

PD: GRACIAS por las 1000 leídas. :'D

*_* *_* *_*

P.O.V Percy.

Después de escuchar de lo que Annabeth y Piper estaban "mensajeando" en clase; mi día se volvió simplemente perfecto. Una nueva sensación de esperanza se albergó en mi interior. Tal vez Annabeth sentía lo mismo que yo. Talvez, a ella le guste. Pero esa esperanza estaba muy, muy adentro mío. Eso era casi imposible. Annie era la mejor amiga que haya tenido hasta ahora. Ella era muy buena y sentía que cuando estaba con ella podía ser quien yo quiera [Se que suena un poco cursi, pero estoy sentimental :')] Annabeth tenía los mismos gustos que yo. Tal vez a excepción de que ella amaba leer y lo máximo que yo leía (o trataba de, por mi dislexia) eran las ntros de mis videojuegos. Pero por todo lo demás, ella era simplemente perfecta. Había algo en sus ojos grises... que simplemente me encantaba. Amaba su forma de hacerme reír y contarme cosas de las que no entendía ni jota. Amaba su risa y su manera de llamarme "sesos de alga" Me gustaba que no me idolatrara, como lo hacía Rachel. [No me cae mal Rachel, pero necesitaba una mala para esta historia, además, traté de hacerla lo menos mala posible] Me trataba con indiferencia. A veces, hasta se podía decir que yo le caía mal. Me gustaba su forma de llamarme "mundano" aunque yo no tenía idea de a que se refería. Creo que resumiendo un poco lo que quiero decir, me gustaba absolutamente todo de ella.

Mañana era el baile de Halloween. Esperaba ver a Annabeth, quería ver de que oba disfrazada, tenpia unas ganas enormes de bailar con ella. Esto me recuerda a algo... ¡Oh, Dioses! Ni siquiera tengo un disfraz! ¿Ir disfrazado? No estoy seguro. Pero de todos modos era la temática del baile. Tenía que hacerlo. Pero... de qué? Ahora mismo; Jason estaba dando un examen. Y todos los demás también. Yo no porque exoneré esa materia. Se me daba muy fácil. La física siempre se me había dado. Era el único curso en el que mi promedio no era "insuficiente". Necesitaba urgentemente una idea... ¿Pero qué? Estaba tan deseperado que hasta pensé en agarrar una sábana, cortarle un par de agujeros y disfrazarme de fantasma. No sería TAN mala idea, ya había hecho eso una vez. Pero no, eso no podría ser posible esta vez. Quería impersionar a Annabeth. Me queddé pensando un buen rato, hasta que algo se me ocurrió. ¡Pirata! [Sé que no es muy original, pero no tenía ideas. Gracias, Dani, por eso] No creo que sea tan mala idea. Ahora solo necesitaba ir a comprar el disfraz. Tomé las llaves del cuarto y me dirigí al centro comercial.

                                                      ***

Llegué de nuevo a la habitación varias horas después, el lugar estaba abarrotado de gente muy loca, buscando disfraces de última hora, como yo. Cuando entré, Jason estaba tirado, leyendo una revista de deportes, y Sistem of a Down sonaba por lo bajo. Nunca entendí esa canción, es demasiado rara para mi gusto, pero parece que a Jason le gustaba.  

 - Hola - lo saludé - ¿Qué tal todo?

 - Hola - me respondió - Horrible.

 - ¿Y eso porqué? - pregunté, frunciendo el entrecejo.

 - Es Piper - dijo después de un momento de silencio - se enojó con migo.

 - ¿Por...? - lo animé a seguir.

 - Aggg - dijo - todo es un asco. Piper se enojó porque Drew me preguntó si quería ir al baile con ella. Y yo tardé mas de tres segundos en responder que no.

 - ¿Y por eso se enojó? - pregunté -.

 - ¡Sí! - me dijo, furibundo - ¡Pero que le pasa!

 - Eh... pues no lo sé. Es tu novia, amigo.

 - No entiendo de que se enoja - me dijo - Yo de todos modos le dije que no. Pero según ella me demoré cuatro segundos en responderle que no, eso significa que lo dudé. 

 - Bueno - dije - Hay que admitir que Drew anda pegada a ti como una lapa...

 - Oh, cállate, Percy - me dijo - Tu si que no ayudas.

 - Gracias - le dije - ¿Y?

 - Bueno, pues... - se cortó rapidámente. - Dime que pasó esta mañana. ¿Le gustas a Annabeth? - Cambió de tema mas rapido que una cobra. Buena táctica. Me sonrojé hasta las orejas.

 - Oh... pues yo... - dije -.

 - Y a ti te gusta ella, ¿Verdad? - me preguntó, con un tono pícaro en su voz - ¿Porqué no la invitas a salir? 

 - Porque... yo... pues... ella... yo... - las palabras se atoraban en mi boca, como rocas tratando de salir.

 - Está bien - me dijo, riendo - Te gusta. Dejémoslo ahí.

Asentí. Jason era uno de mis mejores amigos, pero había veces en las que él... me resultaba simplemente insoportable. Y ese era uno de esos momentos.

 - ¿Vamos a cenar? - me preguntó.

 - Vamos - respondí. Nos fuimos.

                                                           ***

Me desperté porque la luz del sol me daba de lleno en la cara. Parpadée varias veces y maldije en silencio. 5:40. Era ipresionante como amanecía tan temprano y toda la luz me daba a mí. Me levanté como pude, cerré las cortinas y me volví a tirar en la cama. Pero el sueño me fue dificil de conciliar. No tenía ganas de dormir ni nada. Me puse de pie, me vestí y me salí de la habitación. Eran las 6:10. Se supone que yo debería estar tirado en mi cama babeando. Pero esa cama ya no me gustaba. Ultimamente el mismo sueño se repetía una y otra y otra vez. Siempre lo mismo.

Estábamos corriendo por un valle, cerca de una granja de fresas; Jason, Piper, Leo, Frank, Hazel, Enebro, Melody, Grover, Nico, Thalia, Annabeth y yo. Todos estábamos sudorosos; y con la ropa hecha jirones. Todos corríamos, como si nuestra vida dependiera de ello. A lo lejos, escuchaba aleteos y bramidos, como si varias... cosas nos estuvieran persiguiendo. Jason tenía un feo corte en la frente, Hazel uno en la pierna, y yo podía ver una gran herida sangrante en mi brazo. No tenía idea de donde era eso. Yo ya no llevaba muletas. Luego; todos corríamos muy rápidamente y dando traspiés. Lovía; mucho. Pero en una parte del trayecto, dejaba de llover y todo se volvía negro. En esa parte siempre despertaba sentado, sudando y con el cabello pegado al cuello por el sudor. Hace días que el sueño se repetía una y otra vez. 

Eso era lo que me tenía preocupado. 

Entonces siento como alguien me toma por los hombros. Al instante me encuentro en una especie de armario. Y Luke está allí. Con una cara amenazante.