❝ 023 ; baby shower ♡ ❞

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La feliz pareja iba camino a un supermercado, ¿La razón? Bien, sus amigos les habían avisado que irían a su casa a pasar un buen rato; algo que no hacían desde hace mucho. Iban para comprar algunas chucherías y refrescos, y unas frutas; porque según Seo, eso era lo más saludable que Taeil podía comer en este mes.

Desde que el noveno mes dio comienzo, Young Ho se había vuelto muy sobre-protector con su novio; estaba al pendiente de él a cada momento. Incluso cuando él estaba en la empresa ensayando cada que tenía tiempo le llamaba para asegurar que se encontrarán bien; algo que le daba ternura a Moon, pero que también le desesperaba.

—No pensé que los chicos vendrían a visitarnos en su único día libre— comentó Taeil mirando por la ventana, desde ya hace dos semanas la empresa le había prestado un carro a la pareja; aunque ellos preferían comprar pronto su propio auto —Podrían hacer mejores cosas, como descansar… les hace mucha falta— dijo con cierta tristeza.

—Sí, pero si ellos tomaron la decisión de venir a la casa para vernos; hay que estar felices y agradecidos— contestó Seo también con cierta tristeza.

—Claro está— afirmó Taeil, obviamente no echaría a sus amigos de la casa y enviarlos a descansar.

[…]

Después de unos semáforos más, la pareja llegó a su destino. Ambos bajaron y caminaron al interior del gran supermercado agarrados de la mano.

Fueron directo por las cosas que querían, aunque aveces Taeil se iba por otro lado para ver ropa o trastes para la casa; cosas de padres y señores grandes aseguraba John. Durante el camino, algunas miradas curiosas se posaban en ellos o en el mayor; esas miradas ya no los hacían sentir mal, ahora les daba mucha alegría ver como todos veían a su bebé en camino.

—¡Encontré los refrescos!— gritó el pelinegro, estirando un poco su mano para que Young Ho le viera en el pasillo; éste sonrió con ternura y se fue acercando a él con lentitud.

Tomaron unos cuantos y partieron a la caja registradora, ya llevaban las demás cosas. Taeil tomó fila mientras John iba a checar algo que le llamo la atención.

Mientras esperaba por la llegada de su novio a tiempo para que pudiera pagar todo, el mayor cantaba muy bajito mientras que con el pie conseguía el ritmo.

—Disculpe— susurró una pequeña voz a un lado suyo, Taeil bajó la vista sorprendido por la interrupción —Puede dejarme pasar, p-por favor— pidió amable y avergonzada una pequeña niña.

—Ah, claro… perdóname— se disculpó Moon, haciéndose a un lado para dejar pasar a la pequeña de unos cuatro años.

—Uh, ¿Esa pancita es tuya?— preguntó con ojitos curiosos la niña, Taeil rió y asintió; era un poco obvio —Comiste mucho, ¿No es así?— dijo con tono burlón la pequeña, sonriendo ampliamente; dejando ver sus dientes de conejo.

—Sí, comí muchísimo— siguió la broma Taeil, no se había molestado ni nada de eso; al contrario, le provocó mucha ternura —Me comí a un bebé, por eso estoy así de gordito— en cuento dijo eso la pequeña conejito cambió su rostro tranquilo y burlón a uno asustado.

—¡Ay!— chilló asustada la pequeña, comenzando a alejarse del mayor.

—No, es mentira. No te creas, es una broma— le tranquilizó. La niña sonrió nerviosa y asintió —Es más, ¿Quieres tocar mi pancita y sentir a mi bebé?— cuestionó amable.

—¡Sí!— exclamó emocionada la pequeña, Taeil asintió y tomó la pequeña manita de la niña y colocó ésta sobre su abultado vientre —¡Oh!— exclamó nuevamente, abriendo más sus ojitos.

Crónicas de padres primerizos [#1] ψJohnilψWhere stories live. Discover now