Nadie como tú (Star vs las fuerzas del mal - AU)

49. La promesa

S: Han pasado 6 meses desde que Marco y yo hicimos aquella promesa de ir a ver los árboles rosados. Han pasado eventos plagados de dificultades, otros que me llenaron de mucha felicidad y otros tantos donde lloré noche tras noche. Aún recuerdo que hace poco tuvimos una fiesta que reunió a todos los aliados en el castillo de Eclipsa.

1 mes antes

Era una noche magnífica, el cielo estaba plagado de estrellas que brillaban más que nunca, la luna se asomaba para averiguar porque había tanto barullo en el castillo. ¿La razón? Hoy será la fiesta para conmemorar los primeros seis meses de la alianza por la paz en Mewni promovida por Eclipsa. Se habían invitado a muchas personas: miembros de la realeza, habitantes de los reinos, tanto mewmanos como monstruos, miembros de las caballerías de los reinos, entre muchos más. Sería una fiesta de grandes proporciones. Yo estaba en mi habitación alistándome para el evento, llevaba un vestido nuevo de color plateado y até mi cabello para formar una cola de caballo. Penélope y Ponyhead me estaban ayudando a terminar de arreglarme en mi habitación.

Penélope: No te muevas, Star o terminaré arruinando tu peinado.

Star: Lo siento, amiga. Es que estoy emocionada por lo que vendrá.

Ponyhead: Lo entendemos, pero tienes que calmarte. Solo... déjame retocar... esto... ¡Y listo! ¿Penélope?

Penélope: También terminé. Mírate al espejo ahora, Star.

Al mirarme, pude ver que me maquillaron poco para resaltar mis ojos, mi peinado lucía magnífico. Seguro dejaría a mi adorado caballero de Eclipsa y a todos boquiabiertos al verme, parecía una verdadera princesa. Y para finalizar, me coloqué el medallón de estrella que Marco me regaló.

Star: Wow. ¡Gracias, amigas!

Penélope: De nada, seguro a Marco le encantará verte así.

Ponyhead: Si, Star. Seguro lo dejaras babeando.

Star: Eso espero. Bueno, hora de divertirnos.

Penélope/Ponyhead: ¡Sí!

En la habitación de Marco

Tom: Tranquilo, Marco.

Marco: Lo siento, hermano. Es que habrá mucha más gente está vez a diferencia de mi nombramiento y no puedo evitar estar nervioso.

Tom: Deja de moverte o no podré terminar con la corbata, Díaz. Entiendo tu emoción, pero debes calmarte ya.

Marco: Está bien, está bien.

Tom: Listo.

Marco: Gracias, amigo.

M: Llevaba puesto un traje de color azul marino, camisa blanca y una corbata de color negro. Portaba el brazalete que Star me dió como regalo el día en que ella aceptó ser mi novia y mi medallón con Izta.

Marco: Bueno, ya es hora.

Tom: Recuerda relajarte, Marco. Disfruta la noche.

Marco: Eso haré, Tom.

Cuando fuimos al lugar de la fiesta, había muchas personas ya disfrutando de ella. Pude ver a los reyes Spiderbite, a Rich sobre una estatua, a la señora Moon y al señor River con atuendos muy elegantes. Tom y yo nos acercamos para saludar a todos los invitados posibles. Pero, en eso, me empezaba a sentir un poco impaciente, ya que deseaba ver a mi estrella, esa chica que salvó mi vida y que amo con todo mi corazón.

Marco: ¿Y Star? ¿No la has visto, Tom?

Tom: Veo que estás impaciente por verla, amigo. No debe tardar, ya sabes que a las damas les toma un poco más de tiempo estar listas, así que... ¡Ya cálmate!