38. El error

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S: El soldado que nos había atrapado dio la voz de alarma. Uno de sus hombres había caído por culpa de una flecha. De repente, empezaron a atacarnos de diferentes direcciones, era una emboscada, pero no era como aquella vez en el reino Johansen... esto era mucho peor. Aún seguíamos esposados, estábamos algo limitados; pero no era tiempo de vacilaciones, había que actuar o terminaríamos igual que aquel pobre hombre. Busqué a un soldado para pedir su ayuda.

Star: ¡Libérame, por favor! ¡Les ayudaré!

Soldado: ¿Tú? Si sólo eres una mocosa.

Star: Está mocosa sabe pelear mejor de lo que te imaginarás. Y te lo demostraré. ¡Quítame éstas cosas, rápido!

La seguridad de mis palabras y mi expresión de urgencia terminaron convenciendo al soldado.

Soldado: De acuerdo, pero debes tener cuidado. ¡Y no vayas a huir!

Star: De acuerdo. Y ayuda a mis amigos también.

El soldado me quitó las esposas. Y cuando lo hizo, pude ver que se estaban acercando no uno ni 10 sino unos 50 hombres bien armados y en dirección nuestra. Y como no portaban alguna armadura define que sólo podían ser los rebeldes.

Soldado: ¡Prepárense!

Star: Por favor, libera también a mis amigos, los ayudaremos.

El soldado se acercó a Marco y Hekapoo.

M: Ante la confusión suscitada por la emboscada, un soldado se acercó a mí y me quitó las esposas para después ir con Hekapoo y hacer lo mismo.

Soldado: Necesitaremos de su ayuda, su amiga dice que saben pelear muy bien.

Marco: (Gracias, Star). Les ayudaremos con gusto, sólo necesito una espada.

Soldado: Toma, usa esta, espero te sea útil.

Marco: Bien. Vamos Hekapoo, hay que detenerlos.

Hekapoo: Yo te sigo, cariño.

Star: (¡Que coraje! A mí me gustaría decirle eso a Marco) ¡Voy con ustedes!

Marco: ¡Al ataque!

Hekapoo sacó sus navajas, yo blandí mi espada y Star tenía listo su puño arcoiris para atacar. Los rebeldes estaban acercándose cada vez más y arremetieron con fuerza contra nosotros. No estábamos listos para una pelea de este tipo y menos dentro del reino al cual pretendíamos convencer de ser nuestro aliado.

S: La batalla era horrible, nos superaban en número pero no íbamos a rendirnos sin pelear. Hice varios de mis mejores hechizos y apenas pude repeler a algunos rebeldes y varias flechas que habían sido lanzadas. En eso empezaban a darse varías peleas cuerpo a cuerpo, incluida yo. Afortunadamente, todas esas veces que enfrenté a Ludo me habían preparado lo suficientemente bien para algo así. Me movía sin problemas y dejaba a algunos rebeldes fuera de combate.

H: Los agresores eran demasiados, por lo que decidí clonarme para poder nivelar las cosas. Hice tantos clones me fue posible y todos salieron a la batalla: unos lograban detener el avance de los rebeldes, otros caían al ser atacados por varios al mismo tiempo o defendiendo a los soldados que caían heridos. Esto estaba más allá de nuestras manos.

Hekapoo: !Marco, Star! ¡Debemos huir! ¡Vienen más rebeldes!

Star: ¡No, hay que detenerlos!

Marco -- Recuerdo

Eclipsa: Pase lo que pase, quiero que regresen a salvo.

Fin del recuerdo

Nadie como tú (Star vs las fuerzas del mal - AU)Where stories live. Discover now