Después de once años, vuelven a encontrarse. Emily Grey siendo una modelo y ángel para Victoria's Secrets y Justin Bieber siendo el cantante pop más reconocido mundialmente.
¿Será este el nuevo comienzo de una historia de amor entre los dos chicos q...
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—¡¿Viste eso?! —Emily exclamó frustrada, observó a Romee quién asentía totalmente apenada y arrepentía por haberle asegurado a Emily que le gustaba a Justin Bieber. — Está saliendo con ella, y ¿sabes qué es lo peor?... — Romee negó observando a Emily dudosa, se sentía pésima y ni habla de Emily, se sentía utilizada y sobre todo asqueada de sí misma por haber dejado que Justin la besara — Me dijo que no estaba saliendo con ella.
—Deberías de calmarte, Em — Romee suspiró y la observó por segunda vez.
—Sí, tienes razón — Emily asintió y dejó escapar un suspiro, le dio una última mirada a su amiga más cercana y caminó hasta la puerta de la habitación de invitados dónde se estaba quedando por ahora. — Mañana es la mudanza a mi nuevo apartamento, Romee. — avisó.
—¿Quieres que te ayude? — preguntó algo preocupada por su amiga, debía de hacer algo.
Emily asintió y le dedicó una pequeña sonrisa, abrió la puerta e ingresó al interior de la habitación. Dejó caer su ropa deportiva sobre el piso y caminó hasta el baño con tal de darse una ducha relajada, necesitaba olvidar aquella publicación y sobre todo, necesitaba olvidarlo a él. Media hora después, Grey salió del interior del baño completamente cambiada, se sentía un poco mejor pero no podía dejar de pensar en ese estúpido y patético beso en la mansión de él, dejó caer su cuerpo en la pequeña cama y cerró sus ojos dispuesta a dormirse, mañana sería un día largo y necesitaba tener demasiadas fuerzas, pero su teléfono en ese instante vibró y maldijo por lo bajo, lo tomó y observó «Nikolay» en el menú principal del teléfono.
«Nikolay: ¿Sigues aún despierta?»
Emily leyó el mensaje y suspiró, hablando de aquel hombre simpático, se arrepentía por haber arruinado su cita y sentía mal por haber elegido a Justin sobre él, cuándo muy bien todos sabemos la historia, suspiró y tecleo algo en su teléfono.
« Emily: Sí, aún estoy despierta.»
Dejó el teléfono en la mesita de noche, observó el techo y sintió unas ganas terribles de llamar a Justin y reclamarle, decirle todo lo que del interior de su garganta podría salir y sí es peor, decirle que se arrepentía de haberlo conocido en algún momento, pero Emily Grey Blossom, no era así, quería a ese chico a más no poder, lo conocía desde que la pubertad no le había pegado bien y se sentía fatal sí le decía una cosas de esas a Bieber cuándo ella muy bien sabía que no era cierto. El teléfono sonó y Emily salió de sus pensamientos, descolgó la llamada sin leer el nombre y se pegó mentalmente.
—Pensé que estarías cansada después de todo lo que has hecho hoy. —Nikolay murmuró y Emily sonrió un poco confundida.
—¿Como sabes todo lo que he hecho hoy? — murmuró.
—Existe Instagram, nena. — Nikolay murmuró y Emily frunció su ceño, «nena» era una palabra extremadamente profunda y no sé le decía a cualquiera, quiso decirle que no la llamara de esa manera pero sentía que le debía algo, así que lo dejo pasar.
