La verdadera identidad del infierno (2 parte de enamorada del Diablo)

Mi mundo cambio

Narra TN

Parecía que había sido ayer cuando todo aquello había ocurrido, pero no era así.

Ya habían pasado varios meses y mi vida se había visto en vuelta en un cambio constante.

Aunque al parecer no solo la mía. El mundo de caos y destrucción que había, ahora se había acabado, pero... ¿Por cuánto tiempo?

La mayoría de los demonios desconocían quien era, que había ocurrido y sobre todo desconocían mi procedencia.

Aquellos afortunados que habían llegado a saberlo residían en el castillo y por alguna razón que desconozco me aceptaron de buen agrado.

Aquel castillo era demasiado grande para mí y pese a estar junto a Suga y Jin, me faltaba la pieza fundamental... Namjoon.

Unos días después de que aquello ocurriera se marchó, me dijo que ahora que era la reina del infierno, no quería estar allí en el castillo sin hacer nada.

Por esa razón regresó a la tierra donde se encargaba de controlar a los demonios.

Quería decirle que no lo hiciera, que solo quería que permaneciera a mi lado, pero no pude hacerlo, era algo egoísta pedir aquello y a su vez pude ver cómo aquel lugar le asfixiaba, así que simplemente sonreí y le dejé marchar.

- TN.- gritó Suga antes de entrar a la sala.

- Te puedo escuchar aunque no grites.- expresé tras mirarle de mala gana.

- ¿Qué haces allí sentada sin hacer nada?- preguntó tras acercarse.

- Suga...- simplemente pronuncié su nombre.

- ¿Podrías dejar de estar todo el rato encerrada?- preguntó antes de agarrarme del brazo.

No podía contarle la verdad o tal vez no quería. Ese viaje era solo mío, quería respuestas e iría a por ellas.

Desde que vi aquellas imágenes, aquel chico con las alas cortadas... Quería saberlo, necesitaba saber quién era.

Tal vez él tuviera la respuesta a la preguta que tanto me hacía. ¿Cómo puedo volver a tener mis alas?

Aquel vacío, aquel sueño en dónde podía volar. Se había quedado en un simple sueño o más bien en una pesadilla que jamás podría volver a deshacer.

Por esa razón me limitaba a buscar sobre aquel hombre. Eso me hacía no extrañar a Namjoon y no pensar demasiado en lo que me había convertido.

- Suga, estoy bien. No hace falta que vengas todos los días.- le reproché tras provocar que se detuviera.

-  Yo no estoy haciendo eso.

- Bien. ¿Entonces cuál es tu plan?- Pregunté tras mirarlo detenidamente.

- No te lo dije en su momento, pero... Estoy haciendo algo maravilloso.

- ¿De qué hablas?- pregunté tras mirarle detenidamente.

- Solo confía en mí. De verdad, que no voy hacer nada.- expresó tras tenderme su mano.

Al instante agarré su mano. No podía decirlo o más bien no quería decirlo, pero estaba agradecida... Él siempre permaneció a mi lado y aunque posiblemente hubiera visto una parte de mí que ni siquiera Namjoon vio. Él decidió quedarse a mi lado, pese a todo. Él seguía estando allí para mí.

Salimos de la sala del trono y me llevó hasta afuera.

- Cierra tus ojos.- expresó tras ponerse detrás de mí y hacerlo casi a la fuerza.

- Como sea algo desagradable voy a matarte.

- ¿Y si es algo agradable?- preguntó.

Al instante sentí como pasaba sus dedos por mi cuello con delicadeza.

No pude evitar sentir algo ante aquella caricia, por un segundo me sentí avergonzada.

Gracias por leer 💜💜