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Narra Seungkwan.

"me preguntó de donde saco esa actitud..." comentó Mina al ver salir a Seungjae.

"no a mi, de eso estoy seguro." dije tomando de mi jugo de mandarina. "nuestro hijo es lo opuesto a lo nosotros fuimos a su edad."

"y eso es lo que me preocupa. Seungjae vive la vida sin preocuparse de los riesgos. viviendo al momento solo trae problemas." comentó mi esposa preocupada.

"es un buen muchacho. nosotros solo fuimos 'demasiado buenos' incluso eso nos llegó a afectar."

"lo sé. pero al menos quisiera que sentara cabeza. que se esfuerce en la escuela, que ayude a la iglesia, que busque a una niña decente y pronto forme una familia. así como dios lo dice."

"eso ya estará a decisión del niño, Mina."

"espero su decisión sea la correcta." comentó ella mientras se levantaba a llevar los platos sucios al lavabo. "además, ¿que con toda la conmoción de que conozcamos a su 'nuevo amigo'? yo digo que es una muchacha."

"¿cómo sabes que es una muchacha."

"por su actitud. nunca lo he visto así. por eso estoy casi segura que es una muchacha. obviamente tiene que ser..."

nervioso miraba de arriba a bajo el periódico que estaba leyendo. "supongo tienes razón. así tiene que ser."

Mina notó mi tensión y rápidamente cambió el tema mientras lavaba los platos. "Seungjae amo el regalo que le diste en su cumpleaños. 19 años ya. me acuerdo que te pedía una cámara desde los 8 años."

"y hubiera querido comprarle una cámara nueva y más moderna..." comenté un poco arrepentido del no poder obsequiarle a mi hijo una cámara mejor.

"Seungjae le encantó. eso es lo que más importa." comentó mi esposa alegre. pero esa sonrisa pronto se desvaneció en segundos. "¿Seungkwan? ¿le quitaste todas las fotos de la maleta cuando se la diste a Seungjae?" preguntó ella.

"si, deje creo dos o tres. solo algunas que tome de los paisajes y creo algunas de Seungjae cuando nació." tome un bocado de mi pan tostado con jalea.

"¿estás seguro? me refiero... ¿a 'todas' esas fotos?" dijo Mina mirándome de reojo y pude entender a que fotos se refería.

el solo hecho de su mención me puso tenso y me lleno de melancolía mientras un dolor en el pecho lentamente se formaba y punzaba mi piel.

"tú sabes bien que aquellas fotos no existen más..." dije indiferente enfocando mi mirada en el periódico. "a mi también se me hace tarde." me levante de mi lugar pero Mina se acercó a mi.

"ya más 19 años juntos. le agradezco a dios todos los días el hecho que Seungjae creció sano y feliz. aún cuando por mi culpa..." Mina triste miró hacia el piso. sujetando su barbilla hice que me miraba y le sonreí aunque un poco débil.

"no te sigas culpando. eso ya fue, quedó en el pasado. como dices tú Seungjae creció sano y feliz. y así seguirá."

Mina me sonrió y colocó sus brazos alrededor de mi cuello. acercándose de más me miró con ternura y amor. esa mirada de siempre, desde los 15. "no podría estar más feliz, Seungkwan. teniéndote a mi lado, con nuestro hijo. una familia, como tiene que ser." al tratar de besarme solo pude alejarme.

"si, lo sé. como... como debe ser. perdón, tengo que subir por algo. tratare de no llegar tarde." sujete sus brazos y los quite suavemente de mi cuello. "llegaré para cenar con ustedes."

sabía que la lastimaba y aunque no me pudieran creer, me dolía el hacerlo.

subí a nuestra habitación y busqué una libreta con notas y cálculos de ventas para el puesto de mandarinas. revisando números y demás mire hacia el ropero. una caja de madera con un candado casi ya oxidado.

"¿Seungkwan? le quitaste todas las fotos de la maleta?" escuche la voz de mina en mi cabeza.

y es verdad, quite todas esas fotos de la maleta. pero mentí al decir que aquellas fotos no existían más.

y juro por todo que me hubiera gustado haberle dicho la verdad.

summer days • verkwanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora