Mark Tomlinson, es un poderoso hombre de negocios, esposo de Jay, una de las mujeres más admiradas del país.
Un fallido secuestro pone en alerta a la familia, por lo que deciden contratar más seguridad para sus hijos. Uno de ellos será Harry Styles...
-Bueno, supuse que te gustaría que en privado te tratase así pero puedo volver al señ...
-No, no, déjalo...no necesito sentirme más viejo de lo que soy.
Al salir al patio principal, el ojiverde se paró y miró al muchacho.
-Entonces, ¿Coche o moto?
Louis resopló y a continuación subió en la parte trasera de su moto, por lo que el guardaespaldas arqueando las cejas con sorpresa, se subió también.
-Ponte el casco y agárrate fuerte, Louis.
Este obedeció sin poner objeción, entonces se abrazó a la ancha espalda de Harry, posando su cabeza sobre ella, mientras soltaba un profundo suspiro que hizo estremecer y sonreír al escolta.
El trayecto se le hizo muy corto pues estaba feliz de tener nuevamente cerca al rizado, aunque nunca lo admitiría.
Lukas y Steven estaban en su lugar habitual de encuentro, esperándolos impacientes por saber si lo habían pillado sus padres y si estarían en problemas.
Los chicos se quedaron asombrados al ver al ojiverde de nuevo con Louis, ya que hasta donde ellos sabían, el rubio ojiazul era el guardaespaldas de su amigo.
Louis estaba tan a gusto que incluso cuando Harry paró la moto para que se bajase, este permaneció agarrado a su cintura y con la cabeza recostada.
-¡Hey princesa despierta!-le chilló Lukas tocándole el hombro.
El castaño reaccionó y desconcertado se incorporó.
-Oh vaya... emm...ah si...voy
-Oye... ¿Tus padres descubrieron lo borracho que ibas?, ¿dónde está el rubio?-Le preguntó Steven en cuanto vieron alejarse al guardaespaldas ojiverde.
-No, no...no se enteraron de nada y bueno Harry habló con Mark y le dejó volver a ser mi escolta.
-Joder Louis, menuda suerte la tuya.... Estás hecho un cabronazo, a mi casi me pilla mi madre-Dijo molesto Steven.
-Ya te digo y la mía cuando llegó, lo inspeccionó todo mientras yo estaba en el baño-habló Lukas-.... Creo que se olió que hicimos algo... Menos mal que te llevaste las revistas y la botella de licor la tiré antes de que llegase, en el contenedor de basura de la esquina, debemos tener más cuidado chicos.
Los otros dos asintieron y siguieron el camino hasta el interior del instituto como cada día, mientras que Harry aparcó la moto e inspeccionó la zona.
La mañana transcurrió sin sobresaltos y cuando llegó nuevamente la hora de regresar, el ojiazul contempló con una gran sonrisa que el ojiverde lo esperaba subido en la moto, para regresar a casa.
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-Hasta luego chicos-se despidió con entusiasmo, alejándose de sus amigos-...nos vemos en el entrenamiento.
-¡¡¡Chao Louis!!!-gritaron al unisono los dos chicos al ver a su amigo correr con prisas.
-Hola hombreton, ya estoy aquí, ¿me extrañaste mucho?-preguntó Louis con coquetería.
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El guardaespaldas arqueó las cejas y lo miró confuso.
-¿Hombreton?, ¿Louis estás bien o te han golpeado en la cabeza ahí dentro?.
-Nop...no me pasa nada... Es solo que estoy contento de verte, eso es todo-dijo subiéndose a la moto y agarrándose con fuerza al rizado.
-Oye, emm...aún no he arrancado, así que puedes aflojar el agarre un poquito, necesito respirar-dijo Harry sonriendo de lado.
-Oh perdona-dijo el ojiazul rodando los ojos-...no pensaba que lo hacía tan fuerte.
-No... a ver está bien, me gusta pero en su justa medida.
Louis sonrió ante eso y a continuación suspiró volviendo a tumbar su cabeza en la espalda de Harry, tras oír el sonido del motor, cada vez le gustaba más esa sensación de protección, con Niall no había sido ni parecido.
Minutos después, estos llegaron a la propiedad Tomlinson pero justo antes de entrar a la casa, el rizado agarró del bazo a Louis y lo llevó tras un gran seto del jardín que estaba oculto a ojos curiosos, entonces lo cogió de la cintura y lo apretó contra su pecho haciendo que el chico soltarse un leve gemido.
-Me prometí a mí mismo que no lo haría pero no aguanto un jodido minuto más sin besarte -susurró el guardaespaldas próximo a la boca del ojiazul.
-Pu-Pues no te de-detengas- jadeó Louis casi sin aliento.
Acto seguido el escolta atrapó sus labios, comenzando a devorarlos con angustiosa sed, mientras que el ojiazul respondía con gusto al inesperado y excitante beso que se estaban dando.
Comenzó lento, sin embargo se intensificó, por lo que el más joven se puso de puntillas y se abrazó al fuerte cuello del guardaespaldas, ya que no quería separarse, ni que el beso acabase, entonces Harry le agarró el trasero y lo elevó hasta su cintura, sintiendo en el acto las piernas de su protegido rodeandole.
Cuando les faltó el aire, ambos rompieron el beso, entonces separaron sus bocas para mirarse fijamente, mientras respiraban muy agitados y con un evidente problemilla en los pantalones.
-Me muero por estar contigo-demandó el ojiverde.
-Y-Yo también lo deseo, Harry, ven vamos a mi habitación.
El guardaespaldas iba a responder a eso pero entonces escucharon llegar los coches del resto de la familia y con desilusión se miraron, mientas resoplaban frustrados pues parecía que tendrían que aplazarlo para otra ocasión más propicia.
