4. Guardaespaldas - L.S (Primera Parte)-Terminada

Uno.

La familia Tomlinson estaba por reunirse a la mesa, para disfrutar como cada mañana de un momento juntos, antes de acudir a sus obligaciones diarias.

...—Buenos días mi vida, ¿vendrás pronto hoy de la oficina verdad?, recuerda que es la función de las niñas en el colegio—habló Jay Tomlinson a su esposo.

—Claro cariño pero por si se me pasara...emm... llámame cuando salgas de la charla de tu último libro, por favor—dijo Mark mirándola muy sonriente.

—Está bien, la verdad es que ya tenía pensado hacerlo... Sé lo ocupado que estás sobre todo en estos días —volvió a añadir ella.

—¡Hola mamá!, ¡Hola papá!—saludaron enérgicamente las más pequeñas de la casa.

—¿Y vuestros hermanos mayores?... como siempre los últimos, ¿verdad?.

—Si mami, ya sabes que Louis es muy presumido al igual que Lottie... Llevan horas ante el espejo—Dijo Phoebe, una de las sonrientes gemelas.

—La verdad, no sé por qué lo hacen— añadió Daisy— ya se sabe que la guapas de la familia somos nosotras.

—Venga, venga...tomaros el desayuno que se hace tarde.

—Si mamá.

—Ok mamá.

Poco después, los restantes miembros de la familia bajaron también, aunque para no variar, entre peleas y empujones.

...—¡Tú eres el idiota!—gritó enfadada la adolescente mayor mientras hacía una mueca.

—¡No la idiota eres tú!—replicó Louis echándole la lengua.

—Venga chicos... a desayunar o llegareis tarde a clase, siempre estáis igual—dijo Jay resignada.

De repente, Zayn Malik el guardaespaldas de Mark entró al salón.

—Buenos días, permiso señor, el coche ya está listo...Podemos irnos cuando usted guste.

—Buenos días, excelente...dame unos minutos y enseguida salgo.

Poco después entró Davine, el otro guardaespaldas, el cual estaba encargado de la seguridad de Jay y de los niños hasta el momento.

—Señora Tomlinson el coche ya está listo, debemos irnos ya o llegarán tarde.

—Lo sé, lo sé....en un momento salimos.

Cuando los guardaespaldas se fueron, la mujer apuró a sus hijos de nuevo para que terminasen y cogieran sus mochilas, mientras ella y su marido se despedían con un beso.

—Te amo cariño, hasta más tarde.

—Y yo a ti, mi amor—dijo la mujer sonriendo.

—Os quiero chicos... Portaros bien—dijo Mark desde la puerta a sus hijos.

—¡Y nosotros a ti papi!—exclamaron a las vez las gemelas pequeñas.

Louis y Lottie tan solo asintieron con un leve movimiento de sus cabezas, mientras no sacaban la vista sus móviles.

Cuando ya estuvieron listos, todos subieron al coche y entonces el guardaespaldas emprendió la marcha, donde Jay se dedicó a hablar por teléfono con su editor, mientas que en los asientos traseros, sus hijos se chinchaban entre ellos como todos los días.

Unos minutos después, Josh detuvo el coche en el primer destino, el colegio de las más pequeñas para que estás se bajaran.

...— Adiós hijas, que tengáis un buen día...Ah...y niñas no os preocupéis, papá y yo estaremos en vuestra función.