Descubrimientos.

1.4K 135 11
                                    

-El rey.

A Robb se le heló la sangre.
Notó cómo se convertía en cristal, incapaz de moverse.
No podría haberlo oído bien. Imposible.
Pero el rostro de Alaster le hizo ver que en efecto lo había oído bien.
-Cómo que el Rey?- dijo Alaster, sacando un puñal y poniéndoselo en el cuello.
El Redcoat se derretía bajo sus espadas.
-No puedo decir más. He dicho demasiado.
- Demasiado poco. - dijo Alaster, repeleto de ira.
-¿Por qué seguir a Aylin? ¿ Por qué ella?
- Digamos que no es una dama cualquiera . - sonrió.
- ¿Cómo que no?
- Es un peligro.
-¡¿Qué?!-dijeron ambos hombres a la vez. El redcoat, sabiendo que acababa de firmar su sentencia de muerte, antes de que los hombres le dijeran algo más, cogió la mano del Escocés y la impulsó hacia su cuello.

Ninguno de los dos pudo reaccionar ante el suicidio del soldado.
La sangre ya le salía a borbotones y se mezclaba cruelmente con su uniforme .
Lo dejaron morir en el claro, y ambos hombres decidieron que no pararían hasta descubrirlo.
-Tengo amigos en la corte. Descubriré qué es lo que está pasando.- snetenció Robb.
- Sí, o habrá sangre.


****

Aylin

Mi tío seguía queriendo respuestas.
Yo seguía sin tenerlas.
Robb merodeaba por todas partes, casi rozando mi sombra , planeando a mi alrededor como un guardián.
Alaster estaba preocupado por algo que aún no sabía.
Decidí irme al exilio para decidir.
Me fui a las posesiones de mi padre, lo último que me quedaba de él.
Para decidirme, y para seguir indagando.

Alaster se mostró preocupado y a pesar de que le dije que no hiciera nada, sé que fue a mis tierras y sé que les dijo a los del clan vecino que yo era suya, que era escocesa , que me protegieran.

Yo no era de nadie, pero todos se empeñaban en protegerme.


3 persona

Su sorpresa fue inmensa al saber que ellos no dejarían que jamás nadie pusiera un dedo sobre mi.

Esto Marcó al joven Guerrero, algo que provocaría la evolución de su teoría respecto a Aylin.



Aylin.

Cuando llegué a mis tierras me acogieron como si jamás me hubiera ido.
Mis sirvientes me dijeron que alguien había dejado un paquete para mí hacía tiempo pero que por alguna razón, no se habían atrevido a mandármelo.

Lo abrí cuidadosamente por la noche.

Un fajo de cartas y escritos cayeron sobre el suelo. Me apresuré a recogerlas, entre ellas desucbrí la letra de  mi padre, acaricié la tinta como si acariciara su piel.

El resto de caligrafías me resultaban desconocidas. No miré la hora, simplemente me senté y comencé a leer.   Y descubrí lo que jamás debeería haber descubierto. 


Nota

Pido disculpas por el retraso, pero estoy en 2 de bach. Y apenas tengo tiempo.

Gracias por el apoyo.

Highlands ( #PGP2020)Where stories live. Discover now