- Ya veo... -dijo Iruka-. ¿Sus nombres?

- No los se.

Naruto salió corriendo como si su vida dependiese de ello. Se guió por primera vez por su olfato mejorado gracias a Kurama. Después de este corto tiempo con la peli-rosa había memorizado su olor. Podía rastrearla como Kiba o Akamaru. Encontró el kunai de la chica que le había hecho eso a Sakura. Estaba tirado en el suelo pero aún tenía varios olores en él.

- Kurama -le dijo.

- Hazles pagar por tocar a la mocosa.

Naruto volvió a rodearse del chakra del Kyuubi. Poco tardó en localizar a las tres agresoras.

- Esto no de va a quedar así 'ttebayo. Nadie toca a mi Sakura-chan, y menos para hacerle daño.

Corrió a por ellas. Las tomó a todas como si fuesen sacos de patatas y volvió al lago de la academia. Antes de llegar desactivó el chakra de Kurama. Su amiga le había pedido que lo hiciera, que lo mantuviese en secreto, él haría cualquier cosa que le pidiera. Tiró a las chicas agresoras al agua.

- Han sido... Ellas... -dijo Sakura como si sintiera temor-. Ellas me llamaron para hablar y-y me cortaron... Fue horrible... No puedo ver.

- ¡¿Por qué habéis hecho esto?! -les gritó enfadado Iruka-. ¡¿Sabéis acaso lo que habéis hecho?!

- Todo a sido porque... Ella...

- No se alejaba de... Sasuke-kun...

- Malditas estúpidas -dijo el nombrado-. ¿Y crees que dañando a Sakura conseguirás algo de mi atención? No me hagas reír. Alguien como tú... Odio a ese tipo de personas. Dañar a alguien porque querías que la persona que amas te haga caso. Pero a ti... A vosotras -corrigió-. Os odio. Nunca más os acerqueis a mí, a Sakura -les dijo con la cabeza alta.

Sasuke no se dignó a mirar hacia abajo a ver a sus compañeras de clase. Tenía el Sharingan activo y tener el sol de espaldas le daba una impresión impactante. Su Sharingan daba vueltas mientras les miraba con desdén.

Sakura aprovechó esta oportunidad para quedar bien.

- Sasuke-kun, estoy bien, no te preocupes.

- Pero tus ojos... -dijo él.

- Esta bien. Seguramente se curara.

- Pero no volverás a ver por tu ojo derecho -le dijo Naruto preocupado.

- Volveré a ver aunque sea solo con un ojo. No te preocupes... -dijo tomando de la mano a Naruto.

Iba a tomar de la mano también a Sasuke pero se dio cuenta de que la tenía manchada de sangre. Se disculpó por haberlo intentado. Sasuke le miró un poco molesto.

- Baka -se limitó a decir.

Sasuke tomó su mano aunque estuviera llena de sangre. Sakura intentó liberarse pero él no se lo permitió. Tiró de ella hacia atrás y acercó a la chica a su cuerpo. Al ser un poco más alto que ella se permitió a darle un ligero beso en la frente.

- Aunque estes sucia, mojada, ensangrentada... Nunca te preocupes por tocarme.

La pequeña peli-rosa esta totalmente sonrojada. Haku estaba totalmente enojado. Naruto estaba totalmente celoso. Sasuke estaba totalmente enamorado. Algo le llamaba la atención de Sakura y no dejaría que las personas que quiere se vayan de su vida tan fácilmente, no otra vez. Y todos se sentían totalmente fuera de lugar.

Las chicas estaban llorando e Iruka les estaba gritando por lo que habían hecho. Hiruzen, el Hokage, apreció allí sorprendiendo a los estudiantes y al profesor. Centro su mirada en Sakura y se llevó una gran sorpresa cuando vio su rostro sangrando.

- Sakura, ¿qué ha ocurrido? -preguntó-. Iruka... ¿Qué ha pasado? ¿No eres capaz de controlar a tus alumnos?

- Lo siento Hokage-sama -dijo haciendo una reverencia.

- Hokage-sama, no ha sido culpa de Iruka-sensei. Me fui cuando él no estaba atento. Ellas me llamaron para hablar.

- ¿Es cierto? -dijo enojado.

- Sí.

- Sakura-chan... No te he protegido -le dijo. Sus ojos estaban tristes. Se le notaba dolido-. Lo siento...

- Naruto-kun...

- Sakura-chan... Yo... Debí haberte protegido.

- Sakura, ve al hospital -dijo Hiruzen-. Naruto, acompañarle es tu misión.

- No -dijo serio cabizbajo-. ¡No pude protegerla! ¡¿Qué te hace pensar que podré protegerla ahora?!

- Naruto-kun -dijo tomando su mano con un poco más de fuerza y con su otra mano soltando a Sasuke-. No puedes protegerme del dolor. El dolor existe para ser sentido.

- Pero yo...

- Mocoso. No ha sido tu culpa -le dijo Kurama.

- Vamos al hospital -le dijo ella con una sonrisa.

Sakura se llevó a rastras a Naruto al hospital. Él se negaba a ir pero debía hacerlo. Estaba muy preocupado por el ojo de su amiga y no quería que nada más le pasara.

- En cuanto a vosotras... Tenéis prohibido realizar el examen Gennin. Es vuestro castigo por levantar un arma en contra de vuestra compañera y causarle severos daños -dijo Hiruzen-. No podréis hacerlo hasta que pase un año. En este mismo día del año que viene.

- Hokage-sama, siento lo ocurrido -se disculpó Iruka-. No volverá a pasar.

- Niños -les dijo a los alumnos-. Los ninjas en esta época son muy importantes. Los jóvenes debéis aprender juntos. No debéis levantar vuestro arma para herir a vuestros compañeros. Quiero que lo tengáis en cuenta y que esto no vuelva a pasar.

Hiruzen se fue. Naruto y Sakura se habían desviado y habían ido a un campo en las afueras. Sakura se había sentado en el suelo y Naruto aún permanecía de pie. Algo inseguro sobre si sentarse junto a la peli-rosa.

- Deberíamos ir al hospital Sakura-chan.

- No te preocupes. Me vas a curar tú. Aprenderás a utilizar el chakra de Kurama ahora mismo.

El Cerezo De AkatsukiМесто, где живут истории. Откройте их для себя