Capitulo 80

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 Llegue a casa después de caminar por muchas horas, si había algo que necesitaba era pensar.

— Que bueno que por fin llegas...—mi madre corrió a recibirme—dime que no peleaste con Donghae...—pidió ella preocupada—

— Quédate tranquila que no lo hice, solo hablamos...—le informe para que se quedara más tranquila—No puedo discutir con el...

— Eso ya lo sabía...—añadió ella riendo—

— ¿Por qué lo dices?

— A mí no me puedes engañar (TN) _____, él fue tu esposo, tu todavía lo amas...—sonrió con sospecha—

— Y si fuera así ¿Qué es lo que cambia?

—Hija...—hablo ella con muchas calma—que Donghae valla a tener un hijo con otra mujer, no significa que el la quiera a ella y a ti no...

— Mama...

— Si lo se...—hizo un gesto para que la dejara terminar de hablar—entiendo que lo que más duele es la traición, pero... él está arrepentido y yo sé que te ama... y no hay algo que una madre desee más que un buen hombre para su hija, alguien que la ame y la quiera proteger por sobre todas las cosas...—me quede pensativa sin saber que más decir, ella tenía parte de razón en lo que decía, pero me costaba tanto aceptar como eran las cosas ahora—Piensa en esto hija... a Donghae nunca le importo la diferencia de clase social que había entre ustedes dos, en cambio Sungmin...—hizo una mueca, como si el simple hecho de decir su nombre le desagradara. Si, ya le había contado a mi madre la historia de Sungmin, que fuimos novios y el motivo por el cual todo termino—

— Sungmin solo es mi pasado, nada más que eso...—admití acomodándome en el sofá—

— Júrame que descartas toda posibilidad de volver con él—pidió desesperada, corrió hasta sentarse junto a mí y tomar mi mano—

— Lo juro...—repetí preguntándome que había sido lo que la llevo a pensar de esa manera—

— Me quedo más tranquila...—esbozo una cálida sonrisa—y si quieres saber...—susurro como si fuera un secreto entre ambas—me agrada Donghae para ti...—sonreí dándole un abrazo, solo ella conseguía en momentos como estos sacarme una sonrisa—te quiero hija y quiero verte bien y feliz...

— También te quiero mama... me siento cansada, me iré a dormir...—me dirigí hasta mi dormitorio—

— ¿No vas a cenar?

— Gracias, pero no tengo apetito...—por suerte ella no insistió y dejo que me marchara—

Me acosté en mi cama despojándome de mi ropa poniéndome mi pijama, había algo que tenía que hacer, pero lo haría en la mañana cuando estuviera más calmada.

NARRA DONGHAE

— ¡Contesta! ¡Contesta! ¡Contesta! ¿Por qué diablos no contes...?

— Donghae...—su voz se oía adormecida—

— Mi amor...—una felicidad indescriptible atravesó mi pecho al escuchar su voz—

— Donghae, son la 1 de la mañana ¿Por qué llamas a estas horas?

— Yo... lo siento ¿te desperté?—desde luego que era una pregunta estúpida, sabía que ella se iba a dormir muy temprano, me encontraba solo en mi oficina, ya todos habían abandonado el edificio, quise quedarme para beber un poco de Whisky y sin poder evitarlo marque su número deseando tan solo oírla aunque sea por unos segundos decir mi nombre—

— Si lo hiciste... ¿estas bebiendo?—pregunto con sospecha, su voz ya se oía normal—

— No, para nada...

Amor en una mentiraWhere stories live. Discover now