Amor en una mentira

Capitulo 36

La cena llego a su fin, Donghae y yo salimos juntos en su auto directo a casa, él estaba algo serio, ausente, casi no hablaba mucho, parecía que lo de su madre en verdad había marcado mucho su adolescencia, sentí pena por el en ese momento, no era el momento más indicado para hacerle reclamos, aunque por dentro hervía de la rabia de saber que Eun Mi sabia de ese pasado tan triste que él había tenido y yo que era su esposa ni siquiera estaba al tanto. El jamás había intentado contarme algo a cerca de su madre, simplemente había evitado el tema, miles de preguntas invadían mi cabeza, pero comprendí que por ahora tendría que esperar.

— Ah sido una gran noche... gracias por estar presente...

— Quise desayunar contigo en la mañana pero ya te habías ido...

— Bueno si...—dijo a medida que se quitaba la ropa—tenía muchas cosas que hacer en la empresa...

— ¿Al menos lo pasaste bien?

— Si... muy bien...—se acercó a mi besándome, lo rodee con mis brazos intensificando el beso, pero el de manera repentina se separó y se metió al baño—

Algo no andaba bien, el no parecía el mismo Donghae que yo conocía ¿pero por qué él no hablaba conmigo? Se supone que yo soy su esposa y él sabía que yo estaba para el en todo momento, pero el solo guardaba silencio y no decía nada.

Salió del baño ya cambiado y se acostó en la cama. Yo seguí cada uno de sus movimientos esperando ver que más hacia.

— ¿No te vas a acostar?—me miro confundido al ver que aún continuaba de pie—

— Enseguida...—tome mi ropa y fui hasta el baño. Una vez que estuve cambiado me limite a salir y me acosté junto a el—

— Buenas noches (TN) ____—me dio un beso en la mejilla y me dio la espalda acostándose—

— Buenas noches...

¿Que? ¿Eso era todo? ¿Un simple buenas noches y ya? ¿Qué demonios le pasaba? estaba dispuesta a dejar de lado nuestras peleas y tener una gran noche con el debido a su cumpleaños y claro porque lo amaba y el solo me daba la espalda.

Casi no pude dormir pensando en lo que Eun Mi me había dicho, me desperté antes de la hora que siempre lo hacía. Donghae aun dormía, me senté en la cama y me puse mi bata de seda, baje a la sala y fui al jardín trasero, apenas estaba amaneciendo, camine hasta la piscina y me senté en el borde de la piscina mojando la punta de mi pies. Estuve allí un tiempo, tratando de pensar.

— Te levantaste temprano—escucha la voz de Donghae a mis espaldas, pero no voltee a mirarlo—

Él se acercó y se sentó a mi lado pasando su brazo por mis hombros y me dio un beso en mi mejilla.

— ¿Qué haces aquí a esta hora?

— Nada...—conteste mirando el reflejo del agua—

— ¿Quieres que desayunemos juntos?—no conteste, me quede callada aun mirando el agua—ya se ¿quieres que te convenza con mis besos?—me abrazo fuertemente y empezó a besar mi cuello—

— Donghae...

— Ummm... dime...

— ¿Porque nunca mencionaste lo que sucedió con tu madre cuando tenías 13 años?

— ¿Qué?—se alejó de mi unos centímetros mirándome, decidí mirarlo también—

— ¿Lo que oíste?... no hagas que vuelva a repetirlo...

— ¿Cómo lo supiste?—me miraba asombrado sin entender como yo estaba al tanto de aquel asunto—

— Que importa simplemente lo sé y ya... ¿algún día ibas a contarme?