Antes de ti《 Libro 3.5 》

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—Queridos amigos, hermanos y familia, estamos hoy reunidos para conmemorar los veinte años de nuestra querida y hermosa Emma. Es por ello que haremos un brindis en su honor.

Suelto a reír en cuanto Mike ha dejado de hablar, la verdad es que su discurso ha sonado como el inicio de un enlace matrimonial. Todos los que me rodean alzan sus copas siguiendo el ejemplo de Mike y me observan.

—¡Por Emma! —Exclaman todos.

Veinte años, dios mío, he cumplido veinte años el día de hoy. Si cierro los ojos casi puedo sentir cuando celebré mi cumpleaños número dieciséis hace cuatro años atrás.

Toda mi familia y amigos se turnan para abrazarme fuertemente y desearme los mejores deseos. Cantamos el feliz cumpleaños y apago las velas del pastel gigante de mamá me ha hecho. Liam es quien me ayuda a apagarlas, mi pequeño de tres años está fascinado con la combinación de colores y destellos. A mi lado Jared toma mi mano y me sonríe cuando le miro.

He cumplido veinte años de edad y me siento malditamente genial.

Mi casa se ha llenado de gente, la verdad es que si mi familia de por sí es numerosa, agregándole a los chicos más mis amigos de la universidad y la familia de Jared mi hogar se ha reducido considerablemente y cabe destacar que este no es un lugar pequeño.

Luke, Caroline, Mike, Hannah y Kyle están aquí. Me ha hecho inmensamente feliz que todos se hayan tomado un tiempo para venir a acompañarme en este día. Hace mucho que no veía a Hannah, Luke y Kyle, así que es por ello que no me he despegado de ellos en todo el día.

Mi pequeño ha acaparado mucho la atención, más de la acostumbrada. La verdad es que todos aman a Liam, a sus tres años de edad es inmensamente inteligente y suspicaz. Su maestra de jardín de niños me dice que está muchísimo más adelantado que sus compañeros, pero me recalcan día a día lo humanitario, solidario y risueño que es mi pequeño. Se me hincha el pecho de orgullo cada que lo escucho.

Por otro lado ya llevo dos años de carrera universitaria. Ha sido difícil, muy difícil pero me las he arreglado, con el apoyo de mis padres y de Jared he podido continuar los estudios sin intermediarios. Aquello me hace muy feliz.

En un punto de la tarde, cuando ya está oscureciendo y todos nos estamos preparando para la barbacoa que papá y mis tíos prepararán, me dedico unos minutos a simplemente observar a todos. Y me doy cuenta, de lo malditamente afortunada que soy de tener una familia, unos amigos y un novio que me amen y apoyen sin importar qué.

Así que después de todo, cumplir veinte años, con un hijo, cursando una carrera universitaria y manteniendo mi relación y amor con mi novio de la secundaria, no ha sido malo, ha sido malditamente excelente.

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—¡Bubu pregúntale a mamá si ya está lista!

Escucho a Jared gritarle a mi pequeño desde el primer piso. Me río mientras continuo aplicando máscara de pestañas y sombra en mis ojos. Escucho a mi bebé responderle y minutos después escucho sus pequeños y suaves toques en la puerta de mi habitación.