Antes de ti《 Libro 3.5 》

26

Jared no reacciona

Jared no dice nada

Jared solo parpadea

Jared está completamente pálido

Realmente está asustándome. Él no dice absolutamente nada, no reacciona. Simplemente está viendo alternamente entre los test de embarazos en mis manos y mi rostro lloroso.

Noto su respiración acelerarse de un momento a otro, por lo que comienzo a asustarme ¿No le estará por dar un ataque verdad? ¿Alguien ha muerto por una noticia así? Dios, jamás lo he buscado en google, ni he leído algo parecido.

—Jared...—murmuro casi con pánico—Dime algo, por favor.

—¿T-tú... ¿Cuánto tienes?

—No lo sé, me hice los test está mañana. —Mis ojos vuelven a llenarse de lágrimas rápidamente—No sé cómo ha pasado esto Jared, siempre nos hemos cuidado.

—¡No, no, no, amor! —Chilla tomándome de los brazos y acercándome a él, finalmente saliendo de su estado de trance—No llores por favor.

—No puedo evitarlo. ¿Sabes lo que esto significa verdad? Es un bebé Jared, una persona, una vida. ¿Cómo si quiera haremos para que funcione?

—Sé que estás pensando Emma. Sé perfectamente que tu cabeza está tomando muy en cuenta nuestra edad y en el momento en el que nos encontramos. Y te entiendo, no tengo una idea de cómo lo haremos, pero podremos hacerlo. ¿Tú no?

—Somos unos niños Jared, niños que tenían sexo y que ahora han creado una vida. ¡Claro que estoy tomando en cuenta la edad! —Me separo bruscamente de él, alejándome. Comienzo a caminar por el cuarto sin dejar de llorar, sintiendo poco a poco como la frustración y ansiedad se apodera de mi cuerpo y de mi cabeza—Tenemos demasiadas cosas en contra. Muchísimas.

—Lo sé, ¡Por supuesto que lo sé! Pero ahora mismo no puedo pensar en nada. Estoy en shock, lo siento Emma.

—¿Cómo crees que estoy yo Jared? ¿Contenta? Claro que no. Hemos arruinado todo, absolutamente todo. Ni siquiera sabemos si estaremos juntos de aquí a unos meses más ¡Y ahora tendremos un bebé!

—¡Cálmate Emma! —En solo unos cuantos pasos Jared está frente de mí. No soy capaz de formular palabra alguna porque sus labios toman posesión de los míos rápidamente.

Jared me besa decididamente, con determinación y muchísimo amor. Lágrimas vuelven a caer, simplemente no soy capaz de detenerlas, ni siquiera de limpiarlas. En cuanto sus brazos me rodean mi cuerpo entero cae en un estado de liberación y se suelta dejando un tipo de masa flácida y desdichada. Jared no me suelta cuando nos separamos, cuando el beso se acaba y debemos volver a respirar. Solamente me mantiene entre sus brazos y me acuna en su pecho dejándome liberar de todo tipo de emociones.

—Haremos lo que tú quieras, lo que tú decidas. —Susurra en mi oído, despacio, casi con miedo. —Pero sea lo que sea voy a quedarme a tu lado.

—No sé qué hacer. Ahora mismo no tengo nada claro.

—Puedes pensarlo el tiempo que quieras mi amor, no tenemos que decidir nada ahora mismo.

—¿Quieres que aborte? —Pregunto de forma directa. Aunque ninguno de los dos lo haya dicho, la pregunta está flotando en el aire, es casi perceptible.

—¿Tú quieres hacerlo?

—Te lo estoy preguntando a ti—Salgo de su pecho y le miro directo a los ojos. Como siempre él ya está mirándome.