Capitulo 44

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Jace

En cuanto vi entrar a Alec, supe lo que había sucedido, pero no quise abordarlo con mis preguntas. Sabía que me lo contaría cuando él se sintiese más cómodo, además, en este momento necesitaba distraerse un poco.

Me acerque hasta él.

- ¡Hermano! Estaba a punto de ir por ti...-lo guíe hasta la mesa, dónde se encontraban Clary y su hermano, y nuestras nuevas amigas: Helen y Aline-. Bueno, no era el único que estaba por hacerlo...-hice una leve seña a Sebastian.

Que paso gran parte de la noche, preguntando si Alec vendría; era el único que parecía ser de su agrado.

Después de hacer las rápidas presentaciones, seguí a mi mejor amigo a una pequeña terraza. Aunque había algunas personas ahí, existía un poco más de privacidad que dentro.

Se recargo en el barandal, yo me acomode a su lado. Algo que me gustaba de aquel lugar, era el tener una buena vista de la ciudad, y también era el lugar perfecto para estar con alguna chica... debería traer a Clary...

- ¿Sabes? Siempre...-hizo una pequeña pausa-. Siempre, trate de ser un hijo perfecto, buenas notas en el colegio, buenas referencias de mis profesores, nada de adicciones, nada de chismes, nada de nada. Trate de mantenerme al margen, y hacer sentir orgullosos a mis padres, y todo parecía bien... para ellos. –Respiro hondo-. Y aunque en varias ocasiones, quise hacer tantas cosas como las que hacían ustedes dos... nunca me animaba, primero estaba el deber que tenía con mis padres. Era una manera de compensar... -agacho la cabeza-... compensarlos... pero, sobre todo, compensarlo a él...

No dije nada, simplemente me quedé ahí, mirándolo. Sabía exactamente a qué se refería. Después de la muerte de Max, él había cambiado, parecía que estaba obligándose a ser un adulto, como una especie de castigo, que después lo llevaría a alguna redención. Y como a él, eso también me dolía, me lastimaba demasiado verlo de aquella manera, y aunque tratamos de hacerle sentir menos carga, y saber que no era culpable... las cosas no parecían mejorar.

Además, yo también tenía una porción de culpa en aquello... era a mí, por quién iba.

Tomo una gran bocanada de aire-: Hoy se lo conté a mis padres, jamás me había puesto a pensar en este día. Hasta que... hasta que lo conocí, quizá debería decir que me arme de todo el valor para decírselo a mis padres. Pero no es del todo cierto, pues cuando estaba a punto de hacerlo, sentí tanto miedo que pensé en salir lo más rápido de aquel lugar y olvidar la idea; pero finalmente lo hice. No fue, del todo como esperaba, pero lo he hecho y me siento un tanto mejor, ¿sabes a que me refiero? –me miro-, mi madre de enojo muchísimo, y mi padre... ni siquiera se definir lo que paso con él.

-También le tomara su tiempo.

Asintió levemente con la cabeza, para observar de nuevo la ciudad.

-Aunque también hay algo que me da vueltas la cabeza, ¿qué habría dicho Max?

-Habría dicho algo como... "¡Ay, no! Sera como tener otra hermana..." –me miro enarcando una ceja, pero luego su semblante se suavizo un poco.

-Creo... que sí. Supongo que si lo habría hecho. –Respiro hondo-. Solo espero, no decepcionarlo. –Se separó del barandal.

-Él también desearía tu felicidad...-di una ligera palmada en su espalda.

Sonrió ligeramente-: Gracias.

Sebastian

Estuve esperando a que Alec llegara, no era que me la estuviera pasando fatal, pero, no me llevaba muy bien con las personas presentes. Además, había varias chicas que no me quitaban la vista de encima, y de cuando en cuando murmuraban para saber si acercarse a mi o no, pero al final desistían al comprobar mi poco interés por ellas.

Últimamente me sentía bastante irritado. Si bien no había mostrado alguna reacción ante Camille, me aterraba la idea de que pudiese hacerle algo a Clarissa o Alec. Sabía que esa mujer era capaz de cualquier cosa, le gustaba actuar por debajo del agua, eso lo sabía perfectamente, y yo me limitaba a permanecer alerta. Siempre alerta.

Después de estar un rato en la terraza, volvieron; Alec parecía un poco menos agobiado. En cuanto llegaron a nuestra mesa, él de los ojos azules se colocó a mí lado.

-Pensé que preferirías quedarte en casa...-me sonrió de lado.

Le devolví la sonrisa-: Estaba a punto de hacerlo, pero... Clary casi me arrastro a venir aquí, además así podría pasar tiempo contigo sin que tu novio lo malinterpretara. –Me encogí ligeramente de hombros.

Miro un segundo a Magnus, que se encontraba justo frente a nosotros, hablando con Aline sobre algo de teñirse el cabello.

-No se molestaría, solo que después tendría que ir a su apartamento-su sonrisa se amplió un poco más.

-Supongo que sí-concorde-. Supongo que, si fueras mi novio, yo también sentiría celos de aquellas personas que se acercaran a ti-me miro atento-, es que, vamos Alec, eres un tipo atractivo y sexy.

Y eso era verdad. Alec era un chico sumamente atractivo y sexy, la combinación de sus ojos azules y pelo negro, le daban un toque... mortal. Además de tener un muy buen cuerpo, quizá no hacía mucho ejercicio o se preocupaba por tener abdominales marcados, pero su cuerpo era algo para envidiar. También estaba su carácter, un tanto serio, siempre precavido, atento y hasta modesto, esto también lo hacía un tipo muy interesante.

A pesar de admirar todas estas cosas en Alec, yo no sentía más que una gran amistad por él. No me gustaban los chicos, de eso estaba completamente seguro. 

Durante algún tiempo, salí tanto con chicos y chicas, pero realmente ninguno me hacía sentir bien, ninguna persona me hacía sentir lo que se suponía que debía de sentir al estar en una relación, ni siquiera llegaba a sentir algo de afecto por ellos. He de aclarar que intente darle muchas oportunidades a la búsqueda de una pareja, pero eso jamás llegaba. Por lo que al final termine desechando la idea.

Aunque algo me quedo claro, me gustaban las chicas...

-Es cierto Alec-hablo Jace, colocándose a nuestro lado-. En esta ocasión creo que estoy de acuerdo con él. –Me señalo con la cabeza-. Es decir, un chico como yo no podría tener como mejor amigo al chico feo...

Alec rio un poco.

-Supongo que debo de sentirme halagado.

-Pero eso no es del todo cierto-aunque Magnus se encontraba al otro lado de la mesa, estaba atento a lo que sucedía frente suyo-. Puedo apostar a que Alexander es más atractivo que tu...-alzó su copa mientras guiñaba a su novio, quien rápidamente había adquirido un tono rojizo en sus mejillas.

-Creo que tiene razón...-concordaron Aline y Helen al unísono.

-Mmmm...-Clary tenía una pequeña sonrisa en los labios, ya sabía a dónde iba todo esto.

- ¿Clary? No, tu no porfavor...-el rubio la miro suplicante.

-Es que... veras Jace... creo que esta ocasión he de concordar con los demás.

- ¿Qué sucede aquí? –La hermana de Alec apareció, arrastrando a Simón quien parecía bastante exhausto.

-Nada-mi hermanita se encogió de hombros-, es solo que concorde con los demás al decir que tu hermano es más atractivo que Jace.

-Oh, con que eso fue. Pero Jace, si eso no es nada de lo cual quejarte... a pesar de que seas feo Clary acepto ser tu novia.

Todos soltamos una carcajada.

Y aunque no me lo estaba proponiendo, estaba pasando una velada genial.





¡HOLA!

Espero que estén pasándola genial,
o que su día mejore.

Como ya había mencionado con
anterioridad, estoy de vuelta
y tengo un poco más de tiempo.

Por lo que continuaré con las historias.

Gracias por la espera.

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