Capitulo 8

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Foto: Raphael

Magnus

Después de acompañar a Alexander a casa, tuve que venir corriendo hasta mi apartamento. Todo estaba listo, Izzy me había mandado un mensaje, pero debía alistarme. Y además ¡había sudado! El sudar debería ser un delito, es asqueroso y estropea muchas cosas.

Pare antes de entrar a mi apartamento. Había un gato, pequeño de color gris, se lamia las patitas.

-Hola pequeño...-me agache hasta su altura y lo cargue, inmediatamente comenzó a ronronear- eres tan lindo, te llamare... Presidente Meow. –Me miro con sus hermosos ojos, que tenían un ligero tono verdoso, parecía decir que si-. Muy bien presidente, vayamos dentro. ¿Tienes hambre? -entramos al apartamento.

Lo deje en el piso, miro a su alrededor, se estiro y camino por todos lados, como si fuera ya su casa. Le deje un poco de leche, mientras yo me iba a tomar una ducha, de nuevo una ducha exprés.


Los primeros en llegar fueron Izzy y Simón. Buque detrás de ellos a Alexander...

-Descuida, vendrá en un momento-Izzy me guiño un ojo-. Él es Simón.

Mire al chico de anteojos.

-Hola-sonrió, él me devolvió la sonrisa.

-Owww. Qué bonito...-Simón tomo a presidente entre los brazos, el gato protesto un poco- no te haré daño pequeño-le acaricio las orejas, y después presidente dejo de protestar.

- ¿Es tuyo? -Izzy enarco una ceja- no estaba cuando arregle el apartamento.

-Lo acabo de encontrar. Se llama Presidente Meow, ¿verdad que es lindo?

-Mi madre tiene uno en casa, dice que es de un amigo suyo. Se llama Iglesia, pero es un gato huraño, jamás deja que lo toque, solo me busca cuando tiene hambre.

-Quizá no te has ganado su confianza-me encogí de hombros.

Escuché un leve gruñido de presidente, y vi como salía corriendo de los brazos de Simón.

-Y presidente tampoco acepta a cualquiera.

- ¡Oye! -reí.

-He... ¿hola? –Alexander se asomó por la puerta.

- ¡Alexander! Hola-fui hasta él. Se veía tan jodidamente sexy. Llevaba unos pantalones de mezclilla rasgados en las rodillas, y una camiseta negra, un poco ajustada-. Te ves...

-Le dije a Izzy que no me gustaba esto...-miro a Izzy frunciendo el ceño.

-Pero te ves, muy bien.

- ¿En s-serio? -se miró de nuevo.

- ¿Lo ves? Te dije que le gustarías. -Dijo Izzy. Las mejillas de Alexander cobraron un leve rubor.

Jace

Aunque Clary vivía en el mismo edificio de la fiesta, yo quería llegar con ella.

- ¡Clary! Jace está aquí-la madre de Clary, le grito desde la salá-. Ahora viene, toma asiento-me sonrió para volver a la cocina.

- ¡Jace! –Sebastian salió de una de las habitaciones- pero que gusto, pensé que me dejarías plantado.

-Vine por Clary. Además, no eres mi tipo-sonreí.

- ¿A no? –se sentó junto a mí- y yo que pensaba invitarte a una cita. -Lo mire haciendo una mueca, él rio-. No pongas esa cara. Puede ser la mejor cita de tu vida.

-Estoy lista-Clary apareció por el pequeño pasillo, la mire entreabriendo un poco la boca, se veía fantástica.

-Te ves hermosa.

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