Solo Primos ©

18. Solo Primos

PATCH

—Ve a llevarla a casa —me dice Lea por décima vez después de haberme negado todo este tiempo —. Ella te necesita, Patch. Yo me puedo ir con Sophia entre un rato.

—No quiero dejarte sola —replico.

En parte es cierto, ya que no me siento muy seguro dejándola sola aquí con tantos muchachos estando detrás de ella. Pero por otra parte no quiero estar solo con mi prima en el auto y no poder hablar con ella de otro tema que no sea su escandalosa ruptura con uno de mis mejores amigos del cual no sé nada. Calum ha estado tratando de comunicarse con él al igual que Hache, pero no hay ningún rastro de él.

—Te estoy pidiendo que lo hagas por mí —me suplica con una sonrisa, a lo que suelto un bufido. Toma mis manos entrelazándolas con las suyas —. Por favor, es tu prima hermana de toda la vida y te necesita en estos momentos. No tiene a nadie más que tú ahora.

—Pero Lea...

—Sé que ha habido algo más entre ustedes dos en algún momento —me dice de golpe, pillándome completamente por sorpresa. Siento mis mejillas teñirse de un color rojo carmesí escuchándole soltar una pequeña carcajada —. Y es por eso que te digo que sé que eres la única persona en la cual puede confiar en estos momentos. Sé que te sientes muy decepcionado por ella en estos momentos, pero no hagas algo de lo que te puedas arrepentir después.

Suelto un último bufido para después asentir sin decir nada más. Asiento dándole a entender que voy a hacer lo que me pide, a lo que mi novia me rodea con sus brazos depositando un beso en mi mejilla diciéndome que estoy haciendo lo correcto en estos momentos con mi prima hermana.

Me giro después de despedirme de ella caminando entre el jardín para encontrar a mi prima sentada en una de las veredas llorando, abrazados a sí misma mientras solloza. Algo en mí se rompe al verla de aquella manera, ya que solamente llora de esta manera cuando de verdad está sufriendo.

Yo sé que ambos se aman, y que cuando hay amor entre dos personas todo es posible. Uno puede perdonar de todo cuando amor como el de ellos es dueño de dos personas las cuales han pasado demasiado. Pero lo que ella ha dicho sobre su enamorado es algo demasiado complicado. Judah no es multimillonario como ella, no trabaja en una gran empresa reconocida mundialmente, pero la ama como nadie en el mundo lo va a hacer.

Me acerco a ella por detrás sin hacer el más mínimo ruido y me agacho para rodearle con mis brazos. Da un pequeño respingo, pero al darse cuenta que soy yo sube la mirada con su labio inferior temblando.

—Hey —le susurro, sentándome a su lado —, Lea ha insistido mucho en que venga a hablar contigo para mostrarte a tu apoyo. Te lo digo porque si no estaría mintiendo en decir que he venido por mérito propio.

—Sí, eso creo —dice alzándose de hombros —. La verdad es que en estos momentos solo quiero estar sola, Patch. Ya he tenido suficiente por una sola noche. Si vienes a hacerme sentir mal por todo lo que ha sucedido puedes decirlo rápidamente y luego retirarte.

—Oye, no te desquites conmigo que yo aquí soy una víctima más de tus errores —replico mirándole con reproche, a lo que asiente cubriendo su rostro con ambas manos soltando un pequeño sollozo —. Lea me ha hecho ver que soy la única persona la cual te puede ofrecer apoyo en estos momentos. Y creo que tiene razón.

—Merezco todo esto que me está sucediendo, quiero decir, yo misma lo vi venir pero simplemente quise no pensar en ello. Vi las intenciones de Axel desde el primer momento en que se acercó a mí pero pensé que podría controlarlo —dice, a lo que asiento mirando a la calle —. Jamás pensé que él le fuese a decir aquello a Judah, porque jamás lo hubiese permitido.

—No te estoy entendiendo para nada Kai, tú misma le dijiste que era un muerto de hambre en su cara —replico mirándole a los ojos.

—Lo dije en un momento de rabia, solo no podía parar de pensar en lo diferente que somos cómo persona —dice jugando con sus dedos —. Ambos somos tan diferentes en nuestras formas de actuar o pensar, pero de alguna manera él es mi felicidad y yo soy la suya, Patch.

—¿Sabes? Hace días conversé con Judah —admito, a lo que ella me mira incrédula —. Me dijo que te había comprado un collar con su inicial de la misma forma en que él tiene uno con la tuya.

—No tenía ni idea que tenía un collar con mi inicial —comenta incrédula. Sus ojos se vuelven a llenar de lágrimas —. Dios, debo de ser la peor novia que existe en este planeta.

—No eres la peor novia, todos cometemos errores, es parte de ser un ser humano —replico guiñándole un ojo —. Claro que hay errores mucho más grandes que unos los cuales tienen que ser resueltos con mucho esfuerzo. Vele el lado positivo, aprenderás muchas cosas gracias a esta lección que la vida te está dando.

—¿Crees que alguna vez me vaya a perdonar? —me pregunta con su voz hecha un hilo.

—Tu madre le perdonó cosas peores a tu padre. Claro que a él le va a costar tiempo asimilarlo, pero estoy más que seguro que lo hará —le tranquilizo rodeándola con un brazo —. ¿Sabes por qué? Porque él te ama y te adora. El amor que él siente por ti es demasiado fuerte como para morir con solo unas palabras. Solo dale tiempo al tiempo, Kai. Tienes que aprender a ser paciente.

—Te odio cuando tienes demasiada razón —me dice, haciéndonos reír a ambos. Se acerca más a mí y deposita un beso en mi mejilla con una sonrisa, apoyando su cabeza en mi hombro —. No sé qué haría sin ti, Patch.

—De seguro morirías —comento divertido, haciéndole soltar una pequeña carcajada —. Yo también te quiero rubia.

—Prométeme que siempre vas a estar conmigo —pide, a lo que le miro con una sonrisa —. Que no importa lo que suceda a nuestro alrededor, siempre vamos a estar unidos.

—Siempre —le prometo, besando su frente —. Somos primos, ¿no?

—Solo primos —afirma. 

FIN