CAPÍTULO XXI

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POV ANASTASIA

Desde que me levante a vomitar en la madrugada me he sentido muy mal, los vómitos son cada vez más constantes y los mareos igual, no sé lo que me pasa, pero en realidad ya estoy preocupada por mi salud. Veo la hora y Christian tiene una reunión, pero siento que me desmayare en cualquier momento.

- Anastasia - me llama Christian por le intercomunicador - Ven a mi oficina - me pide y siento que será un gran esfuerzo llegar hasta su oficina.

- Enseguida voy señor Grey - digo y mi voz es muy quedada.

Camino lentamente sosteniéndome de las paredes para no caerme y poder llegar a la oficina de Christian, trato de sacar mi mejor sonrisa para no preocuparlo y entro.

- Dime amor - digo en medio de una sonrisa, pero un fuerte mareo me atraviesa y me sostengo del mueble.

- Nena ¿Qué tienes? - me pregunta preocupado Christian, pero siento que no tengo más fuerzas y todo se vuelve negro a mi alrededor.

Escucho a lo lejos un bip bip que no logro identificar.

Abro lentamente mis ojos y todo es blanco y muy limpio, lo que quiere decir que estoy en un hospital, giro mi cabeza y veo a Christian durmiendo en un sillón muy incómodo y mi corazón se estruja.

¿Qué fue lo que me paso? Me muevo un poco mientras trato de sentarme.

- Chris - lo llamó, pero esta profundamente dormido - Amor - lo vuelvo a llamar, pero no responde y ahora la que se preocupa soy yo.

- Despertaste - dice emocionada una señora con una encantadora sonrisa.

- Si señora - digo un poco incomoda.

- Mi hijo no se a movido desde que te trajo - me informa la madre de Christian y me preocupo más.

- ¿Cuánto llevo aquí? - pregunto y ella me sonríe con ternura.

- Un día y medio - me dice y me sorprendo - Estás muy débil y ya sé porque es - dice emocionada - Por cierto soy Grace la madre de Christian - dice mientras me tiende la mano y se la acepto de inmediato ¡mierda mi suegra!

- Hola soy Anastasia - digo y ella sonríe.

- La novia de mi hijo - dice y asiento sonrojada - Es un placer conocerte - me sonríe de forma maternal.

- El placer es mío - digo rápidamente mientras miro de nuevo a Christian - ¿Está bien? - le pregunto y ella asiente.

- No había dormido bien - me comenta y asiento, pobre mi bebe - hijo, Christian - lo llama mientras lo mueve y el gruñe.

- Madre déjame - dice mientras se acomoda mejor.

- Christian no le hables así a tu madre - le digo en forma de reproche haciendo que el abra de inmediato sus ojos y los enfoque en mí.

- Nena - dice feliz mientras se levanta rápidamente y me estrecha en sus brazos - Me asustaste - dice y lo abrazo.

- Perdóname, no sé qué es lo que me pasa - le digo mientras besos con ternura sus labios.

- Yo sí - dice la señora Grace - pero llamare a tu doctor Ana para que les comente mejor - dice feliz mientras sale de la habitación.

- Tú madre es encantadora, pero está muy feliz - le digo y el asiente con el ceño fruncido.

- Es verdad está inusualmente alegre - dice pensativo - en fin a venido Kate, su hermano, mi hermano, mi padre, menos mi hermana que está ocupada pero prometió venir - dice Christian y me sonrojo.

- Christian tú familia ya sabe de mí existencia - digo apenada y él sonríe.

- Claro que si nena, eres mi novia - declara y yo sonrió mientras niego.

- Te amo - le digo rápidamente mientras beso sus labios.

- Y yo te amo a tí - dice y me abraza.

-Veo que despertaste Ana - dice mí doctor mientras entra con unas carpetas.

- Si y quiero saber ¿Qué me pasa? - le digo y el asiente mientras mira la carpeta.

- Anastasia, tienes una anemia avanzada, pero la hemos tratado - dice y asiento eso ya lo sé - Pero debido a la gestación el feto toma más energías de ti, lo que hace que te debilites, es solo cuestión de descanso y de un buen control y todo irá bien - declara y siento que me perdí o no entendí más de la mitad.

- Espere - digo rápidamente mientras veo como el cuerpo de Christian se coloca rígido - Dijo ¿feto, gestación? - pregunta y el asiente tranquilamente - ¿Estoy embarazada? - pregunto con ojos muy abiertos.

- Si Anastasia tienes 3 semanas de gestación - declara y siento que mi mundo se mueve.

- Es imposible yo me cuido, tomo la píldora - digo rápidamente.

- Si pero estabas tomando medicamentos muy fuertes que bloquearon la eficiencia de la píldora - dice y no lo puedo creer.

- Seré abuela - dice emocionada la señora Grace.

- ¿Es una broma? - dice molesto Christian y eso me entristece - Ana no puede estar embarazada - dice frustrado mientras jala su cabello.

- Lo está, por eso su debilidad - declara mi médico un poco molesto por la actitud de Christian y siento mis ojos cristalizarse.

-Nos pueden dejar solos - le pido y ellos asienten mientras se retiran - Christian - lo llamo ya que está a espaldas mías - Yo no lo sabía, perdón pero ésto es hermoso - digo rápidamente pero él no me mira.

- ¿Hermoso? Anastasia, nos llevamos conociendo un jodido mes y ya estas embarazada, esto es estúpido una irresponsabilidad - dice enojado y siento como mis lágrimas corren libres por mis mejillas.

- Pero fue hecho con mucho amor y sé que serás un buen padre - le digo con cariño - Y sé que es muy pronto, pero es una bendición - digo tratando de que su enojo disminuya.

- Eres una estúpida - me dice molesto y siento como mi corazón se rompe - ¿Esto era lo que querías? ¿Enamorarme y luego embarazarte? - pregunta de manera brusca y eso sí que no, me levanto como puedo con mi suero al lado, me paro a su lado y le doy una fuerte cachetada.

- ¡A mí me respetas Grey! - le grito mientras mis lágrimas salen sin parar - ¡ Nunca quise ésto, pero ya está hecho, así que a mí no me salgas con estas mamadas que no lo hice sola! - grito fuera de mí y siento un dolor en la parte baja -- ¡y te me largas de aquí, no te quiero ver y si tanto dices que es mi culpa, te vas y no vuelvas! - finalizo mientras camino hacia la cama y me sostengo, pero el dolor es más fuerte.

- ¡Pues me largo! - me grita mientras camina hacia la puerta.

- ¡Y no vuelvas que no te quiero volver a ver! - grito pero me doblo por una punzada, oprimo el botón de la enferma y llega con mi doctor - me duele - digo mientras me sostengo.

- Acuéstenla - dice mi doctor y me revisa - Es una amenaza de aborto, suban sus piernas - dice mientras la miro y veo sangre en ellas.

- Mi bebe - digo en medio de un sollozo.

- ¡Rápido! - grita el doctor mientras me acomoda mejor en la cama, siento un pinchazo y mi cuerpo se siente liviano - Todo saldrá bien Ana, te lo prometo - dice mi doctor y yo solo asiento mientras me dejo llevar por los brazos de Morfeo...








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