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~Bárbara~

<<Anna sufrio un accidente>>

Claramente no fue un accidente, se que ese malnacido esta detras de todo esto.

La noticia me calló como balde de agua helada. Me quede parada en el medio de la sala y lo primero que atine a hacer fue salir. Necesitaba respirar. Me sentí tan culpable.

Me senté en la hamaca que Megan le había hecho poner a Travis. Ella ahora estaba unos días con sus abuelos, la extrañaba no lo voy a negar, pero ahora debía quedarse alli. Por su seguridad. No quiero que más personas salgan heridas por mi culpa.

El dia era templado. Habia sol pero no era tan fuerte, pero aún así me gustaba disfrutar de él. Frio y sol. Lo mejor del mundo.

Tome un largo suspiro. Y lo sentí sentarse en la hamaca. Me gire y efectivamente él estaba sentado detrás de mi. Me hizo ponerme entre sus piernas de modo que mi cabeza quedo en su pecho. Sus manos se apoyaron en mi abdomen y entrelace las mias a las suyas. Dejó un beso en mi sien y cerre los ojos al sentir sus tibios labios en mi piel.

-¿Como te sientes? - preguntó. Me habia dado el tiempo suficiente como para procesar todo lo que me contaron.

Mi cuñada estaba embarazada. Iba a ser tia. Mika y Theo habían peleado tan extremo que ella casi se fue. Y Anna había tenido un accidente que no resulto ser accidente. Fue un ataque del maldito malnacido. Pero lo bueno es que Ella esta organizando la boda.

-Muchas cosas para un solo día. - confese. -Me siento culpable y tengo miedo.

-No es..

-Lo se. -lo interrumpo -. Se que no es mi culpa. Pero tengo tantos sentimientos encontrados que...

-¿Lo sigues queriendo?- abrí mis ojos como plato. De verdad me estaba preguntando esto. No podía querer a una persona así. Es más aún no se como pide quererlo.

-No. - sentí que se relajo. -Te voy a contar algo que pocas personas conocen.

-No tienes porque...- dijo. Pero sentí la necesidad de contarle y de sacar esto de mi.

-Solo quiero que entiendas que no siento nada por él. -Beso mi cabeza y tome una larga respiracion. -Cuando tenía dieciseis años lo conoci, él es hermano de la ex-novia de Thiago. Me encanto su personalidad era el tipico chico malo.

-¿Y es atractivo eso? - se quejo Travis.

-Calla. - soltó una risita y comence a jugar con sus dedos.
-Era una mocosa. No sabia que demonios quería. Me hipnotizo, al principio era todo un caballero. Me puse de novia con él aunque a mis padres no les gustara. Ibamos a fiestas, carreras y todo ese tipo de cosas.

-¿Que tan rebelde fuiste?

-Esa parte es la que odio de mi pasado. - cerre los ojos. - Me escapaba, faltaba a clases, tomaba, fumaba, no consumi drogas si es eso lo que te preocupa. Toque fondo de la peor manera. Y tuve que tocar fondo para darme cuenta de la persona que tenia a mi lado.
Un dia lo vi con otra, mi supuesta mejor amiga. Pense que no habia nada. Desde ese momento él comenzo a maltratarme, me golpeaba y luego se arrepentia. Y yo como idiota volvia a creer en el. Debia ocultar loa moretones, aunque los hacia en lugares donde no podían verlos.

Me quede en silencio unos segundos. -Lo amaba. O eso creí.
Pero su amor era toxico, me maltrataba, me denigraba, me hacia sentir la peor persona del universo. Y aún asi lo amaba.
Hasta que mi hermano me descubrio. Mamá me vio al día siguiente y no pude ocultarlo más. Allí no termino el sufrimiento, mi harmano lo dejo en coma, paso meses cumpliendo una condena y a él no le hicieron nada. Y encima de todo me engañaba con mi mejor amiga, ella le daba lo que yo le negaba. Y me maltrataba por eso.

Las lagrimas caian sin control. El apoyo sus manos en mi cintura y me ayudo a que me volteara, quede sentada de frente sobre su regazo. Y me abrazo. Me abrazo tan fuerte que todo lo que en mi estaba roto, se volvio a juntar.

Sus manos se posaron en mis mejillas. -Nadie, tiene el derecho a hacer sentir a otro de la manera en la que él te trato. - su mandíbula se tenso. -Eras demasiado buena para él.

Acaricie su rostro. Y la barba de unos dias hizo cosquillas en mis manos. -Tu eres demasiado bueno para mi. - apoye mi frente a la suya. - Ahora le doy la razón a mi abuela.

El alzo sus cejas. Y bese su nariz. Se sonrojo y me pareció demasiado tierno. -¿Que te dijo tu abuela?

-Algun día alguien te abrazara tan fuerte, que todas tus piezas rotas se volverán a unir.

Mordi mi labio inferior. Y el me regalo una de sus bellas sonrisas. Amo con locura cuando sonríe de esa manera.

-Y ahora me doy cuenta de que lo que sentí con el no era amor.

-¿Tu abuela tenia razón?

Asenti. Mis manos jugaban con el bordillo de su remera, parpadee varias veces. -Si. Cuando me abrazaste senti que todo volvió a su lugar. A tu lado descubrí que se puede volver a amar. Me devolviste la ilusión, esas cosquillas en el estomago. Pienso en ti todo el santo dia, y eso que estamos juntos aquí y con Megan.

Sonrio y poso su dedo índice en mi mentón. -Eres último en lo que pienso cuando me duermo y lo primero cuando despierto.

Ante esta confesión mi corazon comenzo a latir fuertemente. Pareciera que se me iba a salir del pecho. El me hace sentir así. Amada y segura.

-Pues no quiero que esto termine nunca. Eres mi amor de verdad.

Apoye mi menton en su hombro. Y el acaricaba mi espalda. Me senti relajada y tranquila. Como si todo a nuestro alrededor se detuviera.

-Te quiero.

Susurre. El me alejo un poco para verme a la cara. -Repitelo.

-¿Que quieres que repita? - hice una mueca pensativa.

Sabía que era lo que quería que volviera a decir. Pero quería jugar un rato con él. Me divertía hacerlo enojar y hace mucho que no lo hacia.

-¡Repite eso que dijiste!

-Se más específico. No se a que de refieres.

Puso sus ojos en blanco e intento irse. Pero no lo deje.

-Olvidalo.

Lo tome por los hombros y lo obligue a que me mirase a los ojos. Pero intentaba esquivar la mirada. Y mientras yo jugaba el intentaba irse.

-¿Que te quiero? - Se hizo el serio. -Te quiero, te lo digo en serio. Nunca fui una persona que viera mucho su futuro y mucho menos con otra persona, pero ahora me imagino una vida, y te veo en ella. Ahora, después y cuando todo este maldito infierno se termine. La verdad no se porque pienso en ello, pero lo hago una y otra vez. Te volviste importante, y me volví un persona más feliz desde que estas aquí. Y eso me gusta.

-¿Por que tienes ese poder sobre mi? - lo mire confundida.

-¿Que poder? - respondí con otra pregunta.

-El de decir la cosa correcta en el momento justo. Tengo tantas dudas en mi cabeza. Tengo tanto miedo. -Comencé a dejar besos por su rostro. Y el sonreía ante ese gesto.

- Estoy yendo muy rápido nuevamente. - susurro contra mi boca.

Sus manos jugaban con el bordillo de mi remera y mi piel quemaba ante su tacto. Mis besos fueron bajando hacia su cuello, sentí como tembló ante mi no tan pequeño gesto.

- Bárbara... Si no te detienes, no voy a poder controlarme... -sus manos subieron a mi nuca y me acercaron perversamente a su boca. Sus ojos estaban más oscuros Que de costumbre y eso me gusto. Me gusto muchísimo.

-No quiero detenerme. Quiero que hoy sea ese día especial.

Su sonrisa creció. -¿Estas segura?

Lo bese. Quería ser suya y sentirlo mío. Lo necesitaba. Lo quería. Y me temía que esto sea más fuerte que lo que decía. Pero si este abismo me lleva a él, caeré con gusto.

****

Holaaa holaaa holaaa...

Espero les haya gustado. Nos leemos. Besos mil vale :)

Locuras Contigo -Editando-Where stories live. Discover now