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Maratón 2/3

~Mika~

Fragmentos de lo ocurrido anoche vienen a mi mente. Estoy recostada en la cama, mirando el techo con una sonrisa de oreja a oreja. Habíamos llegado muy tarde, solo llegamos Karolth, Theo, Thomas y yo. Lo que llamo poderosamente mi atención fue ver a Thiago durmiendo en la puerta de la habitación de Anna. Sus hermanos intentaron llevarlo a su habitación pero no hubo caso, se quedo allí. Y ya no se que mas paso porque me desmayaba del cansancio, pero lo que si recuerdo es que gritaba cosas como..

<<Anna... Eres mi perdición>> y ya no seguí escuchando porque se habrá quedado dormido.

Solté una risita, ese par nos va a dar unas vacaciones moviditas. Sonreí y puse mi dedo indice en mis labios recordando el beso que Theo y yo nos dimos anoche. y leves imágenes vinieron a mi mente.

~Flashback~

A penas llegamos al club decidimos bailar en el medio de la pista, arrastramos a Anna y luego nos separamos cuando Theo y Thomas aparecieron con sus tragos, Karolth le enseñaba a bailar a Thomas y Anna estaba parada bailando sola hasta que un chico muy atractivo se acerco a ella y se pusieron a bailar. Yo bailaba junto a Theo, quien en todo momento mantuvo su mirada en mi boca. <<¿Son alucinaciones mías?>>> Sacudí mi cabeza y continué bailando.

Se acerco lentamente, me quede quieta en mi lugar. Mojo sus labios y miro los míos. En menos de un segundo el estaba frente a mi, con su frente pegada a la mía esperando a que uno de los dos pueda articular una palabra, sin embargo, estaba tan lindo así, que no queria decir absolutamente nada.

Intentando acercarme a su boca otra vez el habló

-Te amo, Mika

Estaba en shock. ¿Mis oídos acaban de oír bien? Él... ¿me ama?

Algo dentro de mi se encendió. Él  despertaba los instintos más locos en mi interior.

Sin aguantar mas la corta distancia pego bruscamente mis labios con los suyos, lo cual lo tomo por sorpresa y le costo seguirme el ritmo. Mis manos rodearon su cuello y las suya mi espalda baja. Su beso era como tocar el cielo con las manos, como volar en una nube. Mi corazón latía a pisa y mi sistema respondía a sus caricias.

~Fin del flashback~

Tape mi cara con las sabanas, sonriendo. Él es todo lo que siempre soñé, la persona correcta.

Sentí que alguien abrió la puerta de mi habitación, mire de reojo y vi a Theo entrar. Me hice la dormida, no quería arruinar su sorpresa. Sentí que susurraba bajito alguna palabra que no logre descifrar. Intente reprimir mis ganas de reír de felicidad y saltar a sus brazos.

-Princesa... - susurro en mi oído, mi corazón comenzó a latir rápidamente - Ya es hora de levantarse...

Me quede en silencio, quieta y esperando que volviera a hablar. Sus labios comenzaron a trazar un camino de besos desde donde comienza mi oreja hasta la comisura de mis labios, me decepcione cuando se detuvo. - ¿No piensas despertar cielo?

¿Me llamo cielo? Sonreí, y comenzó a hacerme cosquillas. - Eres una tramposa, pequeña.

Recordé que debía estar con mis pelos revueltos, el maquillaje corrido y un aliento de perros. Me miro sonriente y fresco, el estaba bañado, con una aroma muy cautivador y yo... yo aquí toda desarreglada. Me levante de la cama rápidamente, el me miro confundido, intento hablar pero no lo deje.

-Espérame un segundo. - rió - Estoy echa un desastre.

Fue mi excusa perfecta, sentí que mi periodo estaba a punto de llegar y me daba vergüenza. Odio con toda mi alma ser mujer en estos días. Intente correr al baño, pero no me dejo. Agache mi mirada avergonzada, poso su dedo en mi mentón y me obligo a mirarlo, me perdí en la intensidad de su mirada.

-Hey, tranquila. No me interesa si estas despeinada, en pijamas, con o sin maquillaje. Así como eres, eres perfecta.

-Eres un amor. Y me encanta que me digas cosas como estas, pero de verdad necesito ir al baño.

-Esta bien, solo apúrate. El desayuno esta listo, y Anna despertó con un humor de perros.

Negué con mi cabeza, y solté un suspiro. Anna y un humor de perros. Definitivamente Thiago tuvo que hacer algo muy, muy malo para lograr poner mal a mi amiga. Y si las cosas no le quedaron claras, se las voy a dejar claras. Con mi amiga nadie juega.

Hice una mueca, beso mi frente y corrí, tome algo de ropa. Y entre al baño, definitivamente mi periodo había llegado, maldita sea. Me di una ducha rápida, cepille mis dientes y me cambie. Los cólicos se empezaron a sentir, y me quería morir, mis periodos suelen ser dolorosos. Cuando salí del cuarto de baño, Theo estaba sentando en mi cama, esperando por mi. Sonreí aún con dolor y note en su rostro preocupación.

-¿Mika estas bien? - pregunto caminando hacía mi. Me daba vergüenza hablar de estos temas y mas con un chico, pero realmente no estaba para nada bien, el dolor era insoportable. Toco mi frente, y luego acuno mis mejillas en sus manos. Asentí - ¿Sabes que puedes confiar en mi? ¿Estas en tus días?

Mordí mi labio inferior. Y asentí aun mas avergonzada. -Si... - intente alejarme - Muero de vergüenza.

-Cielo, no debes sentir vergüenza. ¿Quieres algún analgésico? ¿Un te? Lo que necesites solo pídemelo y yo con gusto lo traigo.

Sonreí y lo abrace. Su abrazo era todo lo que necesitaba. Sus brazos eran el mejor lugar para estar en momentos como este. El era perfecto y me sentía segura, amada y bien a su lado. Y esto me encanta. Prefiero estar mil veces entre sus brazos, es el mejor remedio. Apoye mi mentón en su pecho y lo mire, su sonrisa se extendió.

-¿Estas mejor? - asentí. - Ya sabes si necesitas algo...

-Lo se. Y gracias por esto...

Sus labios se pegaron a los míos, su beso era tierno y sincero. Las mariposas en mi estómago comenzaron a sentirse y me sentí bien.

-Bajamos Anna quiere hablar con todos.

***

Holaaa holaaa holaaa....

Maratón :) se viene la diversión... Digo jajaja... Nos leemos ;) besos mil vale.

Locuras Contigo -Editando-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora